Mi Sol Después De La Lluvia

Capítulo 18

Iara:

Me empiezo a reír y no sé porque.

Habíamos salido de fiesta los cuatro y con Dylan estábamos llegando a la habitación.

- Shhh... - le hago a Dylan aunque en realidad no hacía nada.

- Sh, tú, loca.

- Loca tu abuela.

- Capaz.

Ahora es él el que se ríe y yo me voy a tirar a la cama.

Comienzo a cantar Superficial Love de Ruth B.

- 'Cause I'm not perfect, I'm flawed. And if you don't like that, get lost. - Dylan me mira atento y se apoya sobre sus brazos frente a mí.

- Si eso era una indirecta quiero decirte dos cosas, uno, eres perfecta, dos, jamás le largaré.

- Aún borracha logras que me enamoré de ti.

- ¿Lo voy logrando?

- Capaz.

Dylan se me tira encima y empieza a hacerme cosquillas.

- Dylan... Pesas - trato de hablar claro entre risas para que salga encima de mí.

- ¿Me estas diciendo gordo? - las cosquillas aumentan al igual que mis risas.

- Tú te dijiste gordo.

Ahora ha parado de hacerme cosquillas para ir dejando besos por diversas partes de mí cuerpo que estaban visibles gracias al vestido que llevaba puesto.

- Te verías más linda sin vestido, señorita Anastasia.

Sonrió pícaramente y le agarró del mentón para acercarlo a mí y darle un beso.

- Dios, Iara, te haré completamente mía en cualquier momento si me sigues haciendo eso.

Ahora yo estaba sentada encima de él mientras lo besaba y movía mis caderas por encima de su pantalón.

- ¿Podemos hacerlo? - Dylan busca mi mirada y mi consentimiento dejando el juego a un lado.

Le doy un beso y le tocó por encima del pantalón en modo de respuesta.

- Te amo, mi reina.

(...)

- ¡¿QUÉ HICISTE QUÉ?!

Estábamos en el restaurante del hotel y mientras que desayunábamos tuve la hermosa idea de comentarle a mi amiga que ayer lo hice con Dylan.

- Mierda, Iara, ¿te has enamorado o qué pasó?

- Mnjfsa.

- Español, ya te dije que inglés no entiendo ni de roce.

- No lo sé... Creo que sí...

- ¿Cómo "creo"?

- Es que no quiero precipitarme, aún capaz es pronto para hacer ese tipo de afirmación.

- Te recuerdo que fuiste tú la que lo beso por primera vez, le vomito y le dijo te amo, que era el amor de su vida y todavía, le propuso matrimonio.

Rio con recordar las anécdotas que está contando mi amiga. Por poco tiempo que lleve con Dylan, a veces sentía que lo conocía mejor que nadie o qué podría amarlo por lo que me quedará de vida, pero estas cosas no se las diría a Zoe, quería guardarme mis ilusiones para mí.

(...)

- Juguemos a contar secretos.

Francisco, Zoe, Dylan y yo, estabamos en una ronda en el piso charlando hasta que mi mejor amiga propuso lo que propuso.