Una historia de lokos

De vuelta a la Tierra

¿Creíais que esta historia ha acabado? Jaja, pues no. Sí, se lo que he puesto como título en el capítulo anterior, pero como dicen por ahí, no juzgues un libro por su portada. Vale, eso no ha tenido mucho sentido. Da igual, lo que importa es que no he acabado, y como mínimo voy por la mitad de la historia, más o menos.

Cuando Loki les dijo a Odín y a Frigga que iba a ser padre, no se lo tomaron tan mal como él pensaba. Incluso Frigga se alegró de la noticia.

El único que no se enteró fue Thor, pero porque estaba en Midgard con los Vengadores. Por eso, cuando volvió a Asgard y nos vio no se alegró mucho de vernos por lo que había pasado en la Tierra.

- ¿Qué hacéis aquí? – gruñó al vernos.

- Esta también es mi casa – defendió Loki.

Thor mi miró a mí, obviamente sin estar de acuerdo con mi presencia.

- ¿Y ella? Deberíais de estar los dos encerrados.

- Ella también tiene derecho a permanecer aquí cuanto tiempo desee.

Volvió a Migard, supongo que para contarle al resto de los Vengadores donde nos encontrábamos. Apuesto a que se han pasado todo este tiempo buscándonos por Nueva York y alrededores.

- ¿Quieres volver a Midgard? – me preguntó -. Sé que allí estabas más familiarizada.

- Pero tú no. Tú estás familiarizado con esto.

- Ahora los importantes sois tú y el bebé.

- ¿No nos buscarán en Midgard?

- Thor ha ido a decirles que estamos aquí. No creo que sigan buscando en vuestro planeta.

Pues nada, volvimos a la Tierra. Nos volvimos a instalar en el piso donde estábamos antes Loki y yo, ese con todas las comodidades más modernas que hay.