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Abraham....

Después de un agotador dia en el taller finalmente puedo volver a casa pero primero debo pasar por una estación de servicio a cargar nafta y luego sigo o esa era mi intención, porque apenas cruzo la esquina al cambiar el semáforo un auto se estrelló contra mi coche, la velocidad que traía hace que mi coche de dos vueltas y lo ultimo que llego a ver son muchos pies corriendo en mi dirección, mis ojos se cierran y no recuerdo nada mas, lo único que espero es salir vivo de esta, no solo por mi sino por mi familia.

...........

Mirco....

Mi teléfono suena justo cuando apago el coche y al ver que es de la clinica maldigo otra vez, tiro mi cabeza hacia atrás y atiendo.

Hola Micaela buenas noches...

Buenas noches, disculpa la hora pero te necesitamos otra vez....

Otro accidente de coche?...

Correcto, justo estoy por llamar a la familia ya que iba solo, pero antes me pidieron que te llame a ti...

Ok, ¿es un menor?...

No pero como iba solo tengo que hacerlo y por lo que veo en su documento es guapo...- noto la diversión en su voz.

Pudiste verlo?....- pregunto colocando el teléfono en altavoz para manejar tranquilo y que no me pare la policía obviamente.

No solo me dieron sus cosas cuando lo ingresaron, pero se lo ve lindo al tal Abraham...- en ese segundo mi corazón se frenó de golpe al igual que mi camioneta al pisar el pedal de freno, mis ojos pican y un nudo se formo en mi garganta y mi yo interno comienza a rezar porque no sea el, los autos que venian detras de mi por suerte pudieron esquivarme aunque me lleve un par de insultos por mi irresponsabilidad.

Estás ahí Mirco?...

Si, si Micaela...- logre contestar cuando finalmente pude tragar el nudo que se había formado en mi garganta.

- hazme un favor y dime su nombre completo...

Estas bien?..

¡¡Tu solo dímelo de una vez!!....- se que no debo hablarle así pero en este momento no me importa luego me disculpare como es debido.

Abraham Fernández de la Roca...

¡¡MIERDA!!...

Que pasa Mirco? me asustas...- podía sentir la preocupación en su voz, por lo que respire para tranquilizarme antes de responder.

Hazme otro favor, no le avises a nadie, yo me encargo, es de la familia....

Bueno y lo siento Mirco, avisaré que vienes en camino...

En diez estoy ahí...- acelero el coche, paso a algún que otro auto que iban muy despacio para mi desesperación y cuando ya estoy en el estacionamiento bajo casi corriendo, busco en mi bolsillo la tarjeta que me dieron las chicas y marco su numero por suerte atienden enseguida.

Hable...

Mara?...

No Maka, ¿quien habla?...

Mirco, soy Mirco...

Otra urgencia?...

Si pero esta vez te llamaba porque el paciente es Abraham...

¡¡¿QUE?!!...

Si dame dos segundos y te lo confirmo...- le hago seña a Micaela de que me de el documento y cuando me lo pasa efectivamente es el.

Si Maka es el, la recepcionista acaba de pasarme su documento, ¿te encargas de avisarle a todos?...

El Chico de Tacón RojoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora