El secreto de Juliette

capitulo 6

Después de fotografiar el cuchillo y guardarlo en una bolsa el detective lo llevó al laboratorio del forense, lo entregó junto con las fotografías ya impresas de las huellas de zapatos y fue a su casa dispuesto a seguir con la investigación, Danna no estaba en casa lo cual le permitió tomar un respiro, no quería más discusiones y ahora que iba a investigar a una mujer su presencia ahí solo lo pondría incómodo, colocó el nombre de "Juliette Donovan" en el sistema policial y una pequeña ficha apareció.

"NOMBRE: Juliette Donovan Brenett.

EDAD: 20 años.

NOMBRE DEL PADRE: Cory Donovan (f)

NOMBRE DE LA MADRE: Aylin Brenett (f)

FECHA DE NACIMIENTO: 01 de noviembre de 1998.

ANTECEDENTES: robo."

¿Era un chiste? ¿Era un jodido chiste? Esa mujer llevaba seis años encerrada en ese lugar por un robo, y la muerte de sus padres ¿Cuándo sucedió? ¿Ella lo sabía? ¿La directora lo sabía? La cabeza del detective se hizo un millón de preguntas, mientras trataba de comprender que había sucedido exactamente en la vida de Juliette se decidió a buscar la ficha de la señora Olivida Brown pero para su horrible sorpresa no tenía ningún expediente, ni una anotación, ni quiera una multa de tránsito, era casi como si no existiera.

Mientras enfocaba su mirada en las carpetas de las empleadas que le había entregado la directora sintió la puerta abrirse, levantó la mirada encontrándose con una muy alcoholizada Danna vestida nada más con una bata.

—¿No me preguntaras porque llegué a esta hora? —preguntó ella arrastrando las palabras.

—No —respondió él con total indiferencia—. Estás bastante grande como para yo interrogarte.

—¿Y tampoco preguntaras con quién estuve? —preguntó la alcoholizada mujer apoyando sus pechos sobre la mesa desordenando los papeles del detective.

—No me interesa con quien estuviste —le espetó Jonas tratando de recoger los papeles.

—¡Jonas! —la mujer se subió a la mesa justo cuando él terminó de recoger todo— ¡Tómame por favor! —le rogó—. ¡Piensa en quién quieras! ¡Tómate un viagra! ¡Haz lo que quieras pero tómame ahora!

Jonas la vio desnudarse sobre la mesa, su abdomen se veía plano, sus pechos grandes y estaba perfectamente depilada en su zona íntima, se colocó frente a él y abrió las piernas ofreciéndose, pero a Jonas eso ya no le provocaba nada, una perfecta vagina depilada y pechos grandes ya no le inspiraban nada, eso le trajo a la mente a la señorita Juliette, la forma en que la tela de es horrible uniforme se deslizó por sus hombros y su senos juntos cuando le rogaba que la ayudara, tuvo que carraspear y prácticamente salir corriendo de ahí bajo la mirada atónita de su prometida para refrescarse y calmarse un poco.

Mientras tanto en el reformatorio la joven Juliette no podía dormir, Vera estaba en la ronda y Ana descansaba plácidamente en su cama pero ella no podía dejar de pensar en esos brillantes ojos mieles del detective, hacía mucho tiempo no estaba tan cerca de un hombre y desde que acabó la única relación sentimental que había tenido ni si quiera volvió a hablar con uno de una forma tan intima, se mordió el labio al recordar la enorme mano del detective sobre su mejilla y soltó un suspiro al solo recordar la forma tan tierna en la que él se dirigía hacia ella, muy diferente a como se dirigía a Jennifer e incluso a la directora, cerró sus ojos para tratar de dormir y dejar de pensar en esos ojos.

La mañana siguiente Jonas despertó de muy mal humor, de un terrible humor, Danna se había escabullido en su habitación a mitad de la noche y cuando despertó con su falo duro y crecido por soñar con unos pálidos pechos sobre su rostro ella se aprovechó, cuando Jonas abrió sus ojos excitado por pensar que aún estaba soñando se encontró con la imagen de su compañera metiendo su miembro en su boca mirándolo fijamente, esto lo cabreó a sobremanera, incluso amenazo con irse de la casa, eso activo una alarma dentro de Danna, quien avergonzada por dejarse llevar por el deseo buscó la manera de obligarlo a quedarse en casa con ella fingiendo una convulsión.