Tentaciones (Aokise yaoi)

18.

Tercera persona.

-Aomine Daiki- habla una mujer en tono frío- al fin logro comunicarme contigo. 

-¿quien eres y como me conoces?- habla el moreno fastidiado. 

-mi nombre es Alex Smith soy una representante de un equipo de basketball en América, nos ha llegado un video tuyo y nos interesa de manera grata tener una conversación contigo- Aomine suspira mientras le escucha- necesitamos que viajes ahora mismo a-

-no puedo ahora- habla serio el moreno- tengo asuntos personales que son importantes. 

-Aomine ¿sabe usted la magnitud de la oferta que le estamos haciendo?- pregunta la mujer lado de la linea. 

-y usted debe entender que cuando se trata de mi Omega, eso es prioridad para mi- habla molesto el moreno. 

-¿un omega?- pregunta ella- eso cambia nuestros planes- susurra en un tono mas bajo- estaremos en contacto, Aomine Daiki. 

Sin mas, la mujer corta  dejando a un moreno muy molesto, aunque decidido a buscar a Kise hasta encontrarle.

Aomine fue a todas partes, estaciones de policía, la empresa de Kise, cafés, centros comerciales, incluso, al hospital por si al rubio le había pasado algo, sin embargo, no había rastros de Kise.

Lo llamo, un numero incontable de veces, envió cientos de mensajes ¡incluso correos electrónicos! pero el teléfono de Kise no recibía la señal.

- ¿Dónde mierda estas? - habla enojado mientras regresa a su departamento, actual, departamento de ambos.

Sube las escaleras aun molesto, para encontrar a un moreno afuera de su hogar.

- ¿necesitas algo? - pregunta llamando la atención del mismo, quien se gira de inmediato y le sonríe al verle.

-estoy buscando a Kise Ryouta- habla el moreno y Aomine suspira.

-te me haces muy familiar- habla Aomine viéndole fijamente, hasta que recuerda- ¡Eres el idiota que acosa a Kise! - gruñe enojado para tomar al beta por el cuello- ¿Qué mierda haces aquí, bastardo? - aprieta cada vez más el cuello del moreno mientras el mismo intenta liberarse- ¿Dónde lo tienes? - habla muy enojado, a lo que el moreno lucha más por respirar.

-no se... de que hablas...- jadea el moreno mientras el aire se hace cada vez más escaso- vine... vine porque... su teléfono... esta apagado...- habla y Aomine le empuja.

-acosador de mierda, de seguro sabes algo- Yukio aun en el suelo intenta recuperar el aliento- habla, ahora- Aomine libera su aroma cada vez más enojado.

El moreno recupera la mayor cantidad de aire que puede antes de ponerse de pie para hablar.

-Tengo... un GPS en el teléfono de Kise...- habla esperando la reacción de Aomine- su teléfono estaba en la agencia y de pronto se apagó, no había más señal, pero en la agencia dijeron que no estaba ahí- habla el moreno y Aomine suspira.

-Entonces los hijos de puta me mintieron- habla el moreno golpeando la pared- fuera de aquí- habla Aomine sin mirarle siquiera.

Yukio obedece, no sin antes, dar una última mirada a Aomine.

El moreno regresa a la empresa en la cual Kise trabajaba y va con toda la intención de pelear con quien se le ponga en frente.

Entra sin siquiera escuchar las palabras del guardia en la puerta y prácticamente corre a recepción a increpar a la chica ahí.

-¡Dime ahora donde mierda esta Kise!- grita a la chica que se pone pálida frente a sus palabras y la manera en la que el moreno le veía.

-S-Señor... ya le había dicho que Kise no- habla ella alejándose, pero el moreno golpea la mesa.

- ¡Kise esta aquí! - grita más enojado, apretando los puños.

Los guardias del lugar al ver el alboroto deciden intervenir, a lo cual, no de ellos toma a Aomine por cada uno de sus brazos.

Pero Aomine esta decidido a tener una respuesta del paradero de su pareja, por lo cual, no duda en comenzar a pelear con los guardias.

El problema se agrava mas cuando alguien llama a la policía y Aomine es detenido, cosa que tampoco se da fácil, puesto que el alfa pone resistencia a todo tipo de contención.

Antes de irse, logra ver a un hombre mayor, alto, canoso, de ojos dorados que le veía de manera reprobatoria mientras era llevado a la comisaria, junto con diversos testigos de la agresión realizada.

Toman la declaración de todos, y Aomine queda en custodia durante toda la tarde mientras el presidente de la compañía es llamado a dar su declaración. Dicho hombre llega pasado la madrugada.

Cuando Aomine le ve, siente aun mas ira.

- ¡Tu estabas cuando me trajeron! - grita apuntando al mismo hombre que había visto la noche anterior.

-mi nombre es Ryoma, soy el presidente de la compañía en cuestión- habla serio el mismo hombre- vengo a hacer la declaración de los hechos ocurridos el día de ayer.

Un policía le lleva a un lugar aparte, mientras Aomine sigue maldiciendo al hombre a la distancia.

Una vez que termina la declaración, sale en busca del moreno.

- ¿usted es Aomine Daiki? - pregunta cruzado de brazos mientras el moreno no aparta la mirada del mismo.

- ¿Por qué un vejestorio como tu quiere saberlo? - pregunta de manera arrogante.

- ¿Por qué buscas a Kise? - pregunta de nuevo, a lo que Aomine se vuelve a alterar.

- ¡Ustedes bastardos tienen a Kise! - grita intentando salir de la habitación en la cual le tenían prisionero- ¡y no me dejan verlo!

-un hombre como tú, no tiene derecho a ver a Kise, menos en el estado emocional en el que te encuentras ahora.

- ¿Cómo estarías si te quitan a tu omega? - habla furioso- además ¿Por qué tanto interés en Kise? ¿quieres marcarlo? - Aomine ríe mientras le mira de manera altanera- has llegado muy tarde, ahora ya lo tengo marcado y con mi cachorro en su vientre- habla poniendo- así que busca a otro jovencito, viejo.

- ¿Cómo te atreves a marcarlo? - habla liberando su aroma molesto mientras se acerca al moreno- ¿embarazado? ¡¿Cómo has podido?! ¡Tu no tienes el de derecho de estar con alguien como el!

Aomine gruñe volviendo a intentar abrir la puerta.

- ¿Cómo he podido? - gruñe furioso sin apartar la mirada del hombre frente a el- ¡quien eres tu para impedirlo! ¡Kise es MI Omega! ¡MIO! ¡ya no hay vuelta atrás!

El hombre aprieta el puño en ira, mientras reprime sus intenciones de golpear al moreno, pero eso no puede impedir que su lengua cruel y malvada, reaccione a dicha provocación.

-entonces Kise tendrá que acostumbrarse a visitar a un delincuente como tu en prisión- habla de manera malvada- porque no pienso retirar ninguno de los cargos que se te han imputado- sonríe cruelmente- así que puedes comenzar a despedirte de tu vida- su cruel relato se ve interrumpido cuando un joven omega se acerca en compañía de otro un poco mayor.

- ¡Ya basta, Papá! - grita el rubio entrando al lugar mientras Aomine le mira fijamente, preso en la sorpresa de las palabras que acaba de pronunciar. 

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Lo siento por la tardanza, espero les guste u.u

*Corregido porque faltaba una parte :(