Merlin ~ Un nuevo Destino

7° El castillo de Fyrien

Era otro día. Yo me dirigí al comedor real, donde comían el rey, Morgana y Arturo... él decidió comer allí para cambiar.

Entré junto con Merlin, yo le llevé la bandeja de comida a Arturo. Yo estaba tras el príncipe y Merlin tras Morgana.

—¿Qué te preocupa, Morgana? —preguntó el rey mirando a su hija. Mientras comía y bebía un sorbo de su bebida.

—Es Gwen... No se ha presentado esta mañana. —Añadió Morgana preocupada. Yo la noté como hacía el papel de preocupación. ¿Por qué Gwen no había aparecido hoy? Fue extraño.

—Ella no es así —comentó el príncipe asaltando con preocupación. Su cara no expresaba lo que sentía, pero noté como tenía preocupación de lo que le habría pasado.

—No te preocupes, Morgana —dijo el rey y cogió de la mano a su hija— Si una sirvienta ya no es confiable podemos reemplazarla. —Vi como a Arturo se le abrieron los ojos como platos. ¿Reemplazar a Gwen?

—De seguro pronto aparecerá —dijo Arturo. Morgana le miró.

—Eso espero. —Sonrió, pero con una sonrisa falsa. Me preguntaba si ella tenía algo que ver con esto. Volví a mirar a Morgana, que estaba enfrente mía, y me miró con cara amenazante disimuladamente sin que Uther ni Arturo se dieran cuenta. Capté su mirada... ella sabía lo que estaba pensando.

《Más tarde》

Me dirigí al aposento de Arturo, él me llamó para hablar conmigo. Entré y le vi dando vueltas por toda la habitación... estaba nervioso.

—¡Martha! —dijo asaltando en cuanto escucho la puerta crujir. Yo entré y le miré.— Quería hablar contigo.

—¿De qué querías hablar, señor?

—¿Por casualidad sabes dónde está Gwen? No ha parecido esta mañana en la cámara de Morgana y no la encuentro en el castillo.

—Sí, lo sé. Estuve en la sala cuando Morgana lo dijo. Pero no, no la he visto. Desde ayer no la he vuelto a ver... —dije. Él me miró preocupado.— Y eso es extraño en ella. Gwen nunca desaparece. Siempre está para ayudar a Morgana y de pronto no aparece, es extraño. —Dije sin comprender. De repente, por la puerta entró Merlin. Nosotros le miramos.

—He encontrado esto en el aposento de Gwen. —Dijo Merlin mientras sostenía en sus manos un pedazo de trapo.

—¿Un pedazo de trapo? Merlin, es costurera —Dijo Arturo mirando a Merlin sin comprender. Yo miraba la escena.

—Huélelo —dijo Merlin. Arturo lo cogió y se lo acercó a su nariz, lo olió. Luego éste se cayó encima de una silla, sentándose encima. Yo miré extrañada a Merlin.

—¿Qué es eso? —pregunté. Miré a Arturo y estaba mareado. ¿Qué tenía ese trapo para que se desmayara Arturo?

—Es un compuesto de valeriana. —Dijo mientras examinaba el trapo y lo olía a distancia.

—Puedes noquear a un hombre con eso —añadió Arturo exhausto.

—O a una mujer. —Yo miré a Merlin. Luego Arturo nos miró, vi como nos miró sorprendido. ¿Gwen fue secuestrada?

Al día siguiente...

Me encontré a Merlin por el pasillo del castillo. Yo me acerqué a él para hablar de mientras andábamos.

—¿Supiste algo sobre Gwen? —pregunté queriendo saber. Él negó con la cabeza. De repente, al cruzar la esquina nos topamos con Gwen. Ella tropezó con nosotros, mientras recogía las prendas que se le cayeron de una cesta que llevaba. Nosotros nos asombramos.