Capítulo 68

739 45 6
                                    

Cuando bajamos del auto fuimos directo a su camerino, hacía mucho tiempo que no pisaba un set como este, había olvidado lo ajetreado que era todo eso. Había un montón de personas que iban de un lado para otro, desde los camarógrafos, los vestuaristas, las personas encargadas de la utilería y los actores, extrañaba actuar

– No salgas de acá – Me pidió Caro dejando sus cosas – Si alguien te ve, diles que vienes conmigo

– Ok...

– Igual, trata de que nadie te vea

– No entiendo que tiene de malo que me vean – Por mí no había problema

– Solo quédate acá – insistió – Pastelito

Sonreí como idiota, amaba cuando me decía así. Accedí dándome por vencido, ¿Qué se supone que haría acá? Yo quería verla grabar

– Vuelvo pronto

Caro sonrió satisfecha, me dio un pequeño beso y salió del camerino. Tome asiento y saque mi celular para distraerme, no había mucho que hacer por acá, de saber que me dejaría encerrado habría traído mi guitarra conmigo

Estaba revisando mis redes sociales cuando recibí un mensaje de Maxi

M: ¿Ya desayunaste? Muero de hambre

M: ¿Vamos a lo de Pocho?

A: Ahora no puedo, estoy con Caro

A: La acompañe las grabaciones

M: ¿Y...?

M: Ya se lo dijiste

A: Aun no

M: ¿Sigues buscando el momento perfecto?

M: Yo creo que solo deberías decírselo y ya

M: No sigas perdiendo tiempo

A: Tal vez tengas razón, debería pedírselo hoy mismo

M: ¿Qué estas planeando?

A: Creo que seguiré tu consejo

A: Deséame suerte

Guardé el celular y sonreí, se me acababa de ocurrir un plan maravilloso, no era algo grande, pero si algo cursi. Planeaba llenarle el camerino son sus flores favoritas y entonces cuando volviera se lo pediría, así de simple, sin lugar a fallas, iría directo al grano antes de que algo saliera mal. Lo único que tenía que hacer ahora era encontrar una forma de meter todas las flores al estudio sin que nadie lo notara

Estaba a punto de salir a buscar la salida de emergencias cuando el celular de Caro comenzó a vibrar, había salido tan rápido que lo había dejada acá. Miré el celular sobre la mesa durante unos segundos debatiéndome entre contestar o no, la última vez que lo hice no se lo tomo muy bien

Me acerque hasta la mesa para poder ver quien era. En la pantalla aparecía la foto de Leo, tal vez era algo importante, así que atendí

Llamada telefónica

– Hola cariño – Saludo – Perdón por llamarte ahora, pero mamá me pidió que te preguntara a qué hora vas a volver

– Hola – Respondí nervioso – Caro no está ahora, pero...

– ¿Agustín? – Pregunto sorprendido – ¿Qué haces con el teléfono de mi hija? ¿Dónde están?

– Estamos en las grabaciones, quise acompañarla y...

– Pásame a mi hija ahora

– Salió hace un rato y...

– Pásamela – Insistió

Punto y aparteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora