El secreto de Juliette

capitulo 8

Eloísa se encontraba sentada en el jardín admirando la tenue luz que se colaba por las gruesas nubes que indicaban que un fuerte aguacero caería pronto, fue citada por Juliette para que la esperara ahí ya que tenía que hacerle unas preguntas acerca de Sunny, aún estaba triste por la muerte de su amiga pero intentaba superarlo como fuera, aunque no le agradaba el hecho de tener que ser interrogada, los policías la colocaban nerviosa.

—A ella no le gusta mucho la policía —le habló Juliette a Jonas mientras caminaban hacia la chica—. Un policía asesinó a su padre frente a ella y frente a su madre.

Jonas frenó en seco.

—¿En serio vio algo como eso? —preguntó Jonas muy sorprendido.

—Señor O'Connor, todas las niñas que residen en este lugar han tenido problemas con la ley, son rebeldes a las que se les da otra oportunidad para no ir a la cárcel y corregirse.

—¿Eso la incluye a usted? —preguntó él acercándose con sigilo a la chica.

Eso tomó completamente desprevenida a Juliette, ella no tenía nada en común con esas jóvenes, ese comentario incluso le molestó un poco, Jonas por su parte se sentía complacido de crear una pequeña fisura en la dura pared que la joven había creado.

—Yo no soy como ellas, señor O'Connor, para nada.

Él la miró con una suave sonrisa.

—Estoy seguro de que no.

—Será mejor que vayamos con Eloísa antes de que se asuste o se moleste.

Jonas no respondió, simplemente la siguió por el suelo húmedo complacido de poder ver nuevamente el rostro de la señorita Juliette sonrojado, le encantaba esa imagen, su piel porcelana suavemente colorada por la vergüenza.

—Eloísa —llamó Juliette a la niña.

La chica se dió la vuelta para mirarlos, no se asustó con Jonas ya que no tenía uniforme ni una placa, simplemente se rodó hacia un lado para permitirle al hombre sentarse.

—¿Usted es policía? —preguntó Eloísa mirando fijamente a Jonas.

—No, soy un investigador, sólo averiguo que sucedió y ya, no arresto a nadie ni le leo derechos a nadie, ni siquiera tengo un arma —Jonas trató de mostrarle una sonrisa a la adolescente intentando ganar su confianza.

—Él solo viene a ayudar, no te preocupes —lo apoyó Juliette colocando sus delgados dedos sobre los hombros de la chica y dándole una cálida sonrisa.

—Esta bien ¿Qué necesita saber? —preguntó la joven.

—¿Dónde estaba usted el día del homicidio? —preguntó él mientras escribía en un pequeño cuaderno.

—En mi habitación, junto a las otras chicas —dijo ella evitando la mirada de Jonas, eso despertó una pequeña alerta en el interior del detective.

—¿Sabe por qué Sunny se encontraba fuera de la habitación? —preguntó levantando los ojos para mirarla y darle un rápido vistazo a Juliette.

—No, no tengo idea —la chica seguía sin mirarlo, concentrada en lo que él anotaba.

—Bien... ¿Sabes si Sunny tuvo algún inconveniente en su cumpleaños?

—Aquí no... —interrumpió inmediatamente Juliette—. Aquí no celebramos los cumpleaños.

—Bueno... —vaciló Eloísa antes de hablar—. Nosotras si...

—¿Qué? ¿Cómo? —preguntó Juliette sorprendida.