Capítulo 20

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Narra Marceline:

Rayos, intenté hacerme la dormida, ya que no debería tocar a mi princesa, pero supongo que si ella está preparada para dar este pequeño paso, está bien entonces... No?:

-Princesa... Estas segura...?-susurro mientras ella me empieza a quitar mi ropa interior.

-Si, hoy no tuve pesadillas y ten por seguro que si me vuelven flashbacks, te lo diré de inmediato-ella sonríe tiernamente y de forma inmediata, saca la lengua, y me la pasa por toda mi entrada.

En ese momento, siento que me derrito, joder se ve tan adorable haciendo estas cosas... Agarro las sábanas, gimoteando bajo, pues llevaba tiempo sin ni siquiera tocarme, por respeto hacia ella, y de repente esto... Dios, siento que solo con esa pasada de lengua, podría llegar a las puertas del cielo.

Ella, empieza a pasar mi lengua por mis labios, tanteando mi clitoris, haciendo que mis caderas se muevan solas, y empiece a temblar, arrugando aún más las sabanas entre mis manos.

Ella me mira, con una sonrisa lasciva, y empieza a pasar la punta de su lengua por mi clitoris, haciendo pequeñas lamidas, poniendo la lengua algo dura, y puedo decir que en estos momentos estoy enloqueciendo, pues nada puede evitar que suelte un gemido alto:

-D-dios prince-s-aaaah.

Puedo incluso sentir, que no puedo cerrar la boca, y la saliva empieza a salir de esta, cuando lo ve, mete lentamente un dedo, haciendo que arquee la espalda, y eche la cabeza hacia atrás, consiguiendo que su dedo llegue a lo más profundo de mi, y haciendo soltar algo demasiado vergonzoso:

-Por Dios, m-mas n-necesito más.

Ella asiente, y introduce otro dedo, empezando a hacer embestidas, mientras mueve la cabeza, haciendo formas con la lengua, empiezo a mover mis caderas al ritmo de su mano, para ayudarla y ella, empieza a embestir más y más fuerte, haciéndome volver loca incluso, se siente demasiado bien, y no empiezo a sentir cosquilleos por todo mi cuerpo, mi mente queda en blanco, solo oigo el ruido que crea con las embestidas y mis altos gemidos, empiezo a notar que estoy teniendo un orgasmo, y justo en ese momento, mi dulce princesa me agarra de los muslos, sacando sus dedos de mi interior, y lamiendo donde antes estaban estos, no puedo soportarlo más, y siento que me empiezo a correr, con una vergüenza extrema, pues lo estoy haciendo justo en su boca.

Cuando termino ella me mira:

-Dios... Sabes tan bien...-jadea mirándome lasciva y dominante.

-P-puedo probarte...?-susurro tímida.

Ella asiente, y se estira a mi lado, yo la empiezo a besar, pasando mis labios hacia su cuello, sus caderas, depositando pequeños besos y húmedos besos en cada lugar, hasta bajar a sus muslos. Ella abre automáticamente sus piernas, y empiezo a acariciar sus piernas por la zona de fuera, me pongo cómoda frente a su entrada, y empiezo a pasar un dedo muy poco a poco, sin llegar a penetrarla, noto que ella tiene un escalofrío al notar mi dedo, y sonrío.
Empiezo a lamer de forma suave, mirando sus reacciones, y hago círculos con la lengua directamente en su clitoris, para luego pasar a sus labios, sin llegar del todo a su entrada, para no hacerle daño.
Noto su mano en mi cabello, y la veo jadeando y sudando, mirándome con algo de desesperación, se lo que quiere, y lo haré.
La agarro suavemente de los muslos, y pego mi boca a su entrada, empezando a lamer, y succionar, subiendo progresivamente de velocidad, y sin ningún patrón establecido, a lo que ella, empieza a gemir, más y más y más alto.

Noto como sus piernas empiezan a temblar, y en ese justo momento, pasó mi lengua por toda su entrada, sin llegar a penetrar en esta, y al llegar al clitoris, succiono, lo cual hace que ella grite mi nombre, tirándome del cabello y teniendo un orgasmo:

-D-dios...-susurra ya más calmada-Cariño, perdón, te hice daño?

Niego con la cabeza sonriendo y la beso:

-Estas bien mi amor?-acaricio su brazo, abrazandola y ella se acurruca en mi pecho, asintiendo.

Yo le doy un beso en la frente y le susurro al oído:

-Te amo, y eres mi mejor casualidad...

Ella me mira de golpe y me dice:

-Marceline... Te amo... Y quisiera estar contigo para el resto de esta vida y las que están por llegar, cuando muramos juntas, no importa quién sea en otra vida, te buscaré y estaré de nuevo en tus brazos, porque este amor no podré olvidarlo, así pasen miles de siglos.

No puedo evitar sonreír tiernamente, mientras una lágrima de felicidad recorre mi rostro.

Querían smut? Aquí lo tienen uwu
Esto está llegando a su fin, y quería aclarar que voy a resolver lo del capítulo anterior, que pone número 18 y debia ser número 19

Aún así hoy estuve mirando los rankings de este fanfic y jamás pensé llegar tan lejos, os debo muchísimo, y muchas gracias por seguir aquí, jamás me cansaré de agradecerles todo lo que hacen, con sus comentarios, votos, mensajes de apoyo... TODO
Por cierto, próximamente haré una historia con el fetiche de Daddy, pero será un poco diferente, de acuerdo?
Os seguiré informando, y gracias por todo, les quiero mucho uwu

Romance en los pasillos del instituto.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora