Capitulo 35

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Dos días sin ir al instituto y mucho pensar después entro por la puerta de la institución educativa Carter a paso decidido, aún es un poco temprano por lo que los pasillos están casi vacíos y voy directo hacia mi casillero para buscar unos libros que necesito para la primera clase.

Mientras lo hago y guardo otros que sacó de mi bolso siento la presencia de alguien detrás de mi así que me volteo.

Dios, creo que estarlos ignorando por dos días no fue suficiente.

—¿Dónde demonios estabas Alissa? —Dereck me enfrenta y no parece molesto sino más bien aliviado.

Además no está solo, Laura y Hannah están con el viéndose bastante molestas.

Mi mente empieza a reproducir lo que tengo que hacer, la razón de haberlos ignorando y el estar frente a ellos hace que quiera vomitar… Mi mente no está bien.

—Por ahí —respondo con simplicidad volviendo a mi tarea anterior y cierro el casillero.

—¿Por ahí? —pregunta Laura y su expresión me confunde, no es la primera vez que me desaparezco—. El martes te fuiste sin decir nada y por dos días, dos días Alissa, no llamas, no respondes mensajes, no das señales de vida, no llegas a tu casa y simplemente dices que estabas por ahí ¡¿Qué demonios te pasa?!

—Lau, ya cálmate —le exijo un poco molesta también—. Por si no lo saben tengo una vida fuera de esto… —les hablo a los tres señalando a mi alrededor—. Tengo otros conocidos con los cuales comparto y lamento no haberles contestado, pero no tenía ánimos de hablar con nadie, además no es la primera vez que hago esto y tú lo sabes muy bien Laura… ¿Es tan difícil entender que quería estar sola? —los miro dolida y sus rostros se transforman en incomodidad y luego culpa.

—Lo sentimos —dicen los tres y no puedo evitar reír porque parecen niños regañados.

—Se que se preocupan y se los agradezco, pero se cuidarme y simplemente hay veces que quiero alejarme de todos.

—¿Pero donde estabas? —pregunta está vez Hannah.

—Eso no se los voy a decir —respondo distraída apoyándome del casillero.

En realidad ni siquiera estaba cerca de aquí, fui a uno de los departamentos que tengo en San Diego y estuve encerrada ahí hasta ayer en la noche.

—Y no será que la razón o una de las razones por la cual te perdiste de la faz de la tierra por dos días fue el tremendo beso que le diste a Hardy en la práctica —afirma Hannah y la miro mal.

—Primero, puedo besar a quien yo quiera y no tengo porque avergonzarme de eso así que no empieces a insinuar estupideces —la señalo acusatoriamente y se ríe—, y segundo, no, no es por eso.

—Si y… ¿Por qué lo besaste? —pregunta está vez Dereck con diversión y yo lo miro mal a el.

—Porque puedo besar a quien quiera animal y no estoy en la obligación de dar explicaciones.

—Pero el te correspondió —Laura me da una mirada inquisitiva y ruedo los ojos con fastidio.

—Y de que manera… Eso fue intenso amiga —Dereck pone las manos en jarra haciendo una expresión exagerada.

No puedo evitar bufar con fastidio y darle la vuelta empezando a caminar, pero los escucho detrás de mi.

—Te gusta primis… —afirma Laura tomando mi brazo y enganchándose a el.

—No.

—Y a él le gustas tú —Hannah hace lo mismo con mi otro brazo y vuelvo a bufar.

—No.

Fénix "INCENDIO 1" (Borrador En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora