Ya estamos en el avión, estoy sentado junto a James, delante van Ian y John, estoy algo nervioso, es la primera vez que me subo a un avión y me siento algo inseguro sin saber como será el viaje.
-No te preocupes, todo irá bien. -James sostiene mi mano, hablando bajito, animándome. -Es un viaje algo largo, pero puedes dormir.
Son las seis de la mañana estábamos en el aeropuerto a las cuatro de la madrugada, por lo que todos estamos cansados así que no hay ruido de conversaciones en el avión, solo se escuchan a los auxiliares de vuelo.
Caí en brazos de Morfeo en segundo, despertando unas dos horas más tarde, estaba recostado sobre James, no me moví, ya que estaba cómodo, solo observé como sus rápidos dedos teclean en un pequeño portátil, tan concentrado que no se ha dado cuenta de que desperté. Elevo la mirada para observar su rostro concentrado. Es tan guapo, me siento con ganas de suspirar mientras le observo, tal como haría un quinceañero enamorado.
-No pensé que te trajeras trabajo, creí que estarías totalmente disponible. -Me miró sorprendido de verme despierto, una pequeña sonrisa se le escapó de entre los labios.
-Tengo que finalizar este informe, me da tiempo a acabarlo durante el vuelo. Una vez pongamos los pies en tierra no haré nada más. -Baja un poco la cabeza y me besa en la frente. -Duerme un poco más, aún nos quedan tres horas de vuelo.
-Ya no puedo dormir mucho más. Pero no te preocupes, termina ese rollo. Voy un momento al baño y después jugaré con algo en mi Tablet.
-De acuerdo, gracias. No me falta mucho para finalizar mi trabajo.
Por fin estamos en el aeropuerto, tras seis largas horas de vuelo, aunque según tengo entendido el regreso se alargan a ocho horas más o menos. Los cuatro fuimos al lavabo y tras refrescarnos un poco, tomamos nuestras maletas y salimos para encontrarnos con Iván y Moi que nos abrazan muy contentos con nuestra llegada.
- ¿Qué tal el vuelo?
-Parece mentira que vaya a hacer un año que no nos vemos.
- ¿Qué tal Sam? nos encanta los videos que nos mandas.
-Está preciosa.
-Ejem...chicos. -Todos nos giramos, Iván y Moi no habían dejado de hablar entusiasmados, una chica nos miraba a todos sonriendo. - ¿Podrían presentarnos?
Rápidamente nos presentaron a la chica, la mejor amiga de Iván y su exnovia, según nos habían contado el año pasado. Ella observa a Ian y John sonriendo, sus ojos no pierden detalle de sus manos entrelazadas. Finalmente salimos del aeropuerto, iremos en dos coches, James y yo vamos con Moi e Iván, mientras que Ian y John van en el otro coche con la chica, por lo visto es muy alocada y tenía muchas ganas de conocerlos porque es una apasionada del universo boyslove.
-Nos vamos a quedar esta semana en el hotel donde será la boda, comparten habitación, lo siento, pero...
-No hay problema, estamos muy agradecidos, no tenemos queja.
-Lo sabemos, solo queríamos deciros, que los cuatro están con el todo incluido. Nosotros también nos quedamos en el hotel, así estaremos los seis disfrutando de estos días y estamos disponibles para los arreglos de la ceremonia en el hotel.
-¿No hay problema que hagan tanto gasto en los cuatro?
-Para nada, el hotel es de mi familia, podemos permitirnos esto alguna vez. -Moi me habla con tranquilidad. -Por la boda, podemos permitirnos ciertas licencias, solo disfruten.
El hotel es grande y agradable, los tres estaremos en la misma planta en dormitorios continuos. La habitación es grande, con una gran cama reinando en la estancia, el balcón amplio con mesa y dos sillas da a un hermoso jardín y más allá se ven varias piscinas enormes, la playa de arena dorada se distingue un poco más lejos. Estoy apoyado en la barandilla escuchando la risa de los niños impresionado con la hermosa vista.
-Es precioso. -James se acerca y pone su mano en mi espalda. -Vamos a cambiarnos de ropa, para bajar con los chicos a almorzar en el restaurante.
-Primero, mejor, deshacemos las maletas. -Tiro de la pulsera que nos pusieron, para indicar nuestro estatus de clientes VIP, se acerca y le robo un pequeño beso, cuando noto la presión de su mano para acercarme más a él y profundizar el beso, me escabullo. -No hay tiempo ahora y muero de hambre.
Poco después nos encontramos los seis en el pasillo y vamos al restaurante. Del buffet voy cogiendo pequeños bocados para probar todos los platos disponibles. No esperaba que la comida me resultara tan sabrosa y caí enamorado de la famosa paella.
Tras terminar el almuerzo nos tumbamos en las hamacas bajo grandes sombrillas, los cuatro estamos agotados de tantas horas de vuelo, pero no mucho después nos tiramos a la piscina donde nos molestamos, nadamos y nos divertimos durante par de horas.
Regresamos al dormitorio nos aseamos y arreglamos para bajar a cenar, después nos sentamos en la terraza donde unos animadores amenizan la noche, tomamos unas copas conversando, parece que la confianza y comodidad obtenida hace meses, aún persiste entre nosotros. Reímos y hablamos relajadamente un rato más, pero poco después y dado lo agotado que estamos los cuatro tras tan largo viaje en avión y por lo temprano que nos levantamos, nos despedimos para ir a descansar. Antes de entrar en las habitaciones quedamos en vernos a las nueve de la mañana en el ascensor, para bajar a desayunar.
-Me encanta el hotel, la comida, la habitación. Este viaje promete. -Le comento a James mientras nos cambiamos de ropa por la de dormir. -Van a ser unas vacaciones maravillosas.
-Seguro, mañana nos van a llevar a conocer los pueblos cercanos, me apetece mucho. -Voy a responderle, pero en eso me suena el móvil, es mi madre, así que salgo al balcón para hablar con ella y la niña.
No hablé por mucho tiempo, pero cuando entré al dormitorio de nuevo, me encuentro con James ya profundamente dormido en su lado de la cama. Es normal, yo dormí en el vuelo, pero él se mantuvo despierto trabajando, no ha descansado en todo el día. Me siento a su lado y acaricio su cabeza con suavidad para no despertarlo, me hago el firme propósito de disfrutar de esta semana lo máximo posible. Le beso la frente, apago las luces, me acuesto y acomodo a su lado, cuando me acerco a su cuerpo, James, inconsciente me rodea con sus brazos pegándome a su cuerpo, le beso el cuello y siento el latido de su corazón, pausado, relajado. El mejor sitio del mundo para mí, decididamente, es entre sus brazos.Continúa>>>
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Mi familia
RomanceFINALIZADO Tom Geller un abusador, camorrista al que solo le importaba él mismo. Todo cambia al convertirse en padre soltero y la vida le enseña la importancia de la amistad. Quien iba a decirle a él que su mayor apoyo sería una de las personas a la...