13.- Cumpleaños.

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—¿Me estás diciendo que no sabes que regalarle a Vegetta?... ¿A tu novio?— el castaño estaba viendo MUY mal a su hermano oscuro.

—Tranquilo Willy, no llevan ni dos meses saliendo, tenle paciencia, ¿Si?— el búho abrazo al de ojos rasgados por atrás.

—Perdón... Pero sabes que me preocupo por Sam— Willy se rasco la nuca nervioso.

«Más de lo necesario, diría yo»

Pensó el oso algo celoso.

—¿Me vas a decir o no?— se estaba empezando a cansar de ver a la pareja darse cariño, el ya quería ir con su Samu para igualmente apapacharlo.

—A ver... ¿Que es lo que más le gusta a Vegetta?— preguntó el albino sentándose en el sillón.

—Yo— contesto divertido el castaño.

—Aparte, Rubius— regaño divertido Fargan.

—Bueno... Pues el morado— dijo con una mano en su barbilla.

—¿Que más?— volvió a hablar Willy.

—La simetría, los unicornios, EL mismo...— siguió al castaño.

«... Los lobos»

Pensó.

—Ahí tienes tú respuesta, escoje algo de ahí— hablo Fargan mientras tomaba los hombros del castaño —Ahora, si nos disculpas, estamos algo ocupados, Bayyyy— una vez el ojiverde estaba afuera de la casa del árbol, el búho cerró la puerta daldole un pequeño golpe a la espalda de Rubén.

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—¡Rubén!, ¿Puedes dejar de estar tan evasivo?— el de ojos morados estaba irritado.

—Lo siento nene, pero estoy ocupado— el castaño tomo su mochila y se giró a la puerta.

Vegetta suspiro, mañana sería su cumpleaños y quería hacer algo con su novio, solo eso, quería estar SOLO con Rubén, pero el menor no lo entendía. Samuel hasta llegó a pensar que el castaño había olvidado su cumpleaños, pero eso es imposible... ¿Verdad?

—Vuelvo en un rato, no me esperes despierto— se despidió cerrando la puerta sus espaldas.

Después de quedarse un rato viendo la puerta cerrada, con paso tranquilo subió las escaleras y camino a su habitación, una vez dentro, se quito los zapatos y se recostó en la cama.

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—Samuel...— susurro alguien en su oido —Sam... Samu... Vegetta...  Vegettita... ¡Samuel De Luque!— finalizó el castaño.

Debido al grito, el pelinegro cayó de la cama llebandose un fuerte golpe, al abrir los ojos pudo ver qué todavía estaba oscuro.

—¿Doblas?— fue lo único que salió de su boca mientras trataba de levantarse del suelo pero el menor se lo impidió sentándose en su regazo.

—¡Feliz cumpleaños!— dijo para después abrazar el cuello contrario.

—... No lo olvidaste— dijo con ilusión.

—Pues claro que no, Cómo voy a olvidar el cumpleaños del mejor novio del mundo, ¿Eh?— dijo divertido el oso.

El castaño se levantó para después ayudar al ojimorado, una vez de pie, Rubius no soltó a su pareja y lo llevo afuera de la mansión.

—¿Que es esto Doblas?— el pelinegro tenía un envoltorio morado delante de él.

—Quemalo— dijo extendiendo un mechero a su pareja.

—¿Que?, Pero si está muy lindo— el ojimorado tenía un puchero muy tierno a los ojos del híbrido.

—Anda, haslo— Insistió.

Vegetta tomo el mechero, lo vio y luego vio a Rubius el cual solo asintió. Una vez la lana fue encendida, está se fue haciendo cenizas poco a poco, cuando desapareció, Samuel logro ver una especie de jaula hecha de cristal, dentro de ella había una pequeña gatita gris y un pequeño lobo, ambos, cachorros, además de ellos, había un hermoso caballo blanco y un cofre.

—Dame tu pico— dijo el pelinegro sin apartar su mirada del cristal.

Rubén, divertido, hizo caso a lo que le pidió su novio, una vez el ojimorado sintió el objeto sobre su mano, corrió hacia el cristal y empezó a romperlo, cuando una de las paredes desapareció, corrió hacia la pequeña gatita y la tomo en brazos.

—¿Que hay en el cofre?— preguntó viendo (por fin) al ojiverde.

—Velo tu mismo— dijo tomando al lobito en brazos y tomando la rienda que tenía el caballo para que no escapara.

El mayor se levanto, aún con la gatita, y abrió el cofre, en el había un libro y una armadura de Moco Diurno. Tomo primero el libro y lo abrió.

›Muchas felicidades cariño, otro año más de vida, lleno de retos importantes, de nuevas aventuras y de nuevos momentos juntos, estoy muy feliz de poder compartir este día contigo mi vida. Te has convertido en mi guía y mi mayor anhelo desde que te conocí.

En este tiempo que llevamos juntos he cambiado mucho mi forma de ver las cosas, me has ayudado a madurar y a ser una mejor persona. También aprendí contigo que los retos no son imposibles y que siempre se puede conseguir lo que se quiere en la vida si uno se esfuerza, un ejemplo de ello es que TU estés a mi lado.

Espero que estos regalos te hayan gustado, me demore TODO un día buscándolos y no fue fácil traerlos hasta aquí, pero todo por ti.

Con amor...
Tu Osito.‹

—¿Y... Te gustó?— el castaño estaba nervioso pero logró ocultarlo bien.

—¿Que si me gusta?...— Vegetta bajo al pequeño animal y se giró hacia Rubius el cual logro ver unas pequeñas lagrimitas en los ojos morados —¡Lo amo!— grito lanzándose sobre el castaño haciendo que sus piernas quedarán rodeando la cintura contraria.
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Palabras: 864.

Hola Mis Gatit@s cómo están? Espero que bien uwu

Ahora sí ya estoy muy retrasada... HeLp!

¿Les gustó? Yo lo ame uwu

En un rato público "Cosplay"... Eso espero ;-;

Sin otra cosa por decir, denle ⭐ y comenten que yo los leeré.

Los quiero.
Chau~💜

#Rubegetta MonthDonde viven las historias. Descúbrelo ahora