Las cosas en Seabrook han cambiado. Zed y Addison siguen siendo muy felices juntos, pero nuevos peligros amenazan a esta "perfecta" ciudad. Vuelven los problemas, vuelve el amor, pero ahora... ¡con lobos!
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
— ¿Qué? —traté de ganar algo de tiempo para poder inventar una excusa creíble.
— ¿Qué dijiste, Wyatt? —repitió ante mi pregunta. No sabía que contestarle, así que ella solo siguió hablando.— Escuché algo de cachorrita y proteger. Espera. ¿Estás saliendo con alguien? Pensé que te gustaba Blair. Digo... hacían una bonita pareja y ya se lo dije a ella. Oh, no. ¿Ella lo sabe?
— Wynter. —la detuve.
— ¿Mucho? Mucho. Lo sé, lo siento. —dijo golpeando su cabeza.
— No estoy saliendo con nadie. Lo de cachorrita... pensé que Willa ya te había contado que así le digo a Blair. Y proteger.... que con Willa protegeremos a la manada. Al menos hasta que encontremos la forma de traer de regreso a nuestra alfa.
— Ah. —dijo entendiendo.— Pero no me negaste que te gustara Blair. —aunque era verdad, la miré con seriedad. Luego de esto, debíamos tener cuidado con ella. Comenzaba a pensar que podría descubrirnos en cualquier momento.— Lo siento. Mejor me voy.
Una vez Wynter se fue, me permití pensar en un plan simple. Solo... iba a ser yo, así que no podía darme el lujo de complicarme.
Bueno... ya es de noche. Así que ahora, solo me queda esperar hasta que amanezca, para poder ir a buscar a Blair sin que se den cuenta. Si todo sale bien, será una... interesante aventura. Si no sale bien, lo voy a lamentar.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Jamás estuve tan aburrida como ahora. Estos lobos solo se dedican a cazar y a pelear entre ellos como diversión. Al menos en mi manada hacemos más cosas. Además, allá tengo a Wyatt, Willa y Wynter.Tampoco es como si pudiera esperar más. Todos son jóvenes. No hay mayores, ni adultos y mucho menos cachorros. Willa jamás mencionó que esto fuera posible. ¿De dónde se supone que salieron ellos? Como sea... necesito salir de aquí cuanto antes. Y... buscar una forma de llevarme la piedra lunar.
— Alfa. —dijo el lobo que tenía la culpa de que estuviera en ese lugar tan aburrido, o como acababa de descubrir que se llamaba, Will.— Quisiera decirle que entiendo su confusión. Vivir engañada... pensando que pertenecía a otra manada, no es fácil. Quisiera ofrecerle mis servicios, para que pueda acoplarse a nosotros más rápido.
