Después de la fiesta pasó una semana en la que no vi a Adam pero me la pasaba pensando en él, realmente había vuelto, eso era algo que no me lo creía, siempre imaginé que nuestro encuentro sería de otra forma.
-—Trabaja Aylín, deja de estar en las nubes— me regañó Gastón tomando de su taza de café mientras observaba la pantalla de su laptop.
—Si señor escritor— estabamos en el restaurante de mi familia, Gastón solía quedarse por horas y horas bebiendo café suave y escribiendo en su computadora mientras que yo atendía a los clientes y limpiaba las mesas.
El sonido de la puerta llamó mi atención, un grupo de chicos entró y se acomodó en una de las mesas, no era cualquier grupo de universitarios si no que eran Adam y sus amigos, suspiré, ¿realmente tenía que ir a tomarles el pedido?. Patiné resignada en su dirección.
—Buenas tardes, ¿qué van a ordenar?— me preparé para anotar.
—¿Aylín?— levanté mi mirada y un muy entusiasmado Edwin me observaba, él era uno de los que mejor me había tratado cuando me juntaba con Adam —Hace tanto que no pasamos por este lugar, recuerdo que antes siempre veníamos con Adam— sonríe melancólico haciendo que se me escape una sonrisa.
—Lo recuerdo. Pero creo que es momento de que empecemos a ir a otros lugares— lo interrumpió descaradamente Adam mientras miraba el menú —Quiero un te verde frío, dos donas de...
—Chocolate y vainilla con glaseado de fresa— termino por él, pero sonríe con malicia y me desafía con la mirada.
—En realidad de naranja y limón con glaseado de vainilla— cierra el menú —¿Van a pedir algo o no?— habla un poco molesto, sus amigos asienten.
—Un batido de durazno y una porción grande de limon pie— Salvador me sonríe cálidamente, asiento.
—Yo quiero Coca-Cola y uhmm, tostado de jamon y queso— el tono de Edwin es notablemente incómodo.
—Yo quiero lo mismo que Edwin— habla David mirando la pantalla de su celular.
—Para mi un batido frío de helado de vainilla y flan por favor— tomo todos los menús y me retiro en silencio.
El ambiente habia cambiado drásticamente luego de que habló Adam, estoy segura de que sus amigos también notan que su personalidad ha cambiado demasiado. Preparo todo con ayuda de la chica nueva que acaba de entrar, es muy profesional y solo se limita a hacer lo que se le pide, me gustaría conocerla mas pero es muy reservada.
Con las bandejas cargadas patino en dirección de la mesa, todos parecen divertirse con los chistes de Edwin, él realmente es un chico muy carismático. Acomodo todo en la mesa y "accidentalmente" se me cae la bebida de Adam sobre él.
—Ups, lo siento— me disculpo con una sonrisa inocente, él me fulmina con la mirada.
—¿Qué estás esperando? ¿Por qué no traes algo para que pueda limpiarme?— su voz sale amarga, sin sentido del humor. Los chicos en cambio comienzan a reírse y empiezan a molestarlo.
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Amor en ocho ruedas [Pausada]
Teen FictionTras la terrible perdida de su amado tío, Aylín se sentía terriblemente sola, con la única compañía de sus abuelos quienes ya estaban muy viejos y arrugados como para darle un poco de emoción a su vida. Dejada por sus padres siendo una recién nacida...