—Soñé que yo era hombre y tú mujer.
—No digas tonterías, Sonica. Que raro sería eso.
—En mi sueño lo raro era esto.
Jamie Rose se rió. Ir caminando al lado de Sonica siempre sería un deleite para él, así dijera muchas ocurrencias. Después de todo, cada detalle de la eriza azul es lo que lo había enamorado tanto de ella.
El tiempo pasaba y Jamie deseaba que Sonica lo supiera, deseaba que se diera cuenta, pero eso no parecía ocurrir.
Al menos para él, porque realmente ya lo sabía.Él quería confesarse en algún momento, pero increíblemente aveces le ganaba la presión y además deseaba que fuera perfecto.
¡Quizá esta era la oportunidad perfecta!
—Oigan chicos, ¿No creen que es demasiada suerte y conveniencia que nos hayamos ganado este premio?
Llegó en medio de ellos dos, separándolos en el acto. Jamie suspiró y se aguantó las ganas de quejarse por esa inoportuna aparición de Knuckles.
—¿A qué te refieres, Knuckles? —le respondió la eriza.
—No lo sé, siento que había una necesidad específica de una fuerza mayor para que nosotros saliéramos de la isla, y ¡Pum! Que contesto una llamada de un concurso al que apliqué hace años y además casualmente me sabía la respuesta.
Sonica rió y Jamie rodó los ojos con una sonrisa divertida.
—Tienes razón, Knucks. Es raro que te sepas una respuesta... A cualquier cosa —le respondió el erizo rosa, queriendo picarlo.
—¡Hey! —hizo una pausa de dos segundos— ¡No sé qué responderte a eso porqué si no...!
Había alzado su puño en el aire como una especie de amenaza, pero Sonica calmó los ánimos separándolos con sus palmas.
—¡Chicos, chicos! Calma. Lo bueno de todo esto es que pudimos salir a despejarnos, ¿No? ¡Un crucero de lujo por tres días con todo incluído para cinco personas! Fue un genial premio, Knucks —ella golpeó suave en el hombro al grandote de forma amistosa. Éste sonrió.
—Bueno, supongo que lo fue. Ya quiero probar los hidromasajes y l-
—¡Ataque nucleaaaar!
Había comenzado a hablar Jamie pero se vio interrumpido por una voz un tanto aguda. Era una en particular que puso una enorme sonrisa en boca de la eriza al reconocerla de inmediato.
—¡OH NO! ¿Dónde? ¡No quiero morir!
Respondió en forma exagerada al juego que ya era conocido entre ellos dos.
Así, Tails le cayó por la espalda y se trepó a ella. Sonica lo sostuvo por detrás de las rodillas y comenzó a correr en círculos con él encima como si se tratara de vida o muerte.
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¡Ya no soy un niño!〖 Sontails Boom 〗
FanfictionSonica se ha estado sintiendo rara e incómoda respecto a la nueva relación de Tails con Zooey. ¿Qué es lo que pasará por su cabeza? Por otro lado, Tails se ha sentido muy confundido también al respecto, pero también molesto ya que según él, Sonica n...