7

1.6K 89 25
                                    

-No... para por favor... no es cierto, ella no hizo nada...Julia...- Ana se removía entre mis brazos.

Me levanté algo desorientada y vi como ella se aferraba a mi camiseta sollozando. Supuse que estaba teniendo una pesadilla, pues seguía dormida.

-Mimi vuelve por favor...-decía con voz entrecortada.

-Ana, amor despierta-no reaccionaba asíque me separé lo que pude de ella y la removí- venga cariño, no pasa nada estoy aquí, despierta, vamos.

De un brinco Ana se incorporó y miró a todos lados mientras lágrimas caían de sus ojos.

-Mimi- cruzó su mirada con la mía y se tiró a abrazarme respirando desacompasadamente y llorando, cosa que me preocupó.

-Ya está amor, estoy aquí, estoy bien- me tumbé abrazada a ella hasta que su respiración empezó a ser regular de nuevo.- ¿Me cuentas que ha pasado?

Ella se incorporó de nuevo y respiró profundamente secándose las lágrimas.

-He tenido una pesadilla... y ha sido tan real que me ha dado muchísimo miedo Mimi- rodeé su cintura con mi brazo y dejé repetidos besos en su mejilla.

-Tranquila, estoy aquí contigo, te escucho- ella asintió.

-Soñé que Julia te pegaba, pero muy feo Mimi, no era capaz de separarla de ti y tu te quedabas inconsciente y... pensé que te perdía- volvió a echarse a llorar y la apreté contra mi cuerpo mordiendome el labio inferior sintiéndome fatal y teniendo miedo por lo que podría significar ese sueño.

-Ana, ella alguna vez te ha...- ella negó con la cabeza antes de yo acabar la frase.

-Nunca llegó a hacerlo, pero si que tuvo intención, es muy agresiva cuando se enfada y esta mañana he tenido tanto miedo al verla mirarte así... supongo que habrá sido eso- cogí su cara entre mis manos y acaricié sus mejillas quitando de ahí el resto de lágrimas.

-Estoy aquí contigo y eso no va a pasar ¿vale? Estoy bien, ya pasó todo- la vi asentir y sentí como sus manos se aferraban a mi cintura.

-No sabría que hacer si te pasara algo Mimi, no me lo perdonaría nunca- le coloqué un mechón detrás de la oreja y le sonreí.

-No va a pasarme nada, voy a estar contigo y nos vamos a cuidar las dos- ella no apartaba su mirada de la mía quedando entre nosotras un silencio que no sabría describir

-Estoy empezando a quererte demasiado y me asusta- mi corazón dejó de latir durante unos segundos.

-Yo..también Ana, yo no sabía como...-no me dió tiempo a acabar cuando ya sentí sus labios sobre los míos.

No me aparté, de hecho lo seguí sin estar totalmente segura de que esto era real, de que esto realmente estaba pasando.

Hasta que Ana se separó de mi.

-Lo siento yo... ha sido el momento no quería... no- intentaba disculparse ella.

-Tranquila, no pasa nada- coloqué mi mano en su pierna pero ella se apartó.

-No... necesito pensar, necesito irme a mi casa. Lo siento Mimi, de verdad, nos vemos después.  - y sin más cogió sus cosas y salió de mi casa dejándome allí sin saber que pensar.

Venus me miraba triste torciendo ligeramente su cabecita sin saber por qué Ana se había marchado.

No quería agobiarla pero quería asegurarme de que estaba bien asíque decidí ponerle un mensaje

Ana Banana🍌

Espero que estés bien y no haberte incómodado, no era mi intención, hablame cuando puedas, me has dejado preocupada-

Te quiero ❤️-

No supe que mas hacer, solo me quedaba esperar una respuesta que llegó a la hora de mandarle ese mensaje:

Ana Banana 🍌

-Estoy bien, solo necesito pensar, te hablaré ¿vale?

Leí el mensaje y me dejé caer en el sofá sin saber que hacer.

Me decanté por llamar a Dama y contarle todo de arriba a abajo.

Un tono, dos, tres...

-Hola amiga, pensé que no me llamarías nunca- saludó ella tan alegre como siempre.

-Laura necesito ayuda- ella rió

-Mira eh...nada mas que me llamas para contarme tus problemas amorosos- yo reí

-Que no idiota, esque últimamente no le hecho mucho caso a la gente- le confensé.

-Dime quien te tiene la cabecita así

-Conocí a una chica, en medio de la cuarentena, mi vecina. Salí al balcón a aplaudir y me ofreció una cerveza y... a partir de ahí empezamos a vernos todos los días en el balcón hasta que me invitó a cenar a su casa. Luego la invité a comer y así hemos estado estas últimas semanas. - le expliqué

-¿Es esa morena que subes siempre a Instagram?- preguntó.

-Si

-Es muy guapa, siempre has tenido buen gusto para las mujeres- rió- bueno, ¿que pasa con ella?

-Su ex no para de llamarla diciendo que le gustaría volver y la agobia. Hoy hemos salido a tomar algo y nos la hemos encontrado, Ana tenía miedo por si se acercaba y le dije que me besara y así tendría una buna excusa- me interrumpió.

-¿¡Que hiciste que?!

-Nos besamos y su ex se alejó, o eso creíamos porque cuando nos fuimos a ir dió un golpe en la mesa y empezó a montar un numerito que madre mía...- suspiré

-Madre mía Mimi, parece una mala adaptación de Wattpad- yo reí- sigue sigue.

-Bueno, pues parece que a Ana le afectó tanto ese momento que tuvo una pesadilla durmiendo la siesta y- volvió a cortarme

-¿Dormisteis juntas?- dijo sorprendida

-Siempre lo hacemos Laura, pero ese no es el punto- seguí escuchando su risa- soñó que Julia, su ex, me pegaba y yo quedaba inconsciente o algo así y dice que tuvo miedo de perderme, se despertó fatal. El caso es que después me dijo que nunca se perdonaría que me hicieran daño y que me estaba por empezando a querer demasiado y pues... no me dió tiempo a decirle que yo también porque se lanzó a besarme- Laura soltó un chillido al otro lado de la línea.

-Perdón, la emoción del momento, sigue

-Pues yo le seguí el beso pero de buenas a primeras se apartó pidiendo perdón y diciendo mil excusas. Se fué a su casa y yo... no se que hacer Laura, ¿crees que la he liado?- pregunté preocupada

-No la has liado, te ha besado y se ha chocado con la realidad, tendrá que aclarar sus sentimientos por ti. Déjale tiempo y te hablará. Puede ser mañana, en una hora, en dos días o en una semana, pero ella te hablará- yo asentí aunque no pudiese verme.

-Gracias, necesitaba esto- suspiré con alivio.

-No las des tonta

Me quedé un tiempo más hablando con ella hasta que consideré que ya era hora de cenar, asíque colgué y me preparé la cena.

Me di una ducha después de comer y me acosté pensando en todo lo que había pasado.

¿Como estaría Ana? ¿Que sentiría por mi?

Lo que yo tenía claro es que la quería, la quería y mucho

Mi destino en tu balcón // warmiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora