Capitulo 37

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Capítulo 37

______ consideró que necesitaba calmarse un poco, mientras decidía qué iba a hacer. Estaba claro que Zayn no iba a hacer ningún movimiento hacia ella. Apenas si la miró durante la cena.

—Te veré pronto, entonces —indicó Zayn, abandonando la habitación sin mirar atrás.

______ se levantó para ayudar a Helga a recoger la mesa y lavar los platos.

—Ahora, vete, amorcito —pidió la otra mujer cuando terminaron—. Pero cuídate. Zayn tiene ganas de pelea esta noche. Lo conozco muy bien.

______ estaba todavía pensando en la advertencia de Helga, cuando abrió la puerta de la biblioteca. Se asombró al ver a Zayn totalmente relajado, sentado en un enorme sillón, con los pies cruzados en los tobillos, y un vaso de oporto entre las manos.

—Cierra la puerta —indicó con voz suave, casi sedosa. Por alguna razón, eso hizo que a ______ se le erizara la piel.

Cerró la puerta.

—Ahora pon el seguro —agregó Zayn.

______- se dio vuelta, con los ojos dilatados.

—¿Con seguro? ¿Pero, por qué?

La mirada de Zayn se convirtió en fría y dura.

—Porque no me gusta ser interrumpido cuando estoy haciendo el amor.

______ se quedó helada.

—¿Perdón?

—Ya me has oído, ______. Ahora cierra la puerta con seguro y deja de fingir. Ambos sabemos por qué te has vestido así esta noche. Supongo que es a mí a quien diriges tus baterías. Soy yo quien se parece a tu antiguo novio, no Josh.

El primer impulso de ______ fue huir del desprecio de Zayn. Pues la lastimaba. Y mucho.

—Estás… estás equivocado, Zayn.

—¿En qué sentido, ______?

—Yo… yo sólo quería estar atractiva esta noche, pero yo…

La risa dura, sin humor de Zayn, la golpeó.

—¿Atractiva? ¿Es así como te describes? —se levantó del sillón, atravesó con lentitud la habitación y depositó su vaso de oporto en una mesa lateral.

Los nervios y una especie de hipnótica fascinación la mantuvieron callada y quieta, mientras Zayn se aproximaba. ¿Qué diablos iba a hacer?

Al fin, se detuvo frente a ella.

—El vestido podía casi haber sido un error inconsciente, a pesar de la falta de ropa interior debajo. Pero no cuando se combina con otros pequeños toques maliciosos. El pelo…

Cuando él estiró una mano para colocar unos cuantos mechones más alrededor de su cara, ______ se quedó quieta, como si estuviera paralizada.

—El lápiz de labios escarlata sobre tu boca tan sexy…

______ casi gimió, cuando él pasó la punta de un dedo sobre sus labios abiertos. No era eso lo que ella quería, quería excitarlo y lo había conseguido. Pero lo que él sentía no era amor… Era sólo deseo.

—Ya sé que sólo soy un amante por poderes. Pero créeme, voy a disfrutarte de todos modos.

_____ reaccionó de pronto. Eso no era lo que ella quería…
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