"TENER UNA DOBLE VIDA NO SIGNIFICA QUE DEBAS SER DIFERENTE EN CADA UNA DE ELLAS"
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NARRA PETER
— Hey, alto ahí. — me detiene Alaia cuando estoy a punto de salir del apartamento, se acerca a mí con una pequeña bolsa marrón que dice "almuerzo" — he oído en las noticias que últimamente las personas andan como locas conduciendo así que ten cuidado, si vas a usar tu traje utiliza el aire portátil porque no quiero que huela a zorrillo. Llega puntal a la entrevista.
— De acuerdo, jefa. — acepto, le doy un beso como despedida — te amo.
— Yo también.
Salgo por la puerta de una vez caminando al ascensor. Miro mi reloj, siete de la mañana. Estamos a comienzos de septiembre, el verano comienza a sentirse más, la época más calurosa del año pero aún así nos sentimos como si estuviésemos en una fogata. Literalmente llevo puesta una camisa, unos jeans, unos tenis y más nada por tener mucho calor. Comienzo a conducir al trabajo escuchando la radio donde informan sobre el estado del sol potente en la ciudad, la temperatura las próximas horas, lo normal. Agradezco que no hayan tantos problemas de superhéroes con los que tengamos los que lidiar para así poder descansar.
Alaia y yo tuvimos una charla el día de ayer, ya saben, como de esas harlas que les dan los padres a los hijos a excepción de que somos pareja. Intentamos conversar seriamente sobre el tema de construir una familia. Queremos hacerlo especial para ambos ya que es un paso gigantesco el cual daremos juntos. También tocamos el tema sobre si mudarnos pero opinamos que el apartamento es lo suficientemente grande para recibir a otra persona.
Me bajo del auto cuando llego al frente de mi edificio, camino al ascensor saludando a los demás trabajadores. Ya me siento como Alaia ya que todo el mundo la conoce. Abro la puerta de mi laboratorio encontrando enseguida a Ned.
— Peter, vinieron dos cajas más de herramientas, las tienes en tu oficina. No soy tu asistente. — me avisa
Ruedo mis ojos y voy a mi zona, me siento en la silla giratoria al frente de mi escritorio empezando a abrir las cajas mirando el interior. Mi amigo gordito entra y cierra la puerta detrás suya.
— Oye, Alaia me contó que se encontraron con su ex maquillista en el gimnasio y nos invitó a una fiesta en su yate a todos, ¿vamos a ir? — pregunta emocionado
— Eh, creo que sí... Es en dos días.
— Seguramente va a ser muy elegante, habrán muchas chicas lindas, voy a llevar mi sombrero.
— No lo usas desde la preparatoria.
— Por eso es que no he conseguido novia.
Río por sus comentarios.
— ¿hoy vas a almorzar conmigo? ¡es jueves de costillas y papas!
— Lo siento, tengo una entrevista en... Digo, tengo que hacer unas cosas del trabajo en otra empresa por lo que estaré ocupado todo ese tiempo. Perdón. — invento. Casi meto la pata.
