El Decreto de Enseñanza n.° 24
Fui a hablar con Dumbledore ha hacer el reporte de lo que estaba sucediendo. Dumbledore se rio muchísimo. De todo lo que estaba pasando.
-¿Y quieren que Harry les enseñe Defensas Contra las artes Oscuras? -dijo reprimiendo una risita.
-Si -dije sentada delante de su mesa-. De momento hay veinticinco a parte del trío de oro. Pero tengo la ligera sospecha que no todos están conformes.
-Ya veo -se metió un caramelo de limón en la boca y me dio otro a mi-. ¿Y también quieren que los enseñes tu?
-Eso parece -suspiré-. Supongo que ahora intentarán acercarse demasiadas personas.
-Lily -me dijo serio-, quiero que ayudes a Harry a enseñar a los otros -lo miré extrañada-. El ministro piensa que quiero convertirlos en guerreros, y les ha quitado la asignatura que les ayuda a defenderse.
-Lo que quieres es que puedan salir preparados de aquí -llegué a la conclusión.
-Quiero que cuando cuando Voldemort de la cara por fin, no pueda dañar a mis alumnos -me dijo-. Creo que es buena idea que Harry ayude a los chicos, le van a ganar respeto, y en un futuro, cuando todo salga a la luz, será demasiado tarde para prepararnos.
-Haré lo que pueda profesor -le dije-. Creo que Umbridge va a estrechar más las reglas de Hogwarts.
-Y por eso necesito aún más que estés ayudando a los niños -sonrió-. Dolores tiene cierta debilidad por los de tu casa, y por lo que me dijiste que pasó en tu castigo, estoy seguro que te buscará para que les ayudes.
-Quieres que desvíe las miradas curiosas hacia otra parte y ayudar a cubrir a mis compañeros -entendí.
-Correcto -asintió con una sonrisa-. No van a tardar mucho en tirarme de aquí -dijo divertido-, y las cosas se pondrán muy feas. No me extraña que me vaya a enfadar, esa mujer es irritable.
-Una cosa más -le dije-. He visto a Mundungus allí.
-Así que eras tu -rio-. Mundungus me lo reportó. Estaba siguiendo a Harry, era su turno y él no es muy bien visto en Cabeza de Puerco, por lo que se disfrazó. Dijo que alguien lo había reconocido. Moody pareció un poco preocupado.
-Moody... -algo me vino a la cabeza-. Moody dijo que Sturgis no vino a recogernos. Luego apareció en El Profeta que se le pillo en el ministerio, y al hermano de Ron, Percy, se le escapó que le pillaron intentando robando algo.
-Si -dijo sin entender Dumbledore.
-Esa misma noche que le pillaron, a Harry le dolió la cicatriz, y dijo que era porque el Rey estaba enfadado... -le miré a los ojos-. ¿Es posible que se enfadara porque Sturgis no consiguiera robar?
-No es posible -dijo-, es cierto. Estoy completamente seguro de que Sturgis estaba bajo la maldición imperius que se le debió imponer cuando vigilaba a Lucius Malfoy. Lo que intentaba robar, era del Departamento de Misterio.
-El arma -dije pensativa-. De acuerdo señor, creo que eso es todo lo que puedo decir.
-Ten paciencia Lily -me despidió con una sonrisa burlona-. La necesitarás más que nunca.
Ya habían pasado un día de eso, y de momento nada. Estaba bien que los alumnos de Hogwarts tomaran cartas sobre el asunto y pusieran resistencia a la profesora Umbridge. Me hacía pensar que en verdad no todos tenían el celebro lavado.
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Lilianne y la Orden del Fénix
FanfictionQuinto año en Hogwarts, pero primero desde que Voldemort, o como yo le llamo, Tom (alias capullo) ha regreseado. Los cambios en profesorado son más notables que nunca por culpa de una de una bola rosa cara de sapo, y además me juego el pellejo...