Las palabras de Rubén seguían resonando en la cabeza de Julia una y otra vez. Las cajas de la mudanza de su amigo se iban amontonando en el salón y sentía cómo su corazón se achicaba cada vez que lo veía y él ni siquiera le sonreía.
—¿Comemos algo? —preguntó Mangel mientras entraba al departamento con comida recién pedida.
Julia fue a la cocina a preparar la mesa rápidamente y en cuestión de minutos los tres estaban en el salón comiendo como si no hubiera un mañana.
La situación de la mudanza de Rubén, la futura de Julia y Mangel, todo lo que había ocurrido días anteriores, Manuel, todo los tenía agotados y muertos de hambre.
—Creo que para la noche tendré todo empacado. Una amiga vendrá a ayudarme.
Julia no miró a Rubén, pero se moría por preguntarle qué amiga y le dolía que no le pidiera ayuda a ella. ¿Acaso estaban peleados? No, todo había quedado bien ¿no?
Se pasó el almuerzo en silencio escuchando las tonterías de sus amigos y pocas veces abría la boca para decir algo.
Una vez en su cuarto tomó una libreta y un bolígrafo. Quería sacarse ese peso de encima que la estaba agobiando.
Aquella foto en un retrato sobre su escritorio le provocó un nudo en la garganta de inmediato. Era mucho más difícil de lo que creía.
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El papel en blanco se encontraba frente a ella, pero no sabía cómo empezar. Tomo la lapicera, se acomodó en su silla y suspiró.
No podía. Su mente no funcionaba. No sabía qué era con exactitud esa presión en el pecho, pero la estaba molestando.
Volvió a ver la foto y sonrió. Ella también se sentía como en casa a su lado. La tranquilizaba la presencia de Rubén. No podía soportar la idea de que se estaba yendo. Se alejaba de ella.
¿Por qué le dolía tanto? Simplemente había terminado un ciclo, eso no significaba que dejarían de ser amigos. Estaban creciendo.
Julia ni siquiera estaba pensando en Manuel. Su mente y su corazón estaban completamente derramados sobre Rubén.
¿Y si era más feliz con él? Eso seguro. Lo quería de una manera loca y tan sólo estaba encaprichada con Manuel. Eso podía ser. No soportaba la idea de que su ex no la quisiera.
Qué importaba Manuel. Lo importante era Rubius y que lo estaba perdiendo. Tenía que decirle que lo quería y que intentaría con él lo que sea, porque... él era perfecto para ella.
El mismo humor, los mimos gustos, las mismas ideas. No por nada decían que eran iguales.
Afuera de su cuarto se escuchaba movimiento y murmullos. Rubén estaba del otro lado y ella tenía que decirle la verdad. Ella lo quería también, tan sólo necesitaba tiempo.
Se levantó de su silla y se acercó a la puerta. Tomó aire. Estaba preparada, no podía perder más tiempo. Abrió la puerta de su habitación y se encaminó hacia su amigo que se encontraba dentro del dormitorio.
Colocó una mano en el picaporte, pero no abrió. Del otro lado había una voz femenina que inundaba el silencio de la casa.
—Luego si quieres podemos ir a tomar algo, ¿Te apetece?
—Claro —dijo Rubén.
Julia pegó la oreja a la puerta y cerró lo ojos para tener total atención en la conversación. ¿Quién era esa mujer?
—No quiero agobiarte tampoco.
—No, que va. Me gusta pasar tiempo contigo, Gabriela, en serio. Pasa que ahora estoy un poco... desorganizado.
—Vale.
No sé escucharon más palabras, pero Julia podía notar que se estaban besando. Se despegó rápidamente de la puerta y se dirigió en puntas de pie y sin hacer ruidos hasta su habitación.
No podía decirle nada a Rubén. Por Dios, en qué estaba pensando. No podía arruinarlo.
Intentó serenarse y caer en la realidad.
Lo único en lo que debía enfocarse ahora era en la terapia. Lo iba a hacer por él.
Belu: ¿Me estás diciendo en serio?
Julia: si.
Belu: pero mujer por favor te lo pido
Belu: Desde cuando quieres estar con Rubius?
Julia: NO SÉ.
Julia: simplemente me di cuenta que es la persona que más me quiere, que siempre ha estado para mí y me ama
Julia: y creo que yo lo amo también.
Belu: nonono
Belu: estás teniendo una especie de cortocircuito en tu cabeza
Belu: Julia, tú no estás enamorada de Rubius.
Julia: y eso cómo lo sabes?
Belu: PORQUE HACE DOS DIAS ESTABAS LLORANDO POR MANUEL, ESTAS DE COÑA?
Belu: estás triste por tu ex novio y necesitas amor, cariño y contención y lo entiendo.
Belu: pero rubius no es tu solución en este momento.
Belu: entiendo que todas las cosas lindas que te dijo ahora están haciendo efecto, pero en una semana se te pasará.
Julia: igualmente no le diré nada. Está saliendo con alguien.
Belu: Jodeeer, ustedes no pierden tiempo, tío.
Belu: bueno, en fin, olvídate de rubius y enfócate en ti por una vez en tu vida
Belu: Vuelve a terapia y dedícate a estar bien contigo misma. Luego verás que hacer.
holi
cómo andan?
disculpen subir tan tarde el capítulo, pero estoy a full con las tareas del colegio y me quitan la mayor parte del tiempo.
