Han pasado unos días desde que nos hospedamos en El Reino y aún no hemos salido fuera. Básicamente estamos como un peso, porque gastamos comida y suministros pero nunca salimos a recolectar más. Más es porque no podemos. A Rick se le ocurrió una idea y la habló con Ezekiel, así que se pusieron de acuerdo. Van a venir dos miembros más de Alexandria a pasar un tiempo en El Reino, mientras estemos nosotros. La cosa es que esos miembros sí podrán salir y ayudar como miembros normales, como deberíamos estar haciendo nosotros. La cosa es ayudar a El Reino, no gorronear. La cosa es cooperar, no aprovecharse. Si nuestra gente se mezcla así, los pueblos acabarán de entablar relaciones.
Entra el jeep y aparca a un lado. De éste bajan las dos nuevas personas que vivirán aquí con nosotros y ayudarán. Rosita y Naomi. El equipazo hispanohablante está junto, agarraos.
-Bienvenidas- las saluda Ezekiel- ¿Necesitáis ayuda con algo? ¿Habéis traído algo que cargar?- sonríe y aparece Jerry detrás de él- Jerry es muy bueno en eso.
-No, no te preocupes- sonríe levemente Rosita, saca su cuchillo del coche y se lo coloca entre los dientes para poder hacerse bien un moño alto- sólo nuestras mochilas.
-Llevamos poco- se encoge de hombros Naomi-.
Me acerco a ellas y apoyo el brazo en el hombro de Rosita.
-¿Cómo lo decidieron?- pregunto-.
-Voluntarias- responde a secas-.
Veo a Daryl a lo lejos, caminando por la acera, así que lo llamo. Nos mira sorprendido y se acerca. Está de mucho mejor humor últimamente.
-Hola- exclama y sonríe levemente mientras se rasca la parte trasera de la cabeza-.
-Hey- saluda Naomi y Rosita sonríe-.
-¿Por qué vosotras?- pregunta él también-.
-Voluntarias- se repite Rosita mientras Daryl observa en silencio-.
Ambas habitaciones están en el mismo pasillo que la nuestra y la de Daryl. Supongo que hay que ponerse manos a la obra. El grupo de El Reino que va a salir a por provisiones se adentra en el establo y las chicas los siguen. Al rato salen sobre caballos... yo también quiero.
-Os presento a Richard, Benjamin, Dianne y Daniel- los presenta Ezekiel- irán con vosotras a buscar provisiones.
El grupo sale y le cojo la mano a Glenn mientras nos dirigimos al interior de nuevo. Tenemos que ayudar a cuidar de un anciano enfermo y a mi me toca pasearlo en silla de ruedas por el pueblo.
-Cariño, ¿Tienes marido?- me pregunta la voz del anciano-.
-Sí tengo.
-Ah, muy bien. Eres una mujer respetable- me quedo en silencio ante el comentario, ya que el hombre nació en otra época diferente... además está enfermo y no es lo más adecuado-.
Pasamos por la parte de los huertos y las construcciones, donde Daryl y Glenn trabajan juntos en algo. Ambos elevan la mirada hacia mí, levantan la mano en saludo y se echan a reír. Hijos de perra, saben que no soy buena cuidadora. Me río.
-¿Es uno tu marido?- vuelve a preguntar el señor- El del chaleco- se ríe- tiene que ser ese.
-No, es el otro- respondo a secas-.
-Oh, no, no. No deberías estar con un chino, debes estar con alguien de nuestra raza, a tu altura- el comentario me irrita, pero demasiado, aunque no me importe lo que opine este señor-.
-Es coreano- espeto- y todos pertenecemos a una raza... el ser humano, nada de superioridad. Eso es racista- sé que no debería discutir con este hombre, así que tengo que ponerme un límite-.
-Niña, te falta mucho por aprender.
-Yo ya estoy más que aprendida- musito irritada antes de acabar con el paseo-.
-Gabrielle- se acerca Ezekiel a mí tras dejar al anciano en el cuarto- ¿Conoces a algún cura?
-¿Un cura? ¿Por qué?
-El anciano que has paseado, Henry, está en las últimas. Me ha dicho que quiere un cura para confesarse, por si acaso, antes de que pase algo.
-En Hilltop hay uno- sonrío, al final van a acabar haciendo lazos con los dos pueblos sin querer-.
-¿Hilltop?- sé que ha pensado lo mismo que yo- puedo... puedo mandar a alguien a buscarlo allí.
-¿No puedo ir yo?
-No estaría muy seguro- me advierte- de todas formas, háblalo con Rick.
Llegan los que salieron a por provisiones y Naomi se baja del caballo rápidamente. Parece molesta y pensativa, así que la sigo.
-¿Qué ha pasado?
-No ha pasado nada... pero aquí hay algo raro- musita-.
Daryl se acerca a nosotras serio.
-¿Qué caras son esas?- exclama- ¿Ha pasado algo?- ha pensado lo mismo que yo-.
-Supongo que no- responde Naomi antes de alejarse-.
Miro a Daryl, que está igual de confuso que yo. Oscurece, por lo que nos vamos a las habitaciones. Me tumbo contra Glenn, rodeada por sus brazos. Me siento protegida. Oigo un ruido, diría de pasos en el pasillo. No me mola. Me acerco a la puerta y abro disimuladamente, pero cuando veo a Richard la abro de golpe.
