Abro los ojos lentamente acostumbrándome a los rayos de sol que entran por mi ventana que amaneció abierta, me estiró en la cama y mis músculos están contraídos, estaba tan cansada que ni siquiera tuve pesadillas anoche. Miro la hora en el despertador y todavía tengo tiempo antes de entrar en el instituto, tomó mi teléfono que está en la mesa de noche al lado de mi arma los cuales Hugo dejo ahí cuando me trajo anoche y lo enciendo ya que lo deje apagado.
Tengo varias llamadas perdidas, cinco de David, una de Wesley, un imbécil que trabaja para Viktor, siete de Laura y una de Viktor.
¡Carajo! Cuando apagó mi teléfono todo el mundo me llama, y también tengo muchas notificaciones de mis redes sociales las cuales no uso mucho, pero esas decido no abrirlas, mi cabeza no tiene espacio para comentarios estúpidos y memes infantiles, además de muchos mensajes sin importancia.
Dejo el teléfono cargando y me levanto de la cama, me saco la chaqueta y la dejo en una de las sillas del cuarto, Hugo me quitó los zapatos y le estoy muy agradecida por eso y por muchas otras cosas también. Voy hacia el baño y termino de quitar mi ropa, la dejo en el piso y entro en la ducha, sentir como el agua de la regadera cae sobre mí es lo más relajante que he sentido en días.
Siento como si el agua lavara todas mis preocupaciones, pero esto es algo temporal.
Pongo las manos contra la pared dejando que el agua corra y veo las heridas en mis nudillos que están entre rojo y morado, se puede ver como la piel se rasgo en algunos lugares. Cierro los ojos y suspiro mientras tomó el gel de baño y lo esparzo por todo mi cuerpo.
Salgo de la ducha y me quedo de frente al lavado donde me cepillo los dientes y me miró al espejo durante un rato para después de terminar pensando en lo que Hugo me dijo anoche.
—¿Aún sigues ahí? —me preguntó a mi misma.
No, no lo creo, ya no soy la misma, deje de serlo hace mucho tiempo.
Obviamente todos cambiamos, es un proceso que viene con la madurez y el crecimiento, pero se supone que siempre queda una parte de ti que te recuerda lo que fuiste, esa parte de mi ya no está.
Una vez terminada mi rutina de limpieza salgo del baño y voy hacia el closet dónde me pongo un uniforme limpio y me siento en el tocador, seco mi cabello y me maquillo un poco ya que tengo que cubrir un ligero golpe que Hugo logro darme ayer y las ojeras que opacan mis ojos… Parezco un horrible mapache.
Termino de maquillarme y logré hacer un buen trabajo por lo menos, salgo del closet tomó mi bolso, el teléfono y salgo de la habitación lista para un nuevo día. Cuando llego a la cocina mi nana está preparando el desayuno, cuando se da cuenta de que estoy ahí voltea y me sonríe abiertamente.
—Hola hija, ¿Cómo amaneces? —vuelve a lo que estaba haciendo en la cocina.
—Bien Nana, ¿Qué estás preparando? —vuelve a voltear y me sonríe.
—Tostadas con huevos estrellados y tocino —pone un plato de tostadas en la isla de la cocina donde ya estoy sentada.
—Que bien, muero de hambre —ella sonríe por mi fingido entusiasmo con la comida y yo le devuelvo el gesto.
—Es lógico que tengas hambre, anoche no cenaste aquí y dudo que lo hayas echo fuera, cuando Hugo te trajo estabas muy cansada y era muy tarde —me pasa un vaso con jugo de naranja.
—¿Estabas despierta a esa hora? —ella asiente.
—Yo les abrí la puerta, tú estabas dormida así que supongo que no me viste, pero no podía dormir pensando en donde estabas —la miro con cara de reproche.
—Nana te dije que no me esperarás, era muy tarde, ya te he dicho que no te preocupes tanto por mi, yo me sé cuidar —le recuerdo.
Se que sospecha qué estoy metida en algo malo, he traído trabajo a casa un par de veces, pero prefiere no mencionarlo con ella o tenerla cerca de esas cosas.
De mi círculo de personas cercanas, las cuales no son muchas, los únicos que saben lo que en realidad soy además de David, son Jorge y Hugo, pero los mantengo lo más alejados de esto posible, sobretodo a Hugo.
—¿Cómo me pides eso Alissa? Claro que me preocupo por ti, eres lo que yo más quiero en este mundo, eres mi familia —me dice con lágrimas no derramadas en los ojos.
—Pero tú tienes una hija Nana, una verdadera hija que también es tu familia y nietos —mi nana trabaja aquí desde que mis padres se establecieron en este lugar por lo que me cuida desde que era una bebé, pero si, tiene una hija que ya está casada la cual ella prácticamente no ve.
Aunque no porque no quiera
—Una hija que es una ingrata y unos nietos que no veo casi nunca, tú eres lo más cercano que tengo —me bajo de la silla en la que estaba, voy hacia donde ella está y la abrazo.
No puedo evitar que las lágrimas se me escapen.
—Nana, tu también eres lo único que me queda yo te agradezco que te hayas quedado conmigo después de lo que pasó… —un sollozo lastimeros me corta.
No se que me pasa, en estos dos días he llorado más que en los últimos 3 meses.
—No hija, en eso te equivocas porque tú no me tienes solo a mi, también tienes a tus tíos, a tus abuelos, tus primas, a David y a Hugo que te quiere mucho —me separo de ella.
—Si Nana, unos tíos y abuelos para los cuales solo significo problemas, una prima que es una completa bruja y si tengo a Laura, a David y a Hugo, pero no es lo mismo, yo… Yo quiero a mis papás, yo quiero ser normal, preocuparme porque me voy a poner para la siguiente fiesta o que mis padres me regañen porque… No sé por… Cualquier cosa, los extraño tanto.
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Fénix "INCENDIO 1" (Borrador En Edición)
Hành động¿Que pasa cuando algo o mejor dicho alguien destruye tu vida y tú futuro? ¿Que ocurre cuando te destruyen en mil pedazos y te dejan roto para que nunca te puedas reparar? Todos los días pasan cosas horribles a personas que no lo merecen, cosas que l...