El chico pelinegro se aferraba con todas sus fuertes del cuello del príncipe Tritón, el joven temblaba mientras balbuceaba un sinnumero de cosas, tenía la mirada perdida y entre sus murmullos se mezclaba un sollozo, Wang Yibo temblaba, aun no podía procesar todo lo que ocurría a su alrededor, ese nuevo mundo, esas nuevas sensaciones y sobre todo como aquel extraño ser se aferraba a su cuerpo, con rapidez lo alejó pero una vez que lo hizo el chico empezó a luchar por mantenerse a flote, el príncipe Tritón lo volvió a tomar en sus brazos.
- No...no se nadar...- El chico temblaba.- Por...por favor...no me sueltes...
-.......- Yibo volvió a permitirle que se aferrara a su cuello.
- A...ayudame por favor...tengo miedo...
- ¿Donde esta tu hogar?.- Yibo finalmente habló.
- ¿Hogar?.- El chico se agitó.- No...a mi hogar no por favor.
- No se que hacer...
- Isla...si...una isla...hay una por aquí cerca...- Sonrió entre llanto.- La vi cuando esas personas me...- Se quedó en silencio.
- ¿Isla? ¿Eso que es?
- Tierra.
- ¿Tierra?
- Por favor...por favor...ayudame...
Yibo pudo sentir el terror en los ojos del chico, algo malo le había sucedido y por esa razón no quería regresar a casa, con suavidad asintió y rodeo la cintura del joven con sus brazos, el joven Tritón empezó a nadar sin saber que rumbo tomar, el chico pelinegro pasaba del temor al asombro al ver en la forma tan veloz que ambos se desplazaban por el agua, fue cuando finalmente pudo notar que el chico a su lado era un tanto inusual.
Observó aquel pelo de color azul hondear con el viento, sus ojos azules los cuales parecían casi cristalinos, sus finos y hermosos rasgos, el chico que lo sostenía sin dudas no era un humano normal, su belleza era casi heterea, como si no fuera de ese mundo, finalmente una pequeña isla empezaba a divisarse y el chico pelinegro empezaba a sonreír con debilidad, su cuerpo estaba pesado, estaba hambriento y adolorido, el joven Tritón veía con asombro aquella isla que se presentaba ante sus ojos, la arena no era como la de su reino, era seca y brillaba bajo que gran destello, en toda su vida nunca había visto algo así, el príncipe Tritón se acercó a aquella isla con recelo y algo de temor, en silencio y con cuidado se desprendió del joven el cual dejó sostenerse de una rocas.
- Gra...gracias.- El chico seguía temblando y trataba de dibujar una sonrisa.- Estoy en deuda contigo.
- No es necesario.- Yibo intento alejarse.
- Espera...- Zhan lo detuvo.- ¿Piensas quedarte en el agua?
-......
- Salgamos, puedes resfriarte.
- ¿Resfri...?
- Vamos.- El chico empezó a trepar las rocas.
- No.
- Pero...
- No puedo.- Yibo miro las piernas del chico.- No soy como tu.
- Tu...- Zhan volvió a meterse al agua e intentó acercarse.- ¿Que eres en realidad?.- Con suavidad paso su mano por el pelo del príncipe.- Tu pelo, tus ojos. Jamás había visto algo parecido.
- Yo tampoco había visto a alguien como tú ¿Que eres?.
- Yo.- El chico sonrió con suavidad.- Soy un...Xiao Zhan.
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Azul
FantasyEl príncipe del mar ha escapado, no desea seguir los pasos de su padre, para el su libertad y su felicidad es más importante que cualquier poder, no le interesa gobernar ni ser el dueño del vasto mar, sólo le interesa vivir su vida en paz. El único...