EL AMOR DE UN GIGANTE (OFFGUN) TERMINADA

cap 6

Al llegar a su casa, se metió a su habitación, su corazón no dejaba de latir, sentía adrenalina.

Jamás había visto a un gigante.

Se tranquilizó y comenzó a pensar.

Ese gigante no era como la gente decía que era.

Al contrario, era un chico normal como cualquier persona, solo que de gran tamaño, su cara era hermosa.

Se le había hecho muy guapo.

Así que se prometió volver a ir.

Off despertó de su siesta.

Vió la puerta de su habitación abierta y se preguntó si el la había dejado así.

No le tomó mucha importancia, pensando que el no la había cerrado, además quien iría? Nadie!.

Era loco pensar que alguien iría a verlo.

Le dió hambre y bajó, se dirigió a la cocina para comer algunas frutas que había cortado esta mañana.

Pero se sorprendió de lo que encontró en el comedor.

Había un pedazo de pan, rápidamente salió y comenzó a rodear la casa, pensando que había alguien ahí, pero no era así.

Volvió a entrar a la cocina y se talló los ojos creyendo que quizás se estaba volviendo loco.

Pero el pedazo de pan seguía ahí.

Se sentó y lo agarro.

Lo olió.

-diablos! Huele tan rico!.

Le dió el primer bocado y quedó maravillado.

Años que no probaba un postre tan rico.

Lagrimas comenzaron a correr por sus mejillas.

Realmente extrañaba las comidas de su pueblo.

Se preguntaba como es que ese pedazo de pan había llegado hasta su comedor.

-Quizás alguien entro?

-Nonono, imposible, nadie vendría aquí, quizás fue la bruja malvada que me convirtió en esto.

Era más lógico ese pensamiento, que esa bruja, le dejara algo.

Pero otra duda comenzó a surgir.

-dejé la puerta  de la habitaciób abierta?.

Ignoró por un momento eso.

Y solo se concentró en comer aquel postre tan delicioso.

En cada bocado que le daba, trataba de disfrutarlo lo más que podía.

Ya solo quedaba un poco, tenía ganas de comerselo todo, pero decidió guardarlo y comercelo para la cena.

Agarró su cuchillo y salió a cortar algunos arbustos que ya estaban creciendo.

Gun por su parte.

Seguía en su habitación, por su mente rodaba la imagen de ese chico gigante.

-realmente no es como la gente dice que es. Decía sonriendo.

Pues se le había hecho tan guapo, al menos dormido así se veía, un chico guapo y adorable.

Sin darse cuenta anocheció y escuchó el clàxon del coche de su papá.

Bajó corriendo.

-Papá!

-hijo! Que tal tu día?. Dijo Toptap