Eres gay? (POV de Cole)

• 𝑳𝒂 𝒇𝒊𝒆𝒔𝒕𝒂 •

(Narrador omnisciente)

Ese día, Cole se levantó más nervioso que nunca. No estaba seguro de si quería verlo a Billy. No sabía si lo del día anterior había sido algo de amigos o algo como lo que Cole sentía, que tampoco sabía lo que era. No estaba muy seguro sobre la parte de amistad porque él no tenía muchos amigos hombres. De hecho, sólo uno, y era Gilbert.

- ¡Cole! ¡Apúrate o llegarás tarde! - Su madre le gritaba desde abajo.

- Adiós mamá, te veo más tarde.

Salió de su casa y empezó a caminar hacia lo de Diana y su familia.

- Cole, ¿Cómo estás? - Éste se sobresaltó, pensando que era Billy, pero se calmó cuando vió que era Anne.

- Anne, hola - dijo suspirando. - Pensé que eras...

- ¿Quién? ¿Billy?

- ¿Qué? No, ¿Por qué? No, yo sólo... - ¿A caso Anne lo sabía?

- Relájate, sólo estaba adivinando.

- Está bien. ¿Vamos? - Retomaron el camino hacia lo de los Barry, hablando de sus cosas. Anne le contó que Marilla había tenido unos pequeños dolores de cabeza, pero que no era nada grave.

- ¡Anne! ¡Cole! - Dijo Diana yendo a abrazarlos. - ¿Les gusta la decoración? Minnie May y yo la hicimos. Nos inspiramos en una fiesta que hizo una vez la tía Jo. Fue muy difícil hacerla, porque... - Pero Cole dejó de escuchar, porque de repente vió a Billy hablando con Prissy, comenzó a caminar hacia él, sin ser muy consciente de lo que estaba haciendo. Él se giró y lo vió. Fue ahí cuando sus miradas se cruzaron, y Cole se dió cuenta de que sus pies tenían vida propia.

- Cole, hola - Gilbert lo salvó. - Quería preguntarte si estás mejor que ayer, ya sabes, estabas algo...distraído. Y pálido - Agregó.

- Estoy bien, Gilbert. Gracias. - Le hubiera gustado que esa charla durara mil años más, pero a la vez tenía ganas de hablar con Billy, parecía que tenía algo para decirle.

Billy no entendía por qué le molestaba que Gilbert fuera tan cercano a Cole y siempre hablaran tanto. Tampoco entendía lo que sentía hacia Cole, sólo sabía que era hermoso y quería ser cercano que un amigo...quería ser algo más, pero sabía que estaba mal, que nadie lo aceptaría y que Cole sólo se alejaría si se lo decía. Sin embargo, no se había opuesto al "beso" del día anterior, así que no estaba seguro sobre eso último.

Sabía que podría haberle pedido ayuda a Anne, pero la detestaba. No era que pensara que era molesta, pero era siempre demasiado positiva y optimista, además, hablaba demasiado.

De repente, algo interrumpió sus pensamientos. Más bien alguien.

- ¿Billy? - Era Cole - ¿Podemos hablar?

- Claro, ¿sobre qué? - A Cole le sorprendió que hablara con tanta tranquilidad como si lo del día anterior hubiera sido algo cotidiano, o como si ni siquiera hubiera pasado. Lo que le pasaba al de ojos marrones no era tan distinto, se estaba castigando internamente por haber actuado así, era obvio lo que él quería decir; que lo que había hecho era algo asqueroso, además de fuera de lugar, y que no le volvería a hablar nunca.

- Vamos a hablar en privado, hay mucha gente. - Cole lo tomó a Billy de la mano y lo llevó hasta detrás de un árbol que estaba demasiado lejos como para que a alguien se le ocurriera pasar por ahí. - Quería hablar sobre lo que pasó ayer... - Pero Billy lo interrumpió, pensando que ya salía lo que el rubio le iba a decir.

- Lo sé, no debí hacerlo y estuvo mal, y entiendo si no quieres volver a hablarme.

- ¿Qué? - Cole lo miró con una cara de extrañeza y una especie de sonrisa formada en su rostro - No, no era eso. Es que... Ese beso que me diste... - Billy lo miró a los ojos y Cole sintió como empezaba a sonrojarse - Me gustó. Billy, tú me gustas.

- ¿En serio?

- Bueno... No estoy muy seguro - Dijo Cole rascándose la nunca - Pero creo que podríamos... No sé, tal vez... - pero Andrews lo interrumpió otra vez, dejando un suave beso en sus labios, que el otro correspondió, con algo de torpeza.

Los dos se separaron por falta de aire y se sonrieron con cara de bobos. Cole bajó su mirada a los labios rosados de Billy y lo besó otra vez.

- Oh... Lo siento - dijo Jane, la hermana de Billy, que estaba pasando por ahí. Le lanzó a Billy una mirada pícara y se fue. A ella no le molestaba en lo absoluto que ellos dos estén juntos, ni nada por el estilo.

Billy se rió y le dio a Cole un beso corto. Luego, volvieron hasta donde estaba todo el mundo y siguieron con la fiesta, pero ninguno de los dos podían borrar esas imágenes de su mente.