Romance en los pasillos del instituto.

Capítulo 14

Narra Chicle:

Acabo de provocarle un orgasmo a Marceline... No me puedo sentir más alegre no me arrepiento de nada, sinceramente.
Me estiro a su lado y la abrazo de forma tierna, aunque las dos estamos sudadas ya no me importa, solo quiero compartir este momento con mi chica, aspiro el aroma de su cabello y ella suelta una risita.
Lo último que recuerdo es abrazarme a ella y quedarme dormida.
Al día siguiente noto como alguien me da besos y pienso que vuelve a ser un sueño hasta que la oigo:
-Buenos días mi dulce chicle.
Sonrío al abrir los ojos y ver a Marceline encima mío besando mis mejillas, mi frente, mi nariz...
En uno de los besos giro un poco mi cabeza para que nuestros labios se unan en un tierno beso de buenos días.
-Cuando estés lista baja, tienes una sorpresita esperándote.
Me giña el ojo y se va flotando hasta abajo.
Sonrío y aspiro la almohada, huele a nosotras, me gusta este olor.
Decido sentarme en la punta de la cama y desperezarme, me doy cuenta que no llevo ropa y sonrío sonrojada pensando en lo de anoche.
Abro el armario de Marceline y me pongo una camiseta suya con mis panties de recambio para bajar.
Al llegar a la cocina la encuentro de espaldas esperando a que las tostadas salten.
La abrazo por detrás y le beso el pelo.
-Buenos días mi sexy vampira.
Ella se gira y me mira de arriba a abajo para abrazarme por la cintura.
-Acaso quieres repetir lo de ayer?-lo dice medio en broma medio en serio.
-Quien sabe?-le sonrío inocente y le beso la mejilla.
-Tan dulce que moriré de diabetes.-Me sonríe para poner las tostadas en un plato y llevarlas con el resto del desayuno.
-Noooo, no puedes moriiiir.-Le hago un puchero.
-Bueno, bueno no me muero.
Desayunamos juntas entre risitas y comentarios tontos.
Miro la hora y veo que tenemos algo de tiempo hasta ir al instituto.
-Marcy... Deberíamos ducharnos
-Cierto, ve a ducharte, cuando acabes voy yo.
Me sale una risita que hace que ella arquee una ceja ya que sabe lo que insinúo.
-Aunque si no quieres...-Alargo la segunda "e" de la última palabra.
Y dicho eso voy corriendo como una niña pequeña a la ducha, Marceline no tarda mucho en atraparme.
-Mi pequeña pervertida.-Sonríe tierna.
Vamos a la ducha y nos desvestimos la una a la otra para meternos juntas.
Abro el agua hasta que sale templada y observo como Marcy se moja su cabello y como le caen las gotas de agua en su cuerpo, amo la armonía de su piel junto al agua.
Ella empieza a observarme también y la imito, me gusta su mirada, no hay solo deseo en sus ojos, hay ternura, pasión, amor, me gusta mucho ver eso en ella.
La quiero, la quiero mucho.
-Gírate, cariño.-susurra y le hago caso.
Siento como enjabona mi cabello y eso me relaja mucho.
Mi corazón late fuerte y la palabra "cariño" resuena en mi cabeza una y otra vez, se siente bien que sea ella quien lo diga, si fuese cualquier otra persona no me gustaría.
Me aclara el pelo y me besa el cuello desde detrás de forma tierna, sé que me quiere provocar, pero no caeré tan fácilmente, o eso creo hasta que empieza a enjabonar mi cuerpo con sus manos de forma suave, va tanteando mis muslos apretándolos sin demasiada fuerza.
Me hace soltar pequeños gemidos, hasta que de nuevo, como ayer, acaricia mi intimidad, mis gemidos salen mas altos cuando hace esos gestos, me agarra la cadera con la otra mano hasta que sube esa misma mano hasta mis pechos para acariciarlos.
No tardo demasiado en llegar al orgasmo y se siente como ayer, sigue siendo especial, por lo hace ella.
Me giro para besarla haciendo que el jabón de mi cuerpo traspase hacia el suyo.

Holi~
Espero que os guste este capítulo, creo que es mas largo de lo normal pero estoy orgulloso con el resultado.
Espero llegar pronto al 1K de leídos.
He visto que la novela está en el puesto 10 de Bubbline.
Aunque no hay muchas historias con esta etiqueta os quiero dar las gracias por todo, en serio, muchas gracias. ^^💕🖤