Capítulo 18: Homúnculo

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TEAGAN:



Unas horas después de mi más delicioso encuentro con mi mejor amigo y el inicio de una relación a la que aún no sé qué etiqueta colocarle, fuimos despertados por el jadeo de sorpresa de mis homosexuales amigos y el chillido de emoción que no se molestaron en disimular. Connor gruñó una maldición y se levantó, vistiéndose deprisa ante mi atenta mirada soñolienta. Se despidió, diciendo que me llamaría más tarde y estampó un beso en mi boca sin dejar de verme a los ojos con una clara mirada de "no vas a escaparte, estamos en esto ahora". Winnie y Bailey no me dejaron regresar a dormir hasta que les conté lo sucedido con lujo de detalles, a lo que estuvieron más contentos de lo que esperaba y aseguraron que estarían conmigo si algo de esto salía mal. Los abracé conmovida por su apoyo y luego les hice saber de una manera nada sutil que quería dormir y debían dejarme hacerlo o tendrían a una malhumorada descorazonada durante todo su domingo.

Desperté por la tarde, tomé un baño y esperé por la llamada de Connor, solo que eran casi las cuatro de la tarde y aún no tenía noticias de él. Estaba empezando a sentirme ansiosa cuando mi celular vibró en la mesita a mi lado, lo tomé con rapidez y exhalé con lentitud el aire retenido. Sin embargo, al deslizar mi dedo por la pantalla descubrí que en realidad se trataba de Hudson.

Hudson: Hola tú, ¿sigue en pie ser mi excusa para no ir a esa fiesta?

Mierda. Mil veces mierda. Olvidé por completo mis planes con él para ver una película. Hago una mueca y mastico la uña de mi pulgar, observando el mensaje con indecisión. Quería esperar a Connor y saciar mi curiosidad sobre lo que estábamos iniciando pero, por otra parte, quería salir a distraerme porque todas las emociones que experimenté desde la noche anterior me estaban asfixiando. No respondo el mensaje de Hudson y decido esperar una hora más a que Connor aparezca. Sin embargo, no lo hace y termino por responder.

Yo: Hola a ti. Creo que seré una buena amiga e iré a ser tu excusa a pesar de mi apretada agenda

Su respuesta no tarda en llegar y abro el mensaje mientras me levanto de la cama y busco algo para vestirme.

Hudson: Me siento halagado, ¿te espero fuera de la residencia a las 7?

Muerdo mi labio inferior, pensando. No quiero estar otras dos horas esperando por noticias de Connor y torturándome con todas los posibles resultados de todo esto.

Yo: En realidad, si no estás ocupado aún, podríamos adelantarnos un poco y vernos en 10 minutos, ¿puedes?

Hudson: Seguro, estoy libre ya. Te veo en 10 minutos

Yo: ¡Perfecto! Te veo abajo

Termino de vestirme, tomo mis llaves y celular, saliendo a paso rápido de la residencia. Llego hasta la entrada del edificio y espero a Hudson, mientras analizo con impaciencia los autos estacionados esperando encontrarme con el Mustang, pero sigue sin haber señales de él.

— ¡Hey! Teagan —escucho el grito de Hudson, por lo que me giro hacia el sonido y agito mi mano en saludo cuando lo veo trotar hacia mí, una de sus manos va a su cabello, peinándolo hacia atrás con lentitud, lo que me hace sonreír.

—Si estás tratando de hacer una entrada en mi visión con un sexy trote que hará hiperventilar a las chicas de por allá, creo que te está funcionando —alzo mis cejas repetidas veces y señalo con mi barbilla hacia unas chicas que lo observan sentadas en el césped a unos metros de nosotros. Hudson se detiene frente a mí y sus mejillas se sonrojan. Da una sonrisa tímida y un asentimiento hacia las chicas y creo escuchar a una de ellas suspirar.

Caótico Pasado (#1 Trilogía Vidas Tormentosas)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora