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Narrador omnipresente.

Un silencio incomodo inundaba el despacho cuando los únicos presentes no eran más que el Señor Kim y Namjoon. Fuertes miradas por parte de Kim eran lanzadas como dagas a su hijo frente a él, quien se preparaba para hablar en su defensa una vez llegaran los demás. Poco tiempo después la puerta del despacho se vio abierta tras la llegada de Jin y Jungkook al lugar.

-A ti te quería ver -mencionó con rabia Jungkook caminando a pasos agigantados en dirección a su hermano.

-¡Detente! -ordenó su padre antes de que pudiera llegar a Namjoon-. Si alguien tiene que ponerlo en su lugar, soy yo.

-Padre... -se disponía a hablar Namjoon cuando una mano se abalanzó hacia su rostro estampándose contra él en una estrepitosa cachetada.

-No me llames así, no después de lo que has hecho -mencionó con enojo levantando nuevamente su mano para golpearlo-. ¡¿En qué estabas pensando cuando mataste a tu hermano?! ¡¿Por qué lo hiciste?! -gritó colérico tomándolo con fuerza de la ropa.

-Yo...

-¿Crees que matar a tu hermano solo porque sí es un acto heroico que debe ser aplaudido? ¡¿Estás loco o qué?!

-Quizás no sea un acto aplaudible como dices, pero fuiste tú quien me enseño que cuando hay una amenaza para mi familia primero se apunta y luego se pregunta.

-¡¿De qué hablas imbécil?! -gritó a todo pulmón golpeando a Namjoon con fuerza-. ¡Ahora me vas a culpar a mí de tu desenfrenada locura!

El señor Kim se encontraba muy enojado y colérico con su hijo, no podía entender como había podido llegar al punto de matar a su hermano. Su cuerpo era movido por los arranques de ira que segaban su pensamiento. Varias veces sus puños se vieron alzados contra su hijo, golpeándolo, una y otra y otra vez; pero alguien en el lugar no fue capaz de soportar tal maltrato en su presencia y se interpuso entre ambos recibiendo el golpe que ya se avecinaba hacia Namjoon.

-¡¿Qué crees que estás haciendo?! -le gritó a Jin quien se encontraba firme parado frente a él interponiéndose en su camino.

-No puedo ser partícipe de tal atrocidad; no puedo permitir que lo golpee sin cesar ¿Acaso no le basta con haber perdido a un hijo que ahora quiere matar a golpes a otro?

-Si no quieres verlo ¡márchate! y no te interpongas en mi camino, este idiota merece un castigo por sus actos.

-Y piensas castigar violencia con más violencia -comenta sin quitarse del medio.

-¿Acaso piensas defenderle? -interroga Jungkook metiéndose en la conversación.

-¡Si es así será mejor que te marches! -exclamó con enojo el Señor Kim.

-No pienso marcharme a ningún lado sin antes dejar en claro mi opinión; y muy equivocados estáis si piensan que quiero defender un acto tan atroz como el de un asesinato. Mi postura es neutra, no estoy ni a favor ni en contra de ninguna de sus acciones, pero eso no quita que quiera poner las cartas sobre la mesa. Usted Señor Kim consciente es de que llevo años en esta casa, presenciando todo desde el nacimiento de su primer hijo aquí presente, quien hoy quieres castigar por un acto que no ha sido más que el fruto de una mala educación. Por si lo olvidó, Namjoon nunca tuvo el amor de un padre porque cuando él nació usted se encontraba en prisión a causa de sus negocios sucios, los cuales hoy sigue practicando.

-¡¿Qué rayos quieres decir con tanta habladuría?!

-Para ser más preciso, Namjoon nunca ha recibido un acto de cariño proveniente de ti, desde que regresaste de la cárcel solo ha recibido regaños, golpes y gritos por tu parte. ¿Qué esperabas, que de un hijo del maltrato naciera un ángel? Pues no, este que hoy ves como un loco asesino no es más que tu vivo retrato.

Con los ojos vendadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora