Con amor, Grace.

Graduación y nuevos comienzos

Prometo luchar por ti cada día de la vida que tengamos juntos, sin importar si es un mes o cien años.

    Lucharé por ti, ser digno de ti cada día, por mí, por ti, por nosotros.

     Atte: Leonardo.

¡Es un romántico! -exclamaron Lucía y Anne Marie luego de leer la carta del rubio mientras terminaban de arreglarse-

Lo sé, y es mi novio -contestó Grace saliendo del baño con una gran sonrisa-

Mujer, ¿Quién eres y qué hiciste con mi mejor amiga? -inquirió Lucía con la boca abierta admirando a su amiga-

¿Estoy decente? -preguntó Grace colocándose la corona de flores que había comprado para la ocasión-

Amiga, ¡estás bellísima! -exclamó Anne poniéndose sus zapatos-

Bueno, -¡pero esta vez, iré en Converse, o sea de que bailaré bailaré y quiero disfrutar!-

Lo intentamos amiga -dijo Lucía dándole una palmada en el hombro a Anne Marie-

Lo intentamos Luci -contestó ella-

Después de darse los últimos retoques, las chicas optaron por bajar para encontrarse con los chicos

¡WOW! -gritaron impresionados-

¡WOW! -dijeron ellas al verlos-

¡Tú con traje, me impresionas cada día más! -dijo Grace mirando a Leo-

Y tú con vestido rosa, ¿qué es esto? -respondió él dándole una media vuelta a su novia-

-Ja, hay milagros.-

Lo sé, y milagros muy bonitos -indicó Leo con una pequeña sonrisa-

Oigan, ¿están listos para esto? -preguntó John-

-Oh, claro que sí nené- dijo Ramiro apoyándose en los hombros de su amigo-

¡Esperen, no tan rápido! -exclamó Andrés-

¡Sí, no se van a ir sin una foto juntos! -prosiguió Fabiana con la cámara en la mano-

¡Digan queso! -habló Andrés-

¡Queso! -respondió el club de los seis-

En ese momento se abrió la puerta, y como si no fuese suficiente ternura, aparecieron ellos.

¡Buenas noches gente! -dijo Cristóbal-

¿Dónde están las estrellas de esta noche? -preguntó Regina acercándose al resto-

¡Aquí estamos! -contestaron los chicos al unísono-

¡Hola Regina, hola papá! -dijo Grace para darles un abrazo a cada uno-

-¡Hola preciosa, hola todos-

-¡Hola profesor!-

Oh, vamos. Soy el padre biológico de Grace y ustedes prácticamente ya se graduaron, díganme Cristóbal. -dijo él haciendo un gesto de relajo-

¡Es que aún no nos acostumbramos, profe! -dijo Leonardo-

-Oh, y tú más rápido te tienes que acostumbrar al ser el novio de mi hija-

Cristóbal tiene razón Leo, o sea. Mira la suerte que tienes, ¡dos suegros muchacho! -dijo Andrés con tono sarcástico-

Sí, qué suerte señor. -respondió él rascándose la cabeza nervioso-

Bueno. ¡Déjenme decir que todos están guapísimos! -habló Regina dándoles una mirada rápida al grupo-

-¡Gracias Regina!-