-Prólogo-

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Las lágrimas caían por mis ojos sin siquiera pedirme permiso, era inevitable no sentir rabia ante esta situación, quería romper todo lo que se cruzara en mi camino, golpear a toda persona que se entrometiera en mis asuntos, sentía como mis estómag...

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Las lágrimas caían por mis ojos sin siquiera pedirme permiso, era inevitable no sentir rabia ante esta situación, quería romper todo lo que se cruzara en mi camino, golpear a toda persona que se entrometiera en mis asuntos, sentía como mis estómago ardía y las palabras no salían de mi boca, solo lágrimas, saladas e inútiles lágrimas.

¿Es que acaso todos me abandonan?.

¿Estoy destinada a estar sola?.

Mi abuela lloraba desconsolada mientras abrazaba a mi abuelo, por mi parte estaba en el suelo tomandome la cabeza sin poder creer lo que estaba pasando. Tío Ray... Él ya no existía, ya no estaba, me había abandonado, la única persona a la que amaba me había dejado en este mundo, sintiéndome asquerosamente miserable.

Horas mas tarde estabamos en la funeraria, la caja de madera era el símbolo de una desgracia, todos les daban sus pésames a mis abuelos mientras que a mi me miraban con lástima, yo solo necesitaba que alguien me abrace, sentía como la fría soledad me inundaba y tenía miedo, mucho miedo.

—¡Adam comportate!— exclamó en un susurro una mujer de extremada belleza, Marta. Al verme se abalanzó hacia mi y me envolvió en sus delgados brazos, no pude contenerme, mi cuerpo comenzó a temblar por los sollozos —Tranquila, todo estará bien— acarició mi cabeza mientras intentaba esconderme en su pecho, al fin una persona que me dejaba derrumbarme, desahogarme de la única manera que me enseñó la vida; llorando.

 Al verme se abalanzó hacia mi y me envolvió en sus delgados brazos, no pude contenerme, mi cuerpo comenzó a temblar por los sollozos —Tranquila, todo estará bien— acarició mi cabeza mientras intentaba esconderme en su pecho, al fin una persona qu...

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Todos nos habíamos preparado para asistir al funeral del Tío Ray, no era precisamente mi tío, en realidad era el mejor amigo de papá. Una noticia realmente mala, no imaginaba como podía llegar a estar papá, pero él se mostraba realmemte calmado, aunque sus ojos estaban hinchados, era señal de que estuvo llorando.

Nos subimos al auto, mamá manejaba mientras papá iba sentado en el asiento del copiloto perdido en sus pensamientos. Verlo de esa manera fue algo muy impactante, me imaginé si de la nada mi mejor amigo Salvador me abandonara, una punzada en el pecho hizo que sintiera mucha pena por papá.

Al llegar al lugar habia mucha gente, saludamos a las personas que conocíamos, la corbata me hacía picar el cuello, quería sacarmela. Solté un quejido.

—¡Adam comportate!— iba a replicar pero la silueta de una chica parada a un lado del ataúd hizo que las palabras no me salieran, mamá corrió hacia ella y la abrazó, la chica tardó en reaccionar pero cuando lo hizo se desmoronó en los brazos de mi progenitora, quería acercarme y decirle que dejara de llorar, que sus ojos eran demasiado hermosos para estar cubiertos de lágrimas. Pero no lo hice, simplemente me quedé observandola.

Una vez que se separó de mi madre pude verla con mas detalle, su cabello castaño oscuro caía en ondas por su espalda, sus ojos eran oscuros pero en su interior emitían un brillo que ninguna otra persona tenía. Me sentía desarmado frente a ella.

—Aylín, él es mi hijo Adam— nos presentó mamá, me acerqué con cuidado, sentía que si hacía un movimiento brusco ella se asustaria.

—Hola— no contestó, simplemente sonrío con tristeza.

—Adam te hará compañía, ¿no es así hijo?— la mirada de mamá era muy aterradora, por lo que no me pude negar.

—S-sí— mamá sonrió y se fue hacia donde había una pareja de ancianos.

Después de estar tres horas en aquel lugar donde solo se oían los sollozos nos dirigimos en caravana al cementerio donde sepultarian al Tío Ray. Cuando estaban bajando el ataúd la chica a mi lado comenzó a llorar, sin pensarlo la abracé con fuerza, sus lágrimas comenzaron a mojar mi camisa pero no me importó.

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Instagram: atenea_escritora

Amor en ocho ruedas [Pausada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora