↳ 𝐦𝐚𝐝 𝐜𝐡𝐞𝐫𝐫𝐲

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Había una manera muy racional y madura de resolver ésta situación.

Y Lucas necesitaba urgentemente saber cuál era esa manera.

- P-puedo explicarlo, hyung - intentó dirigirse al pelirrojo más grande y dialogar pacíficamente el asunto. Éste lo miraba atentamente, mientras apretaba entre sus brazos al pequeño Seungmin - Fué un accidente, yo no-

De la nada, el otro pelirrojo salió en defensa de Wong.

- ¡Hyung sólo me confundió con usted, y por accidente tumbó mi cajita de leche! No fué su intención, se disculpó conmigo, y fué muy amable, de verdad, hyung - explicó desesperadamente el Kim más pequeño, frunciendo los labios para convencer al mayor de que era así.

- Es cierto, Wonpil, Yukhei no le hizo nada malo a Seungminnie, sólo fué un accidente - afirmó Park ante las palabras del bajito, y todos asintieron para apoyarlo. El pelirrojo más pequeño se escurrió del agarre de su mayor, sólo para ir a los brazos de Lucas, abrazadose a él, defendiendolo.

Yukhei aún temía de lo que Kim fuera capaz de hacer si llegaba a hacerle algo a su adorado hermanito, aunque fuese tan sólo un accidente.

Éste tomó aire, y carraspeó un poco.

- ¿Sólo fué un accidente? - miró de manera interrogativa, alzando una ceja, a cada uno de los que se encontraban ahí, y todos asintieron con sinceridad; su mirada recayó en un nervioso Lucas y luego en su pequeño Seungmin, quien se aferró con más fuerza al alto, comprobando su inocencia - De acuerdo, de acuerdo.

Se miraron entre todos, aún con la tensión cortandoles la respiración.

- Lo que aún no entiendo es .. - habló cruzandose de brazos, aún con un gesto serio en su rostro. Todos esperaron lo peor - ¿Cómo confundiste a éste enano conmigo? - Wonpil formó ésta vez una sonrisa más amigable y tranquila, logrando que el aire volviera a los pulmones de Yukhei, y a los de todos. Recibiendo un chillido por parte de Seungmin, y así desatando un mar de carcajadas mucho más relajadas.

- ¡Ya! - puchereó el pelirrojo abochornado, no era su culpa que toda la altura se la haya llevado su hermano y no le dejara mucho a él; aunque tenía la ilusión de que crecería muy alto cuando cumpliera finalmente los dieciocho, y así él se burlaría de su hermano mayor.

- No le hagas caso, Minmin, tal vez él sea más alto, pero tu eres mejor parecido - apuntó Keon Hee con una sonrisa burlona hacia Wonpil, éste soltó un quejido idéntico al de su hermano menor, y todos volvieron a estallar en carcajadas por su reacción. Al menos Wong quedaba perdonado, y corría con la suerte de que Kim no fuera muy rencoroso.

- ¿Lucas hyung puede ir a nuestra reunión el fín de semana? - preguntó el pequeño pelirrojo a su hermano mayor una vez que las risas cesaron un poco. Wonpil dirigió una mirada a Yukhei, y éste se sintió notablemente incómodo de repente.

- Por supuesto, eres bienvenido cuando gustes, Xuxi - Kim sonrió en dirección al castaño más alto, Yukhei se sintió que pudo volver a respirar por la amabilidad del pelirrojo, además de que no terminara odiandolo o algo parecido, y le devolvió la sonrisa de manera inmediata.

- Pués, ya son las dos de la tarde, y yo tengo mucha hambre, ¿Nos vamos a la plaza de una vez? - preguntó Jae a los demás, y los mayores asintieron; Wonpil reunió a los menores cerca suyo para poder llevarlos a los tres a su casa. No quería que su pequeño Seungminnie estuviera sólo y aburrido mientras él se divertía con sus amigos afuera.

- Por supuesto, yo iré a llevar a éstos mocosos a casa y luego los encuentro allá, ¡Pero no se emocionen tanto sin mí! la última vez rompieron una vitrina y Jae terminó siendo arrastrado en un carrito de compras porque los guardias de seguridad los estaban persiguiendo, y no pienso correr calle abajo de nuevo, ¿Estamos claros? - Kim hizo memoria un poco, y recordó una ocasión en que una de sus tantas salidas había acabado tornandose algo desastrosa como de costumbre. Jae había tenido la grandiosa idea de montarse en un carrito de compras mientras Geon Hak lo empujaba por todo el supermercado, tan sólo habían ido a comprar un par de botanas y refrescos cuando de repente habían chocado a una señora gorda que comenzó a gritarles hasta de lo que se iban a morir, y al querer salir huyendo, terminaron rompiendo la vitrina del área de embutidos. Wonpil veía con claridad la escena de ellos saliendo como alma que lleva el diablo de ese centro comercial siendo perseguidos por los guardias de seguridad.

Sí, definitivamente esa era una anécdota para recordar.

Todos se partieron de risa una vez más al hacer memoria de tremenda salida, ya ansiaban volver a repetir una historia como aquélla. Aunque ésta vez el que les hizo mala cara fué Park, para él no era tan gracioso haberse caído del carrito de compras cuando corrían cuesta abajo, pero no podía negar que había disfrutado como nunca esa ocasión.

Tuvieron que separarse una vez el timbre volvió a resonar en toda la institución. Se despidieron, y Wonpil llamó a la señora Yang, avisandole que iría a "recoger a los peques a la escuela" para que pasaran el rato en su casa jugando videojuegos con Minnie. La señora Yang, madre de Jeongin, tenía como ejemplo de responsabilidad de oro a Wonpil, a fín de cuentas conocía a la familia Kim desde hace tiempo, y Seungmin la consideraba casi una tía para él, así que no hubo ningún problema. Ella se encargaría de avisarle a la madre de Han, y luego ésta última pasaría por ellos cuando terminaran su pequeña reunión.

Seungmin y Wonpil tenían un lindo círculo de seres queridos, y eso les agradaba.

- Minnie, ¿Dónde está tu mochila? ¿La olvidaste de camino aquí? - preguntó curioso el mayor hacia su hermanito, una vez estuvieron fuera de la institución. De hecho, ninguno de los menores traía su respectiva mochila, los tres las habían olvidado en el salón de clases antes de su hora de recreo, y luego de eso habían salido huyendo hacia la universidad, por lo tanto, debían estar en coordinación, entre los objetos perdidos, de nuevo.

- No, se nos quedaron en el salón, seguro alguna maestra las ha recogido y las guardó, mañana iremos por ellas - respondió el pelirrojo más pequeño, y los otros dos menores asintieron. Wonpil frunció el ceño disgustado, pero no dijo más nada al respecto.

- ¿Otra vez los persiguieron Chris y el otro par de idiotas? - interrogó resignado, ya sabía la respuesta de memoria, pero de igual manera quería saber qué había sucedido en ésta ocasión.

- Sí, ¡pero les dimos su merecido y huimos victoriosos! ¿Cierto, Hannie? - el pelirrosa codeó al castaño a su lado, y éste asintió con la cabeza en alto, ellos estaban muy orgullosos de lo que habían hecho, y en definitiva se arrepentian de saltarse su última clase por venir con Wonpil y los demás. Al contrario, otro punto a favor.

- Excepto por mis banditas, se cayeron de camino a la universidad y se perdieron - Seungmin arrugó su gesto, abultando sus mejillas en un puchero, aún estaba triste por perder su cajita de banditas de colores, eran muy lindas, y estaba más que seguro de que las necesitaría constantemente.

- Ey, descuida, hermanito, si haces toda tu tarea antes de que lleguen los chicos a casa, te daré suficiente mesada para que compres más, ¿Qué dices? - Wonpil ofreció al pelirrojo para que no se desanimara, Seungmin volvió a sonreír en grande y asintió con su cabeza emocionado. Iniciando una charla más animada con sus otros dos mejores amigos sobre los diferentes tipos de banditas que quisiera comprar.

No, Wonpil no consentia a Seungmin sin motivo. Siempre intentaba inculcarle buenos valores, así como lo había hecho su madre consigo, y a falta de tiempo maternal, el mayor se ocupaba de dicha tarea.

Podría ser un hermano sobreprotector, algo, o quizás, muy dramático, y paranoico; pero nunca un mal ejemplo para Seungmin.

ゞChᥱrrყ boყ % 𝙻𝚄𝙼𝙸𝙽 ꒷꒦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora