Tercera persona.
Kise Ryouta siempre ha sido una persona afortunada, las cosas se le dan fácil, si necesita algo, siempre hay un amable Alfa que está dispuesto a comprarselo, sin embargo, hoy había despertado con el pie izquierdo. Y tal parecía que había pasado debajo de cientos de escaleras y cruzado por el camino de muchos gatos negros...
Partiendo por temprano en la mañana, se levantó para ir a la sesión a las 6:30 de la mañana, su teléfono quedó mal conectado la noche anterior, por lo que, no tenía nada de batería, así que madrugo para ir a la sesión, pero ¡Oh, sorpresa! ¡La maldita sesión se había cancelado! Pero, claro, el no estaba enterado, y eso era porque su estúpido teléfono se había encaprichado con no cargar nada y no recibir ninguna llamada.
Enojado, decide salir en busca de algo que hacer mientras espera la hora, cabe mencionar que eran 4 malditas horas de diferencia, necesaria para ir a clases a la Universidad.
Salió luego de cargar un poco su teléfono, cosa que tardó más de lo que hubiese querido y debía comenzar a pensar que comer antes de ir a clases, pero apenas dio dos malditos pasos, chocó con un idiota y su teléfono se estrelló en el suelo ¡Y no volvió a prender!
Aunque su mala suerte no había terminado ahí, claro que no, el estúpido idiota con el cual había chocado no era más ni menos que Aomine Daiki, el Alfa más odioso de todo el mundo.
-¡Rompiste mi teléfono!- habla casi histérico mientras intenta hacerle prender.
-fue un accidente, deja de gritar- habla con fastidio y Kise le mira furioso.
-debes pagarme- habla enojado.
-¿Qué? Estas loco, no te pagaré nada- habla negando con intenciones de irse, pero Kise se cuelga de su brazo sin intenciones de soltarse- ¡Sueltame!
-¡No lo haré hasta que me pagues mi teléfono!- habla enojado mientras Aomine le mira con el ceño fruncido.
Se quedan mirándose durante varios minutos hasta que el moreno suspira negando.
-si lo hago ¿Te irás y me dejaras tranquilo?- pregunta viéndole serio y Kise asiente- entonces vamos de una vez antes que tu olor se me pegué.
Kise le suelta, ofendido y herido en partes iguales, para comenzar a caminar a su lado. Ninguno habla, pero Kise es quien más incómodo se siente.
-y... ¿Donde ibas?- pregunta Kise sin mirarle fijamente.
-no te importa- habla serio.
-¿Ser un idiota es tu hobbie? ¿O lo haces por deporte?- pregunta molesto, pero Aomine no responde, sólo sigue caminando sin cambiar la cara de fastidio que tenía.
Ambos se mantienen en silencio luego de eso, aunque a Kise le cuesta un poco más mantenerse callado, hasta que llegan a la tienda y Kise comienza a coquetear con el vendedor, un chico joven, de unos 20 años, alto, rubio, algo fornido y beta, mientras Aomine se mantiene a su lado de brazos cruzados.
-entonces ¿Qué modelo te gustaría?- pregunta el chico idiotizado por Kise.
-no lo sé... ¿Cual es el que un chico guapo como tu me recomienda?- pregunta coqueto mientras arregla la camiseta del chico.
-entonces... tengo algunos con diseños nuevos aquí- sonríe el chico guiandole mientras Aomine gruñe con un poco de fuerza por tener que seguir al rubio a todos lados.
El vendedor mira a Aomine un poco intimidado, por su expresión corporal y facial, además de que su aroma se libera con odio, irritado, pero como Kise le coquetea tan abiertamente, no encuentra problema en regresar el coqueteo hacia el lindo chico frente a él.
-bien, este me llevaré- sonríe Kise tomando uno de los teléfonos con diseños de estrellas y color azul, rozando de paso los dedos del chico, que se sonroja de inmediato- ¿No tendría algún descuento?- pregunta mordiendo su labio, sin dejar de mirar al chico, quien de inmediato cae en el juego del rubio.
-claro que si- sonríe el chico mirándole fijamente, totalmente encantado- aunque deberás darme tu número antes- susurra tomando la mano de Kise y el rubio asiente sin dejar de mirarle.
-claro, esperaré tu mensaje ansioso- sonríe sacando un lápiz de su bolso para anotar el número en la mano del chico.
-bien, iré a traer el teléfono para que pasen a la caja- sonríe emocionado el chico para dejarlos solos.
Kise sonríe mientras el chico se aleja, para luego girarse a Aomine.
-bien, supongo que es verdad cuando dicen que los omega coquetos tienen lo que quieren- habla molesto mientras Kise bufa.
-te conseguí un descuento por romper mi teléfono, agradeceme que te ahorre unos pocos dólares- habla de brazos cruzados y Aomine es quien bufa ahora.
Luego de pagar, ambos se van del lugar, Aomine apresura el paso dejando al rubio a solas, pero Kise recuerda que debe regresar por algo de comer, y que mejor lugar que aquel restaurante de comida rápida donde el simpático chico que atiende siempre le da comida de más, por ello, decide comenzar a caminar en la misma dirección de Aomine. Y es cuando lo ve...
Entiende de inmediato porque Aomine no está interesado en el, a pesar de que cada Alfa que conocía había caído a sus pies...
Entiende porque no reacciona a su aroma...
Entiende porque no le gustan sus feromonas...
Porque Aomine ya está interesado en alguien más, a pesar, de que quizás el chico no le corresponda y no tenga oportunidad.
Y eso, Kise lo sabe perfectamente, porque Aomine Daiki, el único Alfa que no ha caído en sus encantos, esta enamorado del novio de Akashi, su amigo de la escuela, Aomine está enamorado de Furihata Kouki, el pequeño omega temeroso de cabellos castaños y ojos de igual color.
Y es la gran sonrisa que Aomine le muestra al chico, que delata por completo sus sentimientos hacia el pequeño omega...
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Chan Chan Chan! No lo vieron venir jajaja
Por cierto, como ''regalo'' escribiré historias cortas de la pareja que deseen, por eso, pueden escoger la pareja y temática, por ejemplo, ''Aokise- omegaverse'', la pareja más votada será la ganadora y la temática será al azar. Serán 4 historias las escogidos.
Saludos y suerte!
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Tentaciones (Aokise yaoi)
Fiksi PenggemarKise Ryouta era conocido por hacer caer a cualquier chico a sus pies, pero siempre había tenido un objetivo que no lograba cumplir. Dormir con Aomine Daiki. Omegaverse yaoi