Capitulo 12

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Capitulo 12
Por unos segundos, ninguno de ellos habló. Los claros ojos de Zayn observaron el sorprendido rostro de ________-, antes de recorrer su figura. Un feroz rubor tiñó las mejillas de la chica.
La vergüenza luchó contra su placer sorprendentemente intenso. ¡Dios santo, la había seguido hasta ahí! Después de todo, tal vez él no consideraba la otra noche como una aventura pasajera. Tal vez estaba interesado por ella.

—¿Qué… qué haces aquí? —preguntó ________, con cautela.

—He venido a Alnwick a visitar a mi padre, y pensé que te gustaría recuperar las cosas que olvidaste —le entregó la bolsa de plástico.

La aflicción de ________ se agudizó. ¡Vaya! Él no la había seguido… Aunque también podía ser sólo una excusa para verla. ________ conocía el truco. Zayn iba a estar en la ciudad de todos modos, y pensó que podría tener otra muestra de lo que ella le había dado con tanta facilidad la otra noche.
Su decepción alimentó con rapidez una verdadera indignación. Le arrebató la bolsa de plástico sin mirar el contenido, arrojándola detrás de la puerta.
No quería ver los zapatos, no necesitaba más recordatorios de su repulsivo comportamiento de la otra noche.

—Gracias —repuso ella, con sarcasmo—. ¿Cómo averiguaste mi dirección? No está en la guía.
Los ojos de Zayn escrutaron su rostro, como si tratara de descubrir el motivo de su enojo.

—La recepcionista de la emisora me dio tu dirección cuando le dije que te habías dejado olvidadas algunas cosas en el hotel de Bradford.

—Pero tú no has venido sólo para devolvérmelas, ¿verdad? —preguntó—. Mira Zayn, si piensas que vas a continuar donde te quedaste, te sugiero que lo pienses de nuevo. Yo no tengo intenciones de…

—Estás avergonzada de lo que hicimos —intervino él, con sorpresa en su voz.

—¿Qué esperabas? ¿Qué estuviera orgullosa?

—No veo por qué no… Lo que compartimos la otra noche, _______, fue algo fuera de lo ordinario. Tú debes saber lo que siento por ti. También debes saber que no te dejaré escapar tan fácilmente.

—¿Oh?, ¿Y qué es lo que el «legendario Zayn Malik» siente por mi pequeña persona? Seguramente no vas a declararme tu amor eterno, ¿verdad? —agregó, mordaz—No Zayn Malik, el famoso… ¿o más bien infame…? ¡Donjuán!
Zayn la miró extrañado.

—Creo que has estado escuchando algunos cotilleos, _______. Eso de «legendario» no tiene nada que ver con que sea un donjuán.
Ahora fue el turno de ella de sorprenderse.

—¿Entonces con… qué?
Zayn no hizo caso a la pregunta.

—Tú me interesas _______. Mucho. Cuando desperté y descubrí que te habías ido, yo… —su boca se curvó en una sonrisa triste—. Digamos que no me puse muy contento. Al principio, pensé que sólo me habías utilizado, pero luego me di cuenta de que no podía ser así. Eres demasiado honesta, ________.
Demasiado abierta, demasiado dulce…
Entonces dio un paso hacia ella. Asolada por el pánico, ______ retrocedió al interior del apartamento. Zayn la siguió y cerró la puerta.

—Me niego a seguir discutiendo nuestras vidas privadas en un maldito pasillo —miró alrededor de la sala. Al verla vacía, se distrajo de lo que estaba a punto de decir—¿Te vas a mudar?
_____ sacudió la cabeza. De algún modo, las palabras se negaron a salir de sus labios. Estaba tan aturdida… Aunque Zayn fuera sincero, ¿qué futuro podían tener juntos? Los sentimientos de ella no tenían fundamento. No eran más que una cruel ilusión, encendida por su parecido con Ashton.

—¿Entonces es que no tienes muebles? —preguntó Zayn.

—Ashton… Ashton se lo llevó todo.

—¿Todo?

—Me dejó una cama individual. ¿No fue muy amable?

—Podría ganar el premio del sinvergüenza del año.
De repente, la triste realidad de su situación la abrumó, provocándole una inundación de compasión hacia sí.

—¡Oh, Dios! —gruñó ella, cubriéndose el rostro con las manos—. ¡Dios! —repitió, luego comenzó a sollozar.
Zayn la estrechó entre sus fuertes brazos, apretándola contra su duro pecho.

—No llores, querida —murmuró—. Por favor, no llores. Él no lo vale. ¿No te das cuenta? No te amaba de verdad… ni le interesabas… No desperdicies tus lágrimas por él… No…

Para consternación de ______, su estallido de autocompasión fue reemplazado por una sensación de deseo sexual, tan intenso, que no podía ser negado. Con un suave gemido, _______ acurrucó su rostro en el cuello de él, apretando sus labios contra el pulso, en la base de su cuello.
El cuerpo de _______ deseaba con desesperación seducirlo de nuevo. Pero su mente… su conciencia… le ordenaba detenerse, antes de que fuera demasiado tarde.
Se escapó de los brazos de Zayn, justo cuando él la apretaba, haciendo que ambos se tambalearan en direcciones opuestas.

—Lo… siento —exclamó ella—. Yo… no me encuentro muy bien hoy. Acabo de perder mi trabajo —levantó una mano hasta su frente, en un gesto de asombro—. Ni siquiera estoy ebria esta vez —gruñó, espantada de sí.
Zayn se quedó mirándola.

—¿Qué quieres decir? Tú no estabas ebria la otra noche. Sólo habías bebido un par de copas de champán.

—Eso es suficiente para mí con el estómago vacío. Tengo una reacción casi alérgica al alcohol. Me vuelve loca, como a tu hermano, sólo que yo no necesito mucho. Soy una ebria barata, Zayn. Una ebria muy barata terminó con deliberada ironía.

—Ya veo —contestó él, con lentitud.

—Lo siento, Zayn.

—Yo también. Créeme —él se quedó ahí, mirándola, preocupado. De pronto, suspiró y se irguió—. ¿Dices que te has quedado sin trabajo?

—Sí, pero no te preocupes. Encontraré otra cosa —______ habló con rapidez, con impaciencia. Lo único que quería, era que él se fuera.

—¿Estás segura? —insistió él—. El desempleo es muy alto en la industria de la televisión, según he oído.

—Tengo a mi familia. Estaré bien.

—¿Ellos viven cerca?

—Mira, te agradezco que hayas venido, ha sido muy agradable verte otra vez, Zayn —repuso ella con rigidez, deseando que él entendiera la indirecta y se fuera.

—¿Agradable? —la sonrisa de Zayn era amarga—. ______, yo necesitaba verte de nuevo antes… —se interrumpió con una mueca—. Pero eso no es asunto tuyo.
Dirigió a _______ una mirada irónica. Una vez más, ella se asombró por su diferencia con Ashton. Sus rasgos faciales podrían haber salido del mismo molde. Pero sus expresiones no.
_______ lo miró también, recordando bastante bien cómo le hacía el amor; el modo en que su piel se estiraba sobre sus pómulos; sus labios abiertos, sus ojos pesados, como si estuviera ahogado de deseo…
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Atraccion IrresistibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora