𝑣𝑜𝑐𝑒𝑠 𝑠𝑒𝑑𝑢𝑐𝑡𝑜𝑟𝑎𝑠 ;𝑛𝑠

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Capítulo dedicado a flaubertnovak ♡
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–Buenas noches, Chicago. Os habla Niall y estáis sintonizando la emisora WTLK. Estoy ardiendo con este horrible calor, ¿y vosotros?– dejó escapar un largo y lento suspiro que atravesó las ondas como una tórrida brisa – Procurad no perderos el programa de esta noche, porque apuesto a que vamos a disfrutar de una velada todavía mucho más caliente.

En cuanto oyó la voz de Niall, Harry dejó la carpeta con el contrato que pretendía revisar antes de la reunión del día siguiente e inmediatamente dedicó toda su atención al doncel que ocupaba sus pensamientos durante la mayor parte de la noche.

Hasta ese momento, no se había dado cuenta de que era precisamente esa voz cálida, y familiar lo que necesitaba después de haber pasado las dos últimas horas rechazando los avances en absoluto sutiles de una clienta que le había propuesto hablar de su contrato durante la cena.

Harry había aceptado la invitación de Barbara Palvin pensando que se trataría de un asunto exclusivamente de negocios, pero no había tardado en darse cuenta de que Barbara estaba más interesada en probar suerte con él que en oír hablar del estado de sus inversiones.

Harry sacudió la cabeza con incredulidad. Mientras él hablaba de la rentabilidad de sus acciones, ella le había frotado la pierna con el pie desnudo, emitiendo toda clase de sonidos de placer al saborear las ostras que había pedido para cenar.

Durante la cena, había insistido en que Harry probara de su propio tenedor todo lo que le habían servido. Después había vuelto a meterse el tenedor en la boca humedeciéndose los labios para saborear mejor cada bocado.

Tras el postre y el café, mientras Harry le presentaba un posible proyecto de inversión, se había inclinado hacia él con la excusa de ver mejor y había posado una mano en su muslo para deslizar los dedos hacia la cremallera de su pantalón.
Harry entonces le había apartado delicadamente la mano antes de que la situación se hiciera más embarazosa, pero a pesar de que todo indicaba que por parte de Harry no había la. menor atracción sexual, ella había insistido en terminar la reunión en su casa. Para desilusión de Barbara, Harry había rechazado su invitación con la excusa de que lo esperaba un trabajo en casa.

En realidad no era del todo falso. Harry tenía que revisar un contrato, algo que pretendía hacer durante las pausas que dedicaban en el programa de Niall a publicidad.

–Ayer por la noche estuvimos hablando de lo que los varones encontraban atractivo en una mujer, doncel. Esta noche, he pensado que podríamos continuar con el mismo tema, pero dando un paso más adelante. A menudo, me he preguntado por lo que debe esperar un varón tras su primera cita: ¿un beso? ¿Sexo quizá?
¿Y qué es lo que define lo que sucederá una vez haya terminado la noche? Oyentes varones, me encantaría oír vuestras respuestas. Y también las vuestras, queridos y queridas oyentes, ¿cómo os gusta que termine una cita? Las líneas telefónicas están abiertas, así que podéis empezar a llamarme.

El monólogo de Niall fue seguido por una ristra de anuncios. Aprovechando el descanso, Harry volvió a abrir la carpeta, pero su intento de concentrarse en aquellos legajos fue completamente inútil.

Su mente volaba hacia pensamientos mucho más tentadores, el más prominente de los cuales era la pregunta de cómo sería una noche con Niall. O una cita. Hablar personalmente con el. Reír junto a el y ver sus ojos chispeando de placer. Acariciarlo y experimentar el fogonazo del deseo mutuo sin ningún tipo de barreras.

¿Hasta dónde podría llevarlos aquella química? ¿Hasta un beso? ¿Hacia un profundo abrazo? ¿O hasta un rápido revolcón en la cama? Harry tenía sus propias ideas sobre lo que buscaría en una primera cita con Niall y se preguntaba si a el lo desilusionaría la lenta y provocativa aproximación que tenía en mente.