Capítulo trece

89 15 1
                                    

CAPÍTULO TRECE

— Paige. — Parecía triste y débil. — Menos mal que te encuentro.

— ¿Qué pasa contigo? ¿Quieres mis disculpas y no me escribes ni un mísero mensaje? — Estaba enfurecida, y también le tenía rabia por lo que pasó en su casa. Sí. No se me ha olvidado que me dejó en la puta calle.

— Tenemos que hablar.

— ¿Por qué iba a querer hablar contigo? — Exclamo confusa.

— Tengo que contarte toda la verdad. — Elevo mis cejas.

— ¿¡Qué verdad Jasper?! ¡Vas a volverme loca! — Empiezo a elevar la voz, y aunque apenas nadie nos escucha porque están demasiado ocupados emborrachándose, Jasper se siente en un aprieto. Me agarra del brazo bruscamente.

— ¡Vámonos de aquí! — Con mi otro brazo tiro del suyo para que me suelte.

— ¡No, Jasper! No me voy ni a la puta esquina contigo. — Clavo mis ojos en él y suspiro profundamente. — Estoy harta de tu manipulación y de tus secretismos.

— Te estoy diciendo que te lo voy a contar todo. — Vuelve a agarrarme el brazo y automáticamente le planto un tortazo en su cara que hace que la gire ciento ochenta grados. Casi le parto el cuello en dos.

— ¿¡Te vas a marchar?! — Se enfurece.

— ¡Sí! ¡Me voy con mi novio a seguir siendo una persona normal! — Grité antes de darme la vuelta y seguir caminando.

— ¡Lamer sangre mientras follas no es de persona normal! — Me gritó mientras me iba.

Me paré en seco, ahora entiendo porque no quiere hablar de esto aquí, nadie nos prestaba atención pero mi mente no paraba de pensar que pasaría si a alguien le diera por escucharnos.

— ¡Qué te calles, hijo de puta! — Regreso a él y le vuelvo a empujar.

Se ríe. ¿Qué cojones? Parece que lo está disfrutando. Su cara es un poema. No sé si me empujará de vuelta, si soltará otra barbaridad por su boca o si...

— No puedes estar a dos bandas toda la vida. — Me agarra la cara y me pega bruscamente junto a él. Yo ida de nervios intento alejarme, pero su fuerza me tiene retenida por completo. — Estoy loco por ti. ¿Lo entiendes? Llevo esperando por ti toda mi puta vida. — Mi cara se encoje tratando de entender sus palabras. — Te necesito a mi lado para no quedarme sin oxígeno, Paige. Estoy perdiendo el control. — Enfoca a Elliott en su campo de visión. Lo mira con desprecio. — Me puede la rabia cuando te veo con él. Me consume por dentro saber que sigue tocándote.
— Y a mí me consumes tú cada vez que te tengo cerca. — Retiré sus manos de mi cara con un brusco movimiento de las mías. — Esto tiene que acabarse ya. Por el bien de ambos.

Ignoré todas sus otras palabras por completo, y me fui.

Me alejé esquivando a la gente mientras él se quedó ahí quieto, con decenas de personas bailando y bebiendo a su alrededor. Miré hacia atrás para observar que hacía y no se movía, era una figura inmóvil que hasta el momento, seguía sin encontrar la razón por la que actuaba de esa manera.

Finalmente me junté a Elliott, Arun y Tessa de nuevo.

— ¿Dónde estabas? — Me pregunta Elliott ya casi borracho. — Bebe con nosotros. — Cogió mis manos y las elevó al cielo incitándome a bailar.

Aunque al principio seguía dándole vueltas a todo en mi cabeza, los tragos hicieron que poco a poco empezara a disfrutar.

Los cuatro charlábamos y bailábamos. Yo lo estaba pasando realmente bien. Me enrollaba con Elliott cada tres minutos. Estaba muy excitado y me estaba excitando a mí. Sé que nuestra relación se ha complicado por mi culpa, pero si consigo apartar a Jasper de mí, todo será genial como hasta un par de semanas atrás.. Estábamos enamorados, pero mi mente me jugó una mala pasada con una persona tóxica y que solo trae problemas en mi vida.

Entre dos mundos [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora