Azul

🌊Sin ti dejaría de existir🌊

"Es el príncipe de Haiyang...capturenlo.. Noooo, no por favor...dejenlo ir...Xiao Zhan...mi hermoso Betta, siempre te voy a amar...asesinenlo...Noooo, Yibo...nooo"

- Yi...Yibo...- Zhan balbuceaba con los ojos cerrados.- Yibo...Yibo...

- ¿Zhan Zhan?.- Tawhiri trató de despertarlo.

- ¡No!.- Zhan se levantó sudando frío.

- Tranquilo.- Tawhiri acarició su espalda.

- No puedo...- Zhan llevo sus manos a su rostro y lloro.- Trato de ser fuerte, de no quebrarme pero no puedo.

- Zhan Zhan.- Tawhiri lo abrazo.

- Solo estaré tranquilo cuando el este aquí...conmigo...- Lloró.- Taw Taw, solo quiero a Yibo conmigo.

Xiao Zhan trataba de ser fuerte pero la incertidumbre muchas veces terminaba por quebrar su fortaleza, desde hace 1 semana no sabía nada de su alfa y ya empezaba a impacientarse, esta vez había una guerra por medio y sabía muy bien que en toda guerra existían pérdidas y esto era lo que lo llenaba de miedo, el omega sólo pedía que su alfa se encontrara bien, con el pasar de los días su ansiedad iba en aumento, pesadillas constantes lo atacaban, pesadillas en las cuales Wang Yibo resultaba herido o asesinado y esto lo estaba llevando a su límite.

Wen Han se desplazaba por todo el campamento militar, se sentía preocupado, la noche antes Wang Yibo había salido a toda prisa lleno de ira al enterarse que su padre había sido tomado como rehén de los Meng, trato de alcanzarlo pero lo perdió de vista, no había señales del príncipe por ningún lado, ni siquiera en el terreno en donde la batalla se efectuaba, Wen Han estaba sumido en la preocupación pensando en su amigo.

- Señorita Meng su padre envió por usted.

- ¡Déjame en paz!.- Ziyi grito.

- Sabe que aquí no está segura.

- ¿Quien sería tan osado de pisar el clan Meng?...de todas formas tenemos al estúpido y viejo rey.

- Señorita...

- ¡Largate!, quiero descansar un poco.- Sonreía.- Hoy tengo muchos ánimos, solo imaginarme el imbecil del príncipe llorando por su querido papi me da satisfacción...pero más satisfacción me dará cuando tenga que asesinar a su maldito humano a cambio de la vida de su padre...esa será mi venganza por lo que me hizo...- Miró al sirviente.- ¡Fuera!.

- Si señorita.- El sirviente salió de la habitación por lo que no se pudo percatar de lo que estaba por ocurrir.

- Maldito príncipe...maldito y sucio humano...- Los ojos de Ziyi casi salen de sus órbitas cuando se giro y se encontró de frente con Yibo quien la tomó del cuello.

- ¡Maldita serpiente Marina!.- Yibo tenía una expresión escalofriante.

- Tu...- Ziyi tembló.- Pero...co...como...

- Así como ustedes tienen sus medios nosotros también los tenemos.- Apretó más su mano.- Te dije que te quedaras quieta, que no intentaras nada...pero tenías que probarme ¿Cierto?...Bien...- Yibo dibujo media sonrisa.- Me vas a probar...

El príncipe apretó con más fuerzas su mano y se lanzó a sus labios y acesto una mordida en el labio inferior, provocando que Ziyi chillara de dolor ante la cortada que recibió, Yibo se alejó con una sonrisa llena de rabia mientras apretaba más su mano pero no contaba con que la princesa tendría un truco, con una pequeña daga la cual ocultaba Ziyi hizo un corte en el abdomen de Yibo el cual se agitó ante la sorpresa y soltó su agarre.