Mi Sol Después De La Lluvia

Capítulo 24

Dylan:

—Yo, I'll tell you what I want, what I really, really want. So tell me what you want, what you really, really want. — Iara cantaba emocionada Wannabe de las Spice Girls.

Cuando estoy doblando la esquina de la casa de mi novia, a lo lejos son visibles las luces de coches de policías. Le dirigió una mirada a Iara que ya no estaba cantando. Cuando aparco al frente de la casa de Iara podemos ver el patio llenos de policías y vecinos que se acercaban.

Mi reina se baja lo más rápido que puede y se acerca a un policía.

—Yo vivo aquí, ¿Qué pasó?

—¿Usted es la hija de Larissa Stevens? — Iara asiente y veo como sus ojos están llenos de lágrimas por miedo y está apretando sus puños. —Ella apareció con un tiro en la cabeza.

Iara entra corriendo a su casa pasando por debajo de una cinta e ignorando los gritos de los policías.

—¿Dónde está Larissa? — le pregunta a un policía que estaba al lado de la escalera.

—Se la llevaron, ¿Usted es...?

—Su hija.

—Oh, bueno, usted tendrá que ir con aquel policía de allá — le señala a un compañero suyo que estaba apoyando contra un auto fumando un cigarrillo. — quién lo llevará a la morgue y usted la identificará, luego podrán hacer el velorio y el entierro. ¿Tiene usted su cédula de identidad? — Iara asiente y le entrega la cedula dejando que las lágrimas caigan. —¿Un tutor a cargo?

—No, solo éramos mamá, mi hermana y yo, mi hermana tiene 15 y yo soy mayor de edad, tengo 18.

—Bien, necesito que usted y su hermana vayan a la estación.

El policía se va. Iara sé gira hacia mi.

—Iara... — le abro los brazos y ella se tira contra mi pecho y empieza a llorar mientras que más policías entran a la casa.

—Dios... Dylan, era mi madre, no tendrá sentido nada ahora. — mierda.

Creo que mi mundo se derrumbara con ella. Ahora ni el helado podrá hacerla sentir mejor. La aprieto contra mi prometiéndome a mi mismo que no dejaré que nada le pase, no a ella.

—Iara, te vendrás conmigo, necesito cuidarte, no podré permitir que algo te pase. — ella seguía llorando y seguramente ni me este escuchando.

Iara solo asiente aunque se que es por instinto, no porque sea su respuesta.

(...)

—¿Cómo está?

—¿Como crees que está cuando se le murió su madre? — le contesta Kevin sarcástico a Zoe.

—Que gracioso, Kevin.

—No está bien, como es obvio, quiero que se vaya conmigo para casa, necesito cuidarla, no podría perderla. —le contesto a ambos.

—De ninguna manera, Dylan, lo siento mucho pero Iara irá conmigo y cuando esté bien podrá ir contigo, por momentos la cuidaré yo, es mi hermana más que amiga y no la dejare sola. — me dice Zoe cruzándose de brazos. Tenía razón, aparte será lo mejor para Iara y yo... Hablaré con mi padre después de tiempo y le pediré que ponga seguridad. El problema era Milagros.

—Milagros podrá irse con su abuela, Iara no tiene buena relación con ella así que es un rotundo no que ira. — me comenta Zoe.

—¿Lees mis pensamientos?

—Capaz.

Antes de que le pueda contestar Iara sale abrazada a Mili de ls morgue.

—No sé cómo pasó... Tendría que haber estado ahí. — dice Iara a la vez que se da la vuelta para mirar a su hermana. —Lo siento, Mili, en verdad lo siento. — las dos estaban llorando y yo miro a los chicos en busca de respuestas o para imitar sus movimientos ya que no se como comportarme.

—No es tu culpa Iara... Y no llores, sabes que mamá odiaba que lloremos, igual que la tía. — le dice Milagros pasándole una mano por el pelo a su hermana mayor. —No te preocupes por mí, yo iré con la abuela y yo confío en ti, en qué podrás solucionarlo todo y también confío en que encontraremos al culpable. — las lágrimas aún caían por el rostro de cualquiera de ellas. Mili deja de tocarle el pelo a Iara y se abrazan fuertemente. —No dejes de ser feliz, por mamá y por mí, no saques esa sonrisa tan linda y que tanto halagaba mamá.

Al verlas abrazadas veo la diferencia de altura entre ellas, seguramente Mili le saque como 10 centímetros a Iara y parece ella la mayor.  Y me doy cuenta que soy el único que nota ese detalle en un momento como este.

—Iara, lo siento mucho, sabes que estarás en casa y que te cuidaré, eres mi hermanita.  — le dice Zoe acercándose a mí novia.

Iara la abraza y al abrazo nos unimos Kevin y yo.

—Te amamos, por favor no te derrumbes, estaremos para ti siempre que quieras hablar o llorar y te compraremos cuanto helado quieras. — le dice Kevin acariciándole el pelo, para suerte de todos logra sacarle una risita.

—Yo los amo más.

Nota de la autora:

Cortito el capítulo, ¿Por qué? Porque simplemente escribí todo lo que quería y no sentía necesidad de escribir más, digo, ¿Quieren que termine el capítulo con un gato volando?
Bueno, capaz notaron que no actualice por un tiempo (6 días, tampoco es una eternidad, Candelaria) es que me tomé un "descanso".

Bueno, espero que estén disfrutando la historia <3 perdonen, soy muy mala pata narrar momentos malos o muertes, por eso podrán ver qué son un poco raros. Estoy editando la historia a medida que puedo para que sea mejor.

Besos chiques.

Cande ❤️