capitulo 33

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Sean se encontraba en su oficina admirando el panfleto para inscribirse a la alcaldía, las elecciones serían pronto y aunque su deseo siempre fue inscribirse, sin su esposa a su lado aún tenía dudas, cuando un suave toque resonó por toda la habitación Sean corrió inmediatamente a guardar el panfleto, cuando la puerta se abrió el hombre sintió que se desmayaría en cualquier momento, parecía que vio un fantasma.

En el bar de la esquina el ambiente estaba alegre, Jonas bebía cervezas junto con Timmy admirando los traseros de las camareras, esperando conseguir algo de acción en la noche y celebrando el ascenso de Timmy como oficial de policía, Jonas ya veía borroso, su voz ya se arrastraba y casi no lograba entender lo que su amigo le decía hasta que observó el rostro de Timmy colocarse serio, giró su cabeza hacia donde se dirigía la mirada de su amigo y casi se cayó de espaldas sobre el suelo, rápidamente se colocó de pie y retrocedió, empieza a tragar saliva completamente nervioso, un hermoso ángel de cabello color caramelo y ojos verdes envuelta en un vestido color blanco hasta la rodilla estaba de pie a solo un metro de ellos.

—Hola... Jonas —saludó Juliette con algo de miedo.

Pero Jonas no respondió, se sacudió y pasó por el lado de la joven casi empujándola para salir de ahí, Juliette lo persiguió esquivando a los borrachos intentando tocarla y las meseras ofreciéndole tragos, cuando juntos cruzan la puerta él se detuvo de golpe y ella chocó con su espalda.

—¡¿Qué diablos haces aquí?! —le gritó él obligándola a retroceder.

—Yo...

—Oye Jonas, cálmate —habló Timmy colocando su mano sobre su hombro.

—¡¿Qué me calme?! ¡¿Qué me calme?! ¡Si quieres que me calme aleja a esa mujer de mí!

—Por favor escu—

—¡Vete al diablo Juliette! ¡No pienso escuchar ni una sola jodida palabra de la mujer que me rompió el corazón y se fue sin siquiera dar una razón! ¡Me niego!

—Estás borracho Jonas, será mejor que—

—¡No te atrevas a juzgarme cuando tú misma me metiste en esto! —Él se acercó a ella dando pasos fuertes y agarrándola por los hombros con algo de rudeza—. No te atrevas a venir con tu cara de inocente a tratar de envolverme con tus mentiras ¡No te atrevas!

Las mejillas de Juliette inmediatamente se mojaron con lágrimas, agachó la cabeza apenas Jonas la soltó, retrocedió varios pasos tratando de ignorar la mirada de odio de Jonas y corrió hacia la calle para alejarse de él y tratar de calmarse, cuando le faltaba poco para llegar al andén y buscar un camino una mano le agarró con suavidad el brazo.

—Permítame llevarla a su casa —le pidió Patrick con amabilidad y una sonrisa.

—Yo no... yo estoy bien no se preocupe —le respondió Juliette agachando la cabeza y tratando de salir del agarre del hombre.

—Por favor insisto —Patrick se acercó un poco a ella, era obvio para Juliette que el hombre estaba ebrio—. Una joven tan hermosa como usted no puede estar por estos lugares de mala muerte y mucho menos sola.

—Señor, por favor suélteme —le pidió Juliette tratando de hacer que el hombre la suelte sacudiendo su brazo.

—Haber Patrick —intervino Sean apareciendo de un momento al otro—. ¿Sólo porque te divorciaste crees que puedes acosar muchachas indefensas?

La voz de su tío llamó la atención de Jonas y de Timmy, en ese momento el cuerpo del mediana mente ebrio policía se llenó de furia, Juliette tratando de alejarse de Patrick y él agarrándola con rudeza del brazo "le hará una marca en su hermosa piel" pensó en su interior, sus pies reaccionaron y empezó a caminar hacia ellos, Sean observó a Jonas convertirse en el mismo diablo, sus ojos estaban rojos de rabia y sus manos empuñadas, Sean agarró a Juliette delicadamente de la cintura y logró sacarla del agarre de Patrick mientras Timmy evitaba que su amigo cometiera la estupidez de golpear al alcalde.

El secreto de JulietteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora