VIII

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Incomprensión

—Los héroes hablan de honor y, helos aquí, tendiendo una vil emboscada.

La voz femenina habló. Su timbre delataba que era joven —dolorosamente joven, se dijo Todoroki—. Blandía una katana con experticia, rodeada de llamas púrpuras para darle un aspecto más dramático y tenebroso en la estrecha calle oscura donde los había interceptado, y caminaba hacia ellos sin temer las consecuencias de sus actos. Shouto no vio ninguna clase de kosei físico, por lo que lo descartó, figurándose que era ella quien orquestaba semejantes ilusiones. Al presentarse sola, aparentemente descuidada, pero a la defensiva, Shouto supuso que el aparente colosal grupo de villanos se reducía a un solo individuo.

Se puso en guardia y ella curvó los labios, notando cómo todos los policías dirigían sus armas hacia ella.

—¿Bajo qué cargos se me acusa —preguntó con suavidad a Kusanagi—, hermana?

La mujer siseó, ajustando el agarre en su automática.

—Sabes muy bien tus crímenes.

—Tu lema siempre ha sido "los crímenes sobre los lazos sanguíneos" —bufó.

—¡¿Qué significa esto?! —exclamó Ingenium, sintiéndose traicionado, sin poderse creer que, aun cuando la policía conocía el kosei de la villana, no se había atrevido a revelarlo.

—So-sospechaba que era ella, pero no tenía pruebas contundentes. ¿Pretendes que...?

—Se supone que eso son las investigaciones —intervino Pinky, exasperada—. Las suspicacia y las pistas nos guían a la verdad.

—La que estaba comprometiendo la investigación todo este tiempo siempre fuiste tú —concluyó Tenya, sin poder ocultar la impotencia en sus ademanes.

Todos se quedaron en silencio. La villana rio en voz baja, tanteando el suelo con la punta de su arma; que Shouto empezaba a creer era simplemente ornamental.

—No es momento para culparnos unos a otros —dijo finalmente Shouto cuando, de una grieta del suelo, empezaron a emerger varias serpientes.

Los policías gritaron cuando los animales se les enroscaron en las piernas, sus músculos tensionándose para amputar extremidades. El mismo Todoroki no podía caber en sí mismo del asombro por el raro comportamiento de los reptiles. Sin embargo, cayó en cuenta rápidamente. Eso no podía ser real. Para nada.

—Distorsión de la realidad, ese es tu kosei, ¿cierto? —habló, ignorando el pánico que empezaba a apoderarse de las personas.

—¿Te diste cuenta? —chasqueó los dedos y todos parpadearon, confundidos, algunos recularon varios pasos y otros cayeron de trasero.

—¿Por qué haces esto?

—La sociedad me...

—Cree que sus errores son culpa de la sociedad —espetó Kusanagi.

—¡Tú no sabes nada de mí! —Agitó la katana en el aire y varios policías gritaron, advirtiendo que podrían disparar en cualquier instante.

Shouto le lanzó una mirada furiosa a la agente. Si podía resolver eso sin tener que recurrir a la fuerza, lo haría. Iida y Ashido, mucho más empáticos que él, seguro podrían ayudarlo cuando él no hallara las palabras adecuadas.

—¿Decías? —preguntó Ingenium, notando las intenciones de su amigo.

—La sociedad me hizo así. Cada desperfecto de la ley, cada apertura judicial, cada omisión... —suspiró—. Es mi deber luchar contra ellas, sin importar que "los buenos" me consideren "malvada". En una sociedad tan trastocada como la nuestra, ¿en serio podemos hablar de los conceptos del bien y el mal cuando ambos términos han sido tergiversados a conveniencia de los mandatarios?

Acuarela Facial || Todoroki Shouto x ReaderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora