Celos

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Había pasado una semana desde que la ojiverde se fue, Camila no podía dejar de pensar en ella, en si la llamaría, en si estaría con alguna modelo...había tenido el teléfono tantas veces en sus manos, con su número marcado, pero nunca se animó a ello.

Estaba en el sofá de su casa cuando el teléfono sonó...

—¿Si?

— ¿Hola? ¿Se encuentra la "Doctora Maravilla"?

—¡Lauren! ¿Qué tal te encuentras?

—Bastante bien, acabo de terminar de leer algunos contratos ¿Y tu cómo estás?

—Bien, estoy bien, ¿Tus ojos que tal?—Camil no podía dejar de sonreír.

—¿Mis ojos? Bien, me operaste tú.

—Muy graciosa. ¿Sigues usando las gafas?

—Si...aunque he tenido que quitármelas un par de veces para la sesión de fotos.

—Trata de quitártelas lo menos posible—hizo una pausa antes de volver a hablar—me alegro de que me hayas llamado.

— ¿De verdad? Que bueno, a mi me alegra haberlo hecho, espero no haber interrumpido nada importante.

—Estaba viendo la tele—no estaba segura de decirlo pero era lo que sentía—lo cierto es que...te echo de menos.

—Y yo a ti, aun no me acostumbro a dormir sola.—Lauren confesó, mirando a través de la ventana de su oficina.

—¿Has...estado sola estos días?—esa duda no la había dejado vivir tranquila—lo siento yo...no es asunto mío.

—Si—aunque escuchó como la castaña se retractaba respondió—he estado sola estos días, muy sola para serte franca.

Camila no pudo evitar sonreír.

—Seguro tienes a todas las modelos tras de ti y mas con esas gafas, te hacen mas intelectual—trató de bromear.

—Ya te dije que esas modelos no me interesan, aunque no puedo negar que andan detrás de mí.

—Ya...

Camila se moría de celos, a veces prefería ir con ella que dejársela a esas buitres.

—Pero yo solo pienso en ti...¿Sabes? Nuestra cama aun tiene tu olor.

—Nuestra cama—repitió Camila— suena tan bien.

—Si... lo sé—Lauren sonrió—pero eso es, nuestra cama.

—Lauren...

—Dime.

—Te quiero...

—Y yo a ti Camz...

—Bueno...voy a tener que dejarte—la puerta de su departamento se abrió dando paso a uno de sus compañeros, Shawn.

—Camz preciosa, tenemos que irnos—le dijo.

La castaña asintió.

—De acuerdo hasta luego.—Lauren no pudo evitar sentir celos, ese tipo le llamaba "Camz", como ella le decía a la castaña...sin esperar mas terminó la llamada.

Al terminar la llamada lanzó a un lado el teléfono, no imaginaba que Camila empezara a salir y peor aun con un hombre.

Camila se quedó mirando el teléfono, no entendía por que se despidió así, si todo iba tan bien. Colgó el teléfono y fue con su amigo que la estaba esperando para ir a trabajar.

Lauren estaba mas que furiosa, condujo a casa casi de forma irracional se pasó un par de altos y al llegar a casa fue directo a la cocina, iba a empezar su ya famosa "noche de tragos" pero algo la detuvo, el solo recuerdo de su exnovia fue suficiente, se puso a pensar...no estaba lista para dejarla ir tan fácil, no quería perderla sin luchar siquiera.

Fue al salón tomó el teléfono e hizo una reservación en el primer vuelo que encontró, hizo una pequeña maleta y fue en busca de la castaña.

Infielmente enamorada (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora