Con los ojos vendados

14

Caigo sin fuerzas de rodillas al agua con él prendido a mi espalda… Puedo sentir como sus brazos se aferran a mí en un abrazo que me hace colapsar en llanto; sin poder evitarlo me vuelvo un mar de lágrimas, sollozos y alaridos de dolor incontrolables…
Jungkook hunde su cabeza en mi cuello ahogando en él su llorar, junto a un montón de palabras que no consigo descifrar.

—¡¿Por qué?! —consigo preguntar—. ¿Por qué no me dejas ir?

—Porque… —intenta contestar a mí pregunta pero lo interrumpo antes de que pueda hacerlo.

—¡¿Acaso conoces todo lo que he tenido que pasar desde que llegué a este maldito lugar?! ¡No quiero! ¡No puedo aguantar más! —grito con desesperación intentando liberarme de su agarre— ¡Suéltame! —exijo entre sollozos golpeando sus brazos para que me libere—. ¡Suéltame! —pido nuevamente al ver que solo se aferra a mi cuerpo con más fuerza—. Por favor, déjame... —pido con tristeza disminuyendo la intensidad de mis golpes.

—No me pidas eso… por favor…—suplica repetidas veces en mi oído antes de tomarme de los hombros y voltearme hacia él—; no puedo dejarte ir de esta forma…

El nudo de mi garganta me impide hablar, responderle, decirle que no me quedan razones para quedarme; que no puedo regresar… Puedo sentir como su respiración es descontrolada y sé que está llorando cada que sus palabras se quiebran al hablar; pero no puedo permitirme observarlo, sé que si lo hago no podré soportarlo, no podré continuar si él se aferra a mí de esta forma.

—Por favor… —escucho su suplicar y niego repetidas veces con la cabeza gacha sin observarle —. No me dejes solo en este infierno… no podré soportarlo…

Siento como mi corazón se estruja al escucharle hablar de esa forma y sé que ya no puedo más. Las fuerzas que había reunido para decirle adiós a esta realidad se esfumaron con el viento y por más que intento aferrarme a esa idea todo se desmorona cuando el tacto de sus manos se posan en mi rostro haciéndome abrir los ojos.

—Jungkook —susurro al observar su entristecido rostro bañado en lágrimas que no dejan de caer de sus enrojecidos ojos— Jung…

Pienso seguir hablando cuando la realidad golpea contra mi cuerpo. La adrenalina me había mantenido en pie lo suficiente como para llegar hasta la playa pero ya mis músculos se enfriaron comenzando a generar dolor. Repentinos calambrazos recorrieron mi cuerpo, las heridas comenzaron a arder más de lo que era capaz de soportar y mis piernas se vieron superadas por mi cuerpo haciéndome caer en los brazos de Jungkook.

—¡Young Mi!  —Me sujeta acomodándome entre sus brazos para sacarme del agua.

Mi cuerpo mojado comienza a temblar con el impacto del aire sobre él y siento como todos los dolores se van incrementando hasta dejarme en la inconsciencia…

…

Un inmenso pasillo oscuro se abre paso frente a mí sumergiéndome en el mar del pánico. Mi respiración comienza a acelerarse y mi cuerpo tiembla sin sentido mientras me encuentro parada en medio de aquel lugar…

Pasos, el sonar de un caminar se hace eco entre las sombras acelerando mi corazón, ese que solo quiere salírseme del cuerpo en busca de un rápido final. Los pasos incrementan su intensidad, puedo sentir como se acercan desde la distancia y corro; corro sin un rumbo fijo. Me hallo perdida entre la oscuridad que me rodea; no hay puertas, no hay nada más que un infinito pasillo…

Doy vueltas sobre mi eje con desesperación en busca de una salida pero no encuentro nada... Niego con la cabeza repetidas veces y me dejo caer contra una pared enterrando mi cabeza entre mis rodillas…