Capitulo Veintisiete.

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- ¿Y que si me las hago? 
- Hay muchos problemas, que no me permitirían corresponderte, además, no estoy buscando novia.
- Lo se, tu solo quieres Sexo Duro. 
Golpe bajo, con ella no quería solo sexo duro.
- Los dos sabemos que solo vamos a pasarla bien, No celos, no peleas, lo que tenga que pasar que pase. -Dije quitándome la ropa.
- No se si quiera continuar con todo esto, no soy como las chicas que acostumbras.
- _____, No puedo estar contigo, entiende.
- ¡No te estoy pidiendo que estés conmigo mierda! El problema no es que tu yo seamos diferentes, el problema en realidad es que tu eres un cobarde.
- ____, Siempre me he portado mal, nunca he sido hombre de una sola chica... Si te marque la tecla, pero no mezclo, solo ten claro, no siento nada por ti.
- Yo tampoco por ti, eres un jodido asesino.
- ¿Eso crees? - Dije tratando de mantener la compostura, pero la rabia se apoderaba de mi.
- Si, y no lo creo, lo se.
- Eres una jodida hija de puta. ¿Lo sabías? - Dije acercándome a ella - Que te quede claro, mantén tu boca cerrada.
- Hablo cuando quiero Bieber, digo lo quiero.
- No te conviene tenerme como enemigo.
- ¿Me vas a matar igual que a Samuel y quizás a cuantas personas más? Te quitaré el trabajo. Hazlo ahora.
- Maldita sea _____. Corta la mierda. No te haré daño, pero me aburres.
- ¿Te aburro?
- Si hablas mucho, esperas mucho.
- Joder, puedo hacer lo que quiera Bieber, que haya aceptado lo que propusiste no quiere que decir que siga tus putas ordenes, o que tenga que hacer, decir o ignorar cosas que no quiero. No soy tu muñeca.
- La propuesta tenía reglas, Winston. 
- Pero.. -la interrumpí.
- Estoy exhausto ______. -dicho esto, me acosté.
- ¿Qué tiene que ver eso? -preguntó ofendida.
- ________. No dejas de hablar. Ya ni mi madre me jode tanto. Por dios. -puse los ojos en blanco, le di la espalda.

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Me quedé ahí, quieta, tratando de asimilar todo lo que acaba de pasar. Tenía rabia, tenía miedo, tenía pena... Quería decirle muchas cosas más pero después de lo último que dijo un nudo se formó en mi garganta. El estaba acostado mientras yo seguía parada en el medio de la habitación. 

Trate de volver a mi unos minutos, decidí ir a bañarme y luego agarraría lo que encontrara y me iría a dormir en una de las tantas habitaciones que tiene Justin. No quería saber nada de él en ese momento.. algo dentro de mi se volvió a quebrar.

Silenciosamente me dirigí al baño, me miré al espejo. Me veía distinta. Dios, me siento un desastre. ¿Estará bien lo que he aceptado? No me siento tranquila estando aquí. No necesito de nadie. Menos de Justin. De un momento a otro sentí mis sentimientos caer por mis mejillas, mis lagrimas caían. Mi decepción y desesperación. No soy la tonta de nadie. Bajé mi mirada y miré mis manos temblorosas. Limpié bruscamente mis lagrimas. No soy la misma _______. Estar con Justin me cambió y para mal. Soy sarcástica, cruel, violenta. No me reconozco. Subí mi mirada, viéndome al espejo. Sin notarlo yo misma me estoy mirando con odio. Veámosle el lado bueno al asunto, le daré una probada de su propio chocolate. Maldito Bieber.

Él no se saldría con la suya. Puede ser que todas las mujeres con las estuvo antes logró que ellas le hicieran caso. Pero conmigo no.
Encendí la ducha, me saqué la ropa y me metí. El agua caliente me relajo y me tome todo el tiempo que necesitaba para relajarme. Estuve por lo menos 15 minutos cuando salí y me puse la pijama. 

Abrí la puerta lentamente para no despertar a Justin y tener que lidiar con otra pelea más. Agarre algo de ropa y salí de la habitación. No conocía en absoluto toda la casa, así que decidí buscar puerta por puerta alguna habitación.
Me dirigí a la de al lado y era una oficina, seguí por la siguiente puerta y era una sala de entretención, fui hasta la siguiente y encontré una hermosa habitación.

- ¡Bingo! - Susurré mientras cerraba la puerta detrás de mi.
Me acomode enseguida, había sido un día largo y solo quería recostarme y dormir. Apague la luz y me acosté, Entonces escuche pasos, y luego la luz de afuera se filtro hasta la cama. Él estaba parado en la puerta, con cara de sueño. Se veía tan sexy.

- No... No consigo dormir sin ti, creo que me he acostumbrado...

Fearless (dangerous Temptation) Justin Bieber 	Donde viven las historias. Descúbrelo ahora