Cansancio

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Arthit estaba cansado, solo llevaba tres semanas de su 8vo y último semestre de la carrera, solo tres semanas y parecía que el ex líder de los hazer no había dormido en meses, y era verdad. Coloco sus cosas sobre la mesa y se dejó caer en la silla, la cafetería de la facultad de ingeniería estaba casi vacía a esta hora. Cerró los ojos con fuerza y respiro profundo, le dolía la cabeza, tenía sueño, hambre y mucho, mucho cansancio. Estaba por quedarse dormido cuando el llanto de un bebé lo hizo saltar en su lugar, se puso de pie inmediatamente, movió la pequeña mecedora color verde que descansa en la mesa junto a su mochila y a la pañalera decorada de animalitos marinos bebé, rebusco en esta última hasta encontrar el biberón.

-tranquilo bebé- destapo el biberón y lo acercó a su pequeño hijo, en casa Arthit podía amamantar al pequeño, pero ahora estaba en medio de la facultad, y después de pasar su sexto semestre de carrera ligeramente embarazado el exhazer aún tenía una reputación que mantener. El pequeño Fiat Soleil Suthiluck había pasado sus primeros 5 meses de vida en la facultad de ingeniería, rodeado de estudiantes ruidosos del departamento de ingeniería industrial.

-N'Fiat, debes esperar a tus tíos y no comer sin nosotros- Brigth y los otros amigos de Arthit habían llegado con la comida de este.

-Calla, es solo un bebé- Toota se sentó junto a la mecedora de Fiat observando embelesado por la forma en la que el pequeño bebía ansioso del biberón casi vacío.

Knott le entrego un plato de arroz y carne con muchos vegetales, tenían cerca de 30 minutos para comer, aunque sus clases ahora eran menos pesadas para que tuvieran tiempo de trabajar en su tesis, el grupo de exhazer se turnaban para cuidar al pequeño, lo que disminuía considerablemente el tiempo que podían usar para dormir.

Cinco minutos después el biberón de Fiat estaba vacío y empezaba a llorar de nuevo. Justo a tiempo su otro padre apareció casi de la nada.

-Sawadee Phi...- Kongphob recién llegaba con un enorme vaso de leche rosa, y una bolsa reusable de la farmacia de la universidad.

-justo a tiempo tu hijo está llorando de nuevo- Brigth volvió hablar con la boca llena de comida señalando la mecedora en medio de la mesa. -¿trajiste los pañales?

Por más gracioso que sonase, eso era justamente lo que traía en la bolsa, los pañales de Fiat.

-sí, también traje toallitas húmedas, talco y más fórmula... -lentamente revisaba el contenido de la bolsa mientras la bebida dulce le era arrebatada de las manos.

-debiste traer condones también...- el murmullo suave de Brigth hizo reír a Prem y a los jóvenes estudiante de segundo año que habían llegado con Kong.

-esos los debieron usar antes ¿no lo creen?- Toota movía rítmicamente la mecedora de un Fiat que se había quedado calladito y sonriente al ver a su padre, que dicho sea de paso, le hacía muecas graciosas provocando suaves risitas.

-aún deben usarlos, es muy pronto para tener otro sobrino- Knott miraba a Kongphob con severidad mientras los demás le dedicaban miradas inoportunas a Arthit que seguía comiendo sin prestar atención a la conversación.

Tew y Em sonrieron cómplices de la travesura, y rebuscaron en la bolsa de la farmacia. –le compramos estos a Kong, también creemos que es muy pronto para otro bebé.

La mesa estalló en risas haciendo llorar aún muy espantado Fiat. Kongphob lo saco de la mecedora y consoló a su hijo.

-Nunca en tu vida me volverás a tocar 0062...- Arthit se limpió la boca y dio un último trago a su bebida antes de preparar un pañal limpio para su hijo. Quizás sonó muy duro con Kong pero él había visto esa sonrisa traviesa en la cara de su ahora esposo cuando sus amigos mostraron los paquetes de condones que le habían comprado. No podía negar que disfruto cada momento, cada segundo y cada caricia de aquel momento en que se entregó a Kongphob, pero ¿Quién les iba a decir que su método anticonceptivo fallaría?, peor aún, solo lo habían hecho una vez.

