Con amor, Grace.

Este soy yo

Cuando todo parecía transcurrir con normalidad, se dio un vuelco en el salón de música, Grace se encontraba conversando con los chicos como acostumbraban, cuando Leonardo decidió entrar a ver si obtenía algo acerca de aquella chica misteriosa.

Vamos, ¡canta, Grace! -musitó Ramiro-

¿Y si no quiero? -declaró Grace-

Gracie, ¡házlo! -exclamó Lucía entrelazando sus manos-

Canta esa canción de Disney, la de la serie que te gusta-habló Anne Marie-

En eso entró Leo y saludó a todos agitando su mano, lo cual les extrañó a los chicos.

¿Eres tú? -inquirió Grace-

Sí, soy yo. Chicos, soy un estudiante más, y por cierto, compañero de colegio. -dijo Leo sentándose al frente de Grace-

Es raro que no estés con tu noviecita-comentó John observando a Leonardo-

Ella y yo terminamos-soltó Leonardo-

Los chicos estaban en un estado de OMG del tamaño de Europa. Eso sí era algo nuevo en sus vidas, aunque Leonardo no era parte del grupo, sí sabían cómo era, o por lo menos dentro del colegio.

¿De pana?-preguntó Grace bajando del escenario-

Sí, anoche. -afirmó el chico- me di cuenta con lo que hizo ayer contigo, no iba a progresar en mi vida si seguía con ella.

¿Qué te hizo?-preguntó el club al mismo tiempo acercándose hacia Grace-

Nada, larga historia. -respondió ella cruzando los brazos-

¿Qué hacían? - preguntó Leonardo decidido-

Queremos que Grace cante algo, ya que no se decide a participar en el show de talentos, queremos que lo haga con nosotros-dijo Ramiro-

¿Tú cantas?-indicó Leonardo levantando una ceja-

Sí, pero solo para ellos.-contestó Grace subiendo un escalón-

Canta, no me burlaré-dijo Leonardo sonriendo-

Haré de cuenta que no tengo a Bustamante en frente de mí-afirmó Grace-

¡Házlo!-gritaron todos-

Grace decidió cantar "Taken on the world", la intro de una de las series más divertidas de Disney.

Al ritmo del piano iba cantando como solía hacerlo siempre, feliz, decidida a serlo cada día.

Leonardo no pudo contener aquella sonrisa, había descubierto en menos de veinticuatro horas quién era ella,la que le había cautivado con una canción, nunca pensó que sería tan sencillo.

Sin pensarlo, al terminar se paró aplaudiendo fuertemente, estaba tan feliz.

¡Ésa es mi mejor amiga, regia y poderosa!-gritó Ramiro-

Te adoro, Ramiro-respondió ella dándole un abrazo-

Cantas increíble, Hernández. Te felicito -dijo Leonardo sonriendo tierno-

Gracias, Leonardo. Por cierto, tenemos clase desde hace diez minutos, ¡Cabezas de Alelí! -indicó Grace tomando sus cosas apresuradamente-

Los chicos se fueron a su clase de literatura, en la cual todos fueron enviados a detención, como había advertido Cristóbal.

Sin embargo, su recorrido hasta la biblioteca sería interrumpido.

¡Grace!- gritó Arturo alcanzando al grupo-