Florencia
2 meses después…
Yo encuentro, que ser mamá es lo más importante para la vida de un niño/a.
Siempre tienes que estar ahí, en toda decisión, en todo momento, es algo completamente inexplicable.
Pero en este momento no me gustaría, para nada ser la mamá de el Dani.
Tiene que tomar una decisión muy importante, porque los médicos realizaron estudios y aunque el Dani despertara, quedaría en estado vegetal o en el peor de los casos, podría quedar paralítico.
Así que o lo dejan hasta que mágicamente despierte y sufra por el resto de su vida, o ahorrarle el sufrimiento ahora mismo.
Es como si todo lo que tocara se volviera defectuoso automáticamente.
Primero, el Mati que aún sigue en coma, ( y que por el contrario el no está en estado de riesgo como el Dani) sigue sin despertar.
En estos dos meses he estado mal, tanto física como mentalmente. Porque me siento culpable por lo mal que trate al Mati.
Y ahora el Dani que vivía con su padrastro, y vivía maltratandolo, y yo que lo veía todos los días…no me dí cuenta.
—Podríamos...— miro a la Kaomy y vuelvo la mirada a la puerta.
Quiere subirme el ánimo, no lo ha logrado en dos meses y aún no se da por vencida.
—No sé, por qué sigues intentándolo. No voy a ir a ninguna parte.
Suelta un suspiro y mira el pasillo.
—Voy a comer, nos vemos después— sin esperar respuesta se levanta y se va a la cafetería.
Nunca me habría imaginado esto, de película la wea.
El Dani está en coma por un golpe en la cabeza, que su padrastro le dio con un fierro. Lo dejó desangrándose por una dos horas y media, hasta que su mamá lo encontró. Ahora esta con un respirador a su lado.
El Mati sufrió un accidente de auto, por drogas. Si no hubiese chocado, hubiese tenido una sobredosis, ahora en coma hace dos meses y medio.
Lo único que falta es que me atropellen cuando salga de aquí, sería la guinda de la torta.
—¿Me puedo sentar?— miro hacia arriba y me encuentro con la Javi.
Asiento y me saco los audífonos, dejando de escuchar canciones corta vena.
—La Kaomy fue a la cafetería, hace un rato— ella asiente y se coloca en posición de indio.
Lo dije sin pensar, porque sé que no la busca a ella. No se hablan hace rato.
—Quiero hablar contigo, Flo— frunzo el ceño ligeramente y le presto atención —Hablé con la mamá de el Dani, y lo más probable es que lo desconecten del respirador.
Suelto un suspiro y apoyo mi cabeza en la pared.
No digo nada, porque no tengo nada que decir.
—Lo entiendo, quiero que viva, pero no quiero que sufra. Así que entiendo la decisión— miro a la Javi sin siquiera moverme —Aunque no estan pidiendo mi opinión.
Nunca he hablado mucho con la Javi, solo se, lo que la Kaomy me dice. Prácticamente no la conozco.
—¿Me podrias dar un consejo?— asiento y le hago una seña para que siga —Un consejo...amoroso— es ahí donde cambié mi cara completamente.
ESTÁS LEYENDO
Funeral Culiao
Ficção AdolescenteAlgunos se conocen por WhatsApp, otros por Insta y otros simplemente se conocen por amigos en común, pero yo lo conocí en un Funeral Culiao.