Bonfire Heart © [Tom Hiddleston Fanfiction]

XIV.

Hola!! /ñ_ñ/ pues aquí pasando a dejarles un nuevo capítulo, antes que nada quisiera decirles un par de cosas:

Me gustaría que todas comentarán, así podría conocer a más lectoras y dedicarles un capítulo del fic... mientras tanto empezaré a repetir dedicaciones desde hoy e iniciaré con Fernanda Feliz Ruiz que ha estado desde el inicio de este fic, muchas gracias por ello Fer! :D

Y lo prometido es deuda, al fin nuevos personajes *u* !Disfrútenlo! 

 El Sr. Silvertone se acercó hacia ellos a paso decidido:

– ¿Sr. Hiddleston me permite a mi hija? –preguntó Leonid, más por compromiso que otra cosa.

–Adelante –dijo Thomas para alejarse de la pista de baile y dejar a Clarisa bailando con su padre.

– ¿Qué hizo este actorsucho para que lo aceptarás? –dijo directamente Leonid a su hija.

– ¡Papá! –Exclamó Clarisa –dijiste que si venía con él lo dejarías tranquilo y es todo lo contrario. Lo prometiste. Además no entiendo por qué lo odias tanto.

–Mi cielo, quiero lo mejor para ti y eso no incluye al Sr. Hiddleston.

– ¡Pero no lo conoces!

– ¡Ja! Créeme mi amor, conozco a su tipo de personas, lo único que intento es evitar que te rompan el corazón.

–Pues ya soy mayor de edad como para cuidarme sola.

–No lo suficiente.

–De todas maneras, lo prometiste, así que será mejor que cumplas tu promesa porque si no lo haces te juro que… –no la dejo terminar.

– ¡Vaya! –Exclamó Leonid emocionado –Al fin llegan.

– ¿Quiénes? –preguntó Clarisa desconcertada volteando a todas partes.

–Ya verás, aquí vienen.

En ese momento dos hombres altos y elegantes se acercaron a ellos. Uno era mayor, de unos cincuenta y tantos, tal vez sesenta y el otro mucho más joven, quizá de mi edad –pensó Clarisa.

– ¡Normand! –Dijo Leonid extasiado al momento que se daban la mano y un abrazo.

– ¡Leonid! ¿Cuánto tiempo sin vernos? –mencionó el hombre mayor con un acento diferente.

–Ya casi tres años, tu hijo está muy grande –dijo mientras le daba la mano –todo un hombre ¿cuántos años tienes Marius?

–24 años Sr. Silvertone–dijo el joven, quién era bastante guapo.

– ¡Hombre! Dime Leonid –Clarisa abrió los ojos como platos, su padre no solía ser así de amable.

–Tu hija está cada vez más hermosa –dijo el Sr. Munro.

Es verdad mi hija –pensó Leonid. Estaba tan emocionado porque su plan iba a la perfección que olvidó lo más importante, presentar a su hija.

–Cierto, perdón amor –se disculpó con Clarisa quien tenía una expresión indescifrable –te presento a Normand Munro y su hijo Marius de uno de los clanes que fundaron Escocia –ella se sorprendió –Son una familia muy importante –le susurró Leonid al oído.

–Buenas noches –dijo ella. No sabía que más agregar.

–Es un placer verla al fin Srita. Silvertone, me han hablado mucho de usted –dijo Marius pícaramente. Ella solo hizo una media sonrisa, su sonrisa de compromiso. ¿Le han hablado de mí? Esto está muy extraño, aquí hay gato encerrado –pensó.