-¿Qué haces aquí?- exclamo confusa. Él se sorprende más que yo, por lo que me mira en silencio unos segundos-.
Está delante de la puerta de Naomi, y la de Daryl, ya que ambas están en frente.
-Ah, perdón- dice- buscaba la habitación de Henry, me toca cuidarlo esta noche.
-No es esta planta- le indico-.
-Sí, ahora que te veo me he dado cuenta- y se aleja con disimulo-.
Al amanecer, un grupo debe ir a dar la ronda, una vigilancia exterior. De verdad que quiero hacerlo, pero no sé si es seguro. Ezekiel manda a Richard a buscar a Rosita y Naomi, que están ayudando a hacer cestas de paja. Yo, mientras, hablo con Daryl y Glenn. Pero un barullo comienza a llamar nuestra atención hasta que nos interrumpe. Las exclamaciones exaltadas aumentan y observo un cúmulo de gente centrada en un mismo lugar. Entre la gente, salen de golpe dos personas peleando. Caen sobre el huerto, aunque ninguno se inmuta. Pero cuando me fijo en quiénes son, se me escapa el alma. Naomi y Richard.
Corremos hacia ellos, ya que la gente del pueblo no se atreve a separarlos. Se están revolcando en la tierra y rompiendo, con ello, algunos plantados.
-¡Naomi!- grito alterada cuando me acerco a ellos-.
Naomi le da un puñetazo a Richard y éste la sujeta por el cuello. Mierda. Me meto en la pelea para intentar apartar a Richard, hacer que se aleje de Naomi, pero éste me da otro golpe inesperado a mí y me caigo. Coloco mi mano sobre la zona latente de mi cara, atónita, no pensaba que hubiera que ponerse serios con gente de El Reino.
Glenn lo ha visto y rápidamente aparta a Richard de un gancho, tirándolo a un lado. Menos mal. Glenn se aparta el pelo de la cara, furioso, y se acerca a mí, para ayudarme a levantar. Su pecho está agitado, su rostro es muy serio. Pero en cuanto nos damos la vuelta, Naomi y Richard se han vuelto a enganchar y éste intenta asfixiarla.
Grito de horror y corremos, esta vez sí nos ibamos a poner serios. Pero entre la exaltación del momento, Daryl aparece detrás de él con una silla y se acabó.
Richard cae al suelo inconsciente y Naomi mira sorprendida a Daryl, sin aliento. Éste le tiende la mano, serio y furioso, para levantarla.Aquí estamos, ante Ezekiel, dando explicaciones. Carol y Morgan están con nosotros. Richard aún está inconsciente.
-Pillé a Richard intentando dejar en su sitio algunas provisiones que habíamos recogido ayer- explica Naomi, sus morados no van a desaparecer como siga así- él se dio cuenta de que lo hice, porque le pedí que me los diera de nuevo.
-¿Por qué iba a hacer Richard algo así?- pregunta Ezekiel, interrogándola-.
-No lo sé- se encoge de hombros- pero discutimos porque me dijo que no iba a ir hoy a por provisiones. Sabía por qué lo decía, así que pasó lo que pasó.
-Puede que sea mejor que haya un cambio de personas, ya que Naomi no se lleva muy bien con Richard- dice Ezekiel meditando- que venga a quedarse alguien en lugar de ella.
-¡Vamos! Y una mierda- escupe Daryl molesto- ¿La estáis echando por haceros un favor? El tío estaba haciendo algo raro y lo sabemos.
-Tiene razón- se encoge de hombros Carol-.
Ezekiel nos mira de nuevo, suspira y asiente.
-Gracias- comenta Naomi a Daryl al salir-.
Él asiente en silencio, luego entramos en las habitaciones. Ya ha oscurecido.
Glenn me tiende la mano y se la tomo.
-Me fijé en que no perdiste la alianza- susurra mirándola-.
-¿Cómo iba a perderla?- pregunto confusa-.
-Cuando fuiste mujer de Negan no te la quitaste.
-No me la voy a quitar nunca- sonrío-.
-Te quiero- musita antes de besar mis labios-.
Me agarra de la cintura y me coloca en la cama, debajo de él.
-Si los sueños se hacen realidad, debo haber deseado sobre una estrella- me susurra- porque nada en la Tierra se compara contigo.
-Eso es mío- me río por lo bajo en la oscuridad- recuerdo que lo dije la noche antes de todo. Me asustaste mucho cuando dijiste a Rick que me llevara a la Luna por ti- asiente- quedamos en que ibamos a visitarla juntos, ambos con vida. Vamos a estar juntos por siempre.
-Lo siento, estaba asustado.
-Pero si te soy sincera, esa fue la señal para que interviniera- sonrío y me mira- haría lo que fuera por ti.
Lo beso apasionadamente y tiro de él para que se apoye sobre mí, con la cabeza en mi pecho.
-No sé qué hacer con todo este amor por ti- susurro y es la verdad-.
-Supongo que dármelo- me responde con una sonrisa-.
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Sempiterno: Después de Negan (Glenn Rhee- The Walking Dead)
Hayran Kurgu-Atención- ¡¡Segunda parte de la novela Sempiterno!! Si no has leído la primera (Sempiterno (Glenn Rhee- The Walking Dead)) no debes continuar, pues contiene importantes spoilers. "Después de Negan" continúa donde lo dejamos. Gabrielle es secuestrad...