Sempiterno: Después de Negan (Glenn Rhee- The Walking Dead)

Capítulo 53

Hay que ir a buscar un cura a Hilltop. Ha pasado más de una semana desde que estamos en El Reino y aún no hemos salido. Hoy, un grupo saldrá a por el cura, y me temo que no voy a estar entre los afortunados.

-Ezekiel- le pido- ¿Puedo ir con el grupo de hoy?

-Gabrielle, sabes que aún estás en peligro por Negan. En busca y captura.

-Llevo más de una semana, Glenn tampoco ha salido y se supone que está muerto- protesto-.

-Precisamente por eso él tampoco sale. Porque está "muerto". Piensa bien ¿De verdad vale la pena arriesgar todo lo que has pasado para salvarlo? 

-Joder...- me quejo y levanto la mirada al cielo-.

-A Glenn no lo conocen los salvadores- interviene Naomi, que se acerca a nosotros-.

-¿Estás mejor de la cara?- le sonríe Ezekiel en broma-.

La verdad es que Naomi está amoratada aún.

-Pero mira, los salvadores no van a conocer a Glenn si sale en una patrulla de El Reino con la armadura. Hay muchos asiáticos en el mundo.

-Tiene razón- digo, supongo que Glenn lo tiene más fácil-.

-¿Glenn quiere ir?- pregunta Ezekiel-.

-¿Ir a dónde?- Glenn aparece inesperadamente y enredo el brazo alrededor del suyo con cariño-.

-Salir en una misión- responde Naomi-.

-¿Queréis que vaya a buscar al cura?- pregunta, parece que la noticia ha volado-.

-Si quieres- respondo- llevamos encerrados ya un tiempo.

-¿Por qué no?- se encoge de hombros-.

-Ezekiel... ahora sí que me tienes que dejar ir- protesto con infantilismo-.

-No, ahora sí que no. La mujer de Negan paseando con un misterioso asiático que casualmente no es su marido asiático desaparecido ¿Estás loca?

-Tiene razón, cariño- me dice Glenn-.

-No, por favor...- suplico-.

-Se acabó la discusión- zanja Ezekiel-.

Todos se preparan para la salida y me río al ver a Glenn con esas protecciones y armaduras oscuras. 

-Qué guapo estás- le digo y me cuelgo de su cuello-.

-¿Ah, sí?- se hace el bobo y me da un beso en los labios-.

Nos encontramos frente la puerta, a punto de salir el grupo. Pero sujeto aún a Glenn, me cuesta dejar que se vaya, que se separe de mí. 

-Gabrielle...- me sonríe- tengo que irme.

-Pero es que... mejor será que nos quedemos los dos- le digo-.

-Mira, toma- abre mi mano y saca algo de su bolsillo para ponerlo en ésta- volveré a por él.

Observo mi mano y reconozco su reloj de bolsillo. No puede ser. Sonrío.