UN AÑO ANTES

-respira tranquilo nong, no voy a gritarte. –el medico que además era el cuñado de Kong, P'Pete, se puso los guantes y empezó con su revisión. Por lo general Arthit era muy hablador durante sus revisiones médicas, comentaba con el medico a cargo cada duda que surgía sobre su cuerpo y los cambios que se presentaban por más insignificantes que estos parecieran.

-todo en orden- el medico termino su trabajo y se quitó los guantes antes de escribir en su reporte – pensé que ustedes dos ya...- murmuro mientras se alejaba de su paciente.

-¿dijiste algo P'Pete?- Arthit bajo de la camilla y empezó a vestirse rápidamente.

-no, nada, es solo que...- el mayor se rasco la cabeza pensando en que él y Jay habían perdido $100 dólares en aquella apuesta.

-P'Pete... yo quería... quiero... yo...- el joven estudiante se sentó frente al médico, abotonando su camisa, e intentando formular su petición, que era en primer lugar por lo que había asistido a su consulta. -¿podrías darme algunos...? – la última palabra había quedado ahogada en su garganta. Por lo general Arthit podía conseguir docenas de condones gratis en su clínica, aunque nunca los usaba; su intención al cambiar de clínica era que P'Jay no se enterará, lastimosamente, había terminado en las manos de su cuñado; porque P'Pete era ya casi su cuñado ¿o no?

-¿necesitas condones nong?- el mayor despegó la mirada del reporte que escribía, su rostro dibujo una sonrisa malévola, que le recordaba a su hijo Kitt cuando le hacía maldades.

-no... si, tal vez... yo...- bajó la mirada escondiendo el rubor de sus mejillas.

-no debes avergonzarte, es normal que ustedes... ¿Por qué no hacemos que Kong entre? Él también debe escuchar esto. Cuidarse es cuestión de ambos no solo de uno.- Arthit no pudo objetar nada, en un segundo el medico ya estaba en la puerta llamando a Kongphob.

-¿puedo?- el más joven se asomó al consultorio, la pregunta estaba dirigida a Arthit, pero fue su cuñado quien respondió jalándolo dentro de la habitación.

-le decía a N'Arthit que cuidarse es cuestión de pareja, es decir de dos...- los primeros cinco minutos llenaron de rubor las mejillas de los dos estudiantes, la charla ya la conocían de memoria, y les recordaba aquellos momentos cuando de niños asistían a sus clases de sensibilización en el albergue. –por experiencia puedo decirles que los condones so siempre son la mejor opción- saco un gran puñado de condones decorados de Rilakkuma y los soltaba en el escritorio –considerando la lubricación natural de los donceles, y que ambos son jóvenes enamorados, y no dudó que más de un armario esté en peligro... -esa sonrisa malvada se dibujó de nuevo en el rostro del médico.

-¡P'Pete!- Kongphob se removió incomodo en la silla, definitivamente si quería un consejo, no volvería a contarle nada a su cuñado, aquella vez, después de su primer encuentro romántico en el armario del hotel, P'Pete le había sugerido llevar siempre condones, sobres de lubricante y pañuelos desechables.

Arthit miro furioso a Kongphob y golpea ligeramente el brazo de este.

-tranquilos, pueden confiar en mí, yo no le contare a la familia, no soy como N'Jay- sonrió de nuevo, y aunque sus palabras eran honestas, ninguno de los jóvenes pensaba en contarle cosas intimas en lo siguiente. –bueno... si están buscando métodos anticonceptivos, puedo proponerles dos,- el mayor sacó dos cajas del cajón de su escritorio y las coloco en sobre este. –Este,- señaló la caja rosa –es un tratamiento hormonal, es parecido a las pastillas anticonceptivas comunes, pero son un poco más fuertes ya que están diseñadas para donceles; este otro – tomó entre sus manos la caja roja – este es un medicamento nuevo, aún está en periodo de prueba, fue diseñado por especialistas de la Fundación, es inyectable y un poco costoso...- después de la palabra "inyectable" Arthit había dejado de escuchar, no, inyecciones no.

El camino de regreso a los dormitorios fue un tanto incomodo, ambos habían salido de la consulta con las manos llenas de condones de Rilakkuma sabor miel, docenas de sobres de lubricante de diferentes sabores, así como una botella grande de gel desensibilizador, y otras cosas que Arthit no recordaba de sus consultas anteriores, entre ellas sus pastillas anticonceptivas; que dicho sea de paso, ya no estaba tan seguro de dejar que Kong fuese el activo en la relación.

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⏰ Última actualización: May 04, 2020 ⏰

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