Cap 24: apolíneo

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Nouvelle Vague - Bizzare love triangle (New Order cover)

                                                                                    ✩✩✩

—Te amo te amo te amo te amo...—susurraba Timothée al oído de Cloe mientras la alzaba desde su cintura y la enredaba en sus brazos, indiferente al caminar de sus progenitores a unos metros delante de ellos.

Le encantaba, amaba lo radiante que había amanecido ese día junto a él, con sus mejillas sonrosadas y sus labios hinchados, con el cabello enmarañado y con una amplia sonrisa dibujada en su rostro, mirándole con esos ojos rebosantes de ternura y afecto. Se había consumido durante esa mañana en la contemplación de su rostro siendo eclipsado por los rayos de sol que entraban por la ventana de su habitación, aclarándole el avellana de sus ojos y tiznándole de escarlata la punta de su nariz mientras el aroma fresco del rocío matutino llegaba hasta ellos, enfriándoles un tanto los cuerpos pero haciéndoles anhelar todavía más acurrucar sus cuerpos tiernos, cálidos por la pasión.

Y ahora, que la tenía allí frente a él, con uno de esos vestidos floreados pálidos que le hacían ver ingrávida, aligerándola y convirtiéndola en un soplo más de ese céfiro veraniego que el chico percibía pronto la elevaría hasta hacerla dispersarse junto a él, no había podido aguantarse las ganas de tomarle en sus brazos, hacer que la suavidad de su pelo lacio y fragante le acariciara su rostro y que sus manos frías —porque había notado que durante las mañanas siempre las tenía frías— le avivaran la piel con su tacto.

— ¡Timothée!, bájame —reía Cloe, echando su cabeza hacía atrás mientras el aroma del castaño le humedecía el alma—. Y no digas tantas veces eso —bajó la voz, temerosa de que alguno de sus padres les escuchara—, no ves que pierde el sentido —le regañó en el gesto atrevido de chocar su nariz con la de él.

—Quiero besarte —informó, antes de mirar hacia los lados y echar a correr con Cloe en sus brazos a la vuelta de una vereda cerrada, invisible a sus ingenuos padres.

— ¡Nos pueden pillar! —protesta alarmada Cloe, antes de sentir lo gélido de una pared tras su espalda fusionándose con el calor de los labios del castaño en los suyos y el ardor de sus manos amplias subiendo por sus muslos.

Así que así se siente el amor...pensaba plácida, mientras sentía la boca del rizoso amalgamándose a la suya y su lengua humedeciéndole hasta el corazón. Ciertamente, le costaba creer lo que estaba sintiendo, le costaba dimensionar el tamaño de sus emociones por Timothée, esas ganas irrefrenables de su compañía y de su tacto, de su atención y de sus ojos. Pocas películas de romance había visto en su vida, le parecía de lo más aburrido ser testigo de escenas que ella misma consideraba ridículas y hasta exageradas... nadie jamás se comportaría así por otra persona, pensaba con acidez y sorna, mofándose de las narrativas, y es que ni Lucca le había tratado así jamás, pese a que le había confesado con honestidad su amor en unas cuantas mínimas ocasiones.

Qué extraño esto, pensaba cuando la efervescencia de las manos de Timothée deslizándose sobre la piel desnuda de sus muslos le colmaba, le hacía gemir suave y empezar a mover instintivamente sus caderas. Y es que era apasionado, en poco tiempo había notado que Timothée era muy apasionado, le gustaba la intensidad en los roces, en las miradas y en las palabras, los besos profundos y la atención cuidadosa, le fascinaba la entrega.

Y a ella..., a ella su forma de amar no hacía más que estremecerle entera, cada partícula de su interior, generando que cada poro de su cuerpo despidiera una neblina condensada en forma de pequeñitas gotas que cargaban con el peso de su amor por él. Le amaba, estaba tan enamorada como cualquiera de esos personajes que por mostrarse demasiado risueños y dichosos jamás entendió, nunca sino hasta ahora que el contento de saberse junto a Timothée le llenaba el pecho de una emoción y expectación inusitada, se sentía encantada por él, alucinada por sus formas.

Extraños en el océano - Timothée Chalamet ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora