Capitulo 34

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Capítulo 34

Automáticamente, pensó en su futuro hijo, y una suave sonrisa iluminó su cara. Por primera vez se alegraba de tener al hijo de Zayn. No importaba lo que sucediera, esa parte estaba bien. Muy bien.

—Pareces muy complacida contigo misma —comentó él, mientras se levantaba—. ¿Por algo que yo debiera saber?

—No. Mamá está bien. Papá está bien. Todo está bien.

—Pareces contenta.

—¿Sí?

—Sí. También estás increíblemente bella…

Los ojos de _______ se dilataron, cuando él comenzó a descender por la escalera hacia ella.

—No te asustes, ________. No voy a atacarte. Sabes, te pareces un poco a mi madre cuando era joven. Con razón le has gustado a papá.

—Qué extraño —comentó ella—. Estaba pensando en tu madre, preguntándome cómo sería ella.

—¿De veras? Qué extraño. ¿Qué te hizo pensar en ella?

—No querrías saberlo —sonrió _______.

—¿No?

—No —contestó con firmeza, y tomándolo de un brazo, cruzaron el vestíbulo—. Así que vamos, muéstrame tu casa y háblame de tu madre.

Zayn la miró un segundo, antes de avanzar.

—¿A quién o a qué debo esta nueva ________? —preguntó con cautela.

—No es una nueva _______. Es la verdadera.

—¿Cómo es?

—Encantadora, ingeniosa, cálida.

—¿Qué ha sido de la obstinada e irritante?

—La dejé en Alnwick.

—_______, yo…

—Oh, deja de estar tan serio por una vez, Zayn —lo interrumpió ella, con impaciencia—. La vida es demasiado corta para un eterno pesimismo.

Sin embargo, Zayn no consiguió alegrarse, y uno de los motivos de su tristeza fue precisamente la reacción de ______, que no pudo fingir que le gustaba la casa.

—Definitivamente, no te gusta la casa —anunció Zayn, mientras recorrían la planta alta.

—Bien, no es exactamente de mi gusto —admitió _______, al fin—. Lo siento.

—No necesitas disculparte.

—Me gusta más la planta alta. Hay más luz natural en las habitaciones.

Se quedó impresionada cuando Zayn le enseñó el armario donde guardaban la ropa blanca.

—Mi madre —explicó Zayn—, tenía obsesión por las toallas y las sábanas bonitas.
________ estuvo de acuerdo, mientras sus ojos incrédulos recorrían la cantidad de sábanas y toallas en las repisas. Había suficiente mercancía para abrir una tienda.

—A decir verdad —continuó él—, no creo que a mamá le gustara esta casa más que a ti. O tal vez fuera la tierra lo que no le gustaba. Ella era de la ciudad, igual que tú.

—¿De veras?

—Sí, de veras. Bien, eso es todo. _______ —indicó Zayn, mientras cerraba la puerta del armario—. Debo irme ahora. Quiero ver qué ha hecho Josh con los taladros. La cena es a la siete y media y, aunque no es formal, las mujeres generalmente se arreglan. Me atengo a decir que te veré entonces. Adiós… —inclinando la frente, se volvió y se alejó. Su brusca partida la dejó una sensación de vacío y desolación.

_______ sacudió la cabeza, deseando poder descifrar lo que sentía por ese hombre. La única forma de saberlo era hacer el amor con él otra vez. Era una decisión muy arriesgada y ________ sintió miedo.

¿Y si su segunda vez con Zayn resultaba un fracaso? ¿Y si Zayn la rechazaba?

No. Él no haría eso. Él no rechazaría una noche de amor libre, sin complicaciones, en su cama.

Y eso era lo que ella iba a ofrecerle.

Sin compromisos. Sin exigencias ni promesas. Sólo una noche de sexo.

_______ se estremeció de disgusto. Sin embargo, estaba decidida a no retroceder en su decisión, por mucho que su conciencia pusiera obstáculos ante la cruda realidad.
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Atraccion IrresistibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora