XV

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Juntos

Kaminari estaba abrazado a su cintura, haciendo un berrinche, embargado por la ebriedad mermando su lucidez.

—Kaminari-kun, ya déjalo ir. No puede faltar a su cita —intentó mediar Koda con su suave voz.

—Ya le escribí que iba ir a verla...

—¡No es justo! ¡¿Por qué tienes siempre una novia?! —se quejó, lloriqueando—. ¡Ni una sola desde que me hice héroe! Pensé que eso me haría popular...

—Nadie puede vencer el estilo Todoroki, hacerle frente es fútil —mencionó Tokoyami—. Ya deberías acostumbrarte.

—Creo que el único que puede hacerle competencia en ese ámbito es Midoriya —comentó Aoyama, bebiendo vino con toda la elegancia que lo caracterizaba.

—Usa su instant kill de niño bueno —se quejó Kaminari—. Los odio...

—No lo dices en serio. —Rio Koda quedamente—. A-aunque... Ashido me contó que es la novia que has tenido por más tiempo, ¿es cierto? N-no tienes que responder si no quieres, yo solo...

—Sí —dijo con aquiescencia—, y espero que estemos juntos por un tiempo más.

—¿Entonces vas en serio? —Aoyama alzó la cejas, esgrimiendo una sonrisa tan radiante como él—. ¡Me alegro por ti! Siento que has madurado en el ámbito a-mo-ro-so~ —Le guiñó un ojo.

—Siempre he ido en serio —comentó.

—Claro que no, viejo —espetó Kaminari, sosteniendo la botella de sake protectoramente al notar las intenciones que tenía Jirou de quitársela—. Siempre ambos se andaban exhibiendo el uno al otro.

—Creo que en eso te equivocas —intervino Tokoyami—. Todoroki no es el tipo de hombre que sale con otras personas, con ese fin... Simplemente, no había encontrado a la persona adecuada... —suspiró—. A pesar de que me alegro por él, ¿podemos dejar de hablar de esto? Siento que voy a deprimirme como Kaminari.

Denki separó los labios dramáticamente, sin poderse creer que su nivel de desespero fuera tal que ahora se había convertido en un punto de referencia. Por fin, soltó a Todoroki y este se colocó en pie de inmediato. Repasó la habitación, viendo el estado de cada uno de sus compañeros.

Ese día había pedido prestado el auto de la familia, así que podría llevar a cuatro personas a su hogar si se encontraban mal. Primero, se decantó por sacar a Midoriya del aprieto en el que lo tenía Mineta, haciéndolo beber más de lo que debía; luego, sus ojos se posaron en Uraraka, quien había empezado a hacer flotar cosas en un estado de ensoñación; Hagakure y Asui no habían podido asistir a la reunión, así que, como la persona responsable que era, creyó adecuado llevar con seguridad a todas las chicas a sus respectivos hogares.

—No te preocupes —saltó Ashido, sonriéndole brillantemente por su consideración—. Kirishima dijo que me acompañaría a casa, y mira que no ha probado gota de licor.

—Yo sí te acepto el aventón. Mañana debo trabajar —respondió Jirou, finalmente arrebatándole la botella a Kaminari—. ¡Deja de tomar tanto! Tú también deberías pensar en marcharte, tienes turno nocturno mañana.

—No seas aguafiestas, Kyoka~

La chica enrojeció, nadie supo si de ira o vergüenza, o quizás una mezcla de ambas.

—Es muy amable de tu parte, Shouto —dijo Yaoyorozu con suavidad, sosteniendo a Ochaco cuando se recostó de su hombro.

Todos se despidieron y Todoroki se encargó de llevar a Midoriya, tambaleándose de un lado a otro, pero no tan inconsciente como era usual. Cuando todos se acomodaron en el auto, Ojiro salió corriendo por la puerta del tabehodai en el que habían reservado.

Acuarela Facial || Todoroki Shouto x ReaderